OPINION
La guerra ya empezó
Por Ernesto López* |
El
lacónico comentario que el presidente electo dejó caer como al pasar, en París, durante
la reunión de la Internacional Socialista, encendió la luz roja: “Dicen que ayudan,
pero no ayudan nada”. Obviamente, Fernando de la Rúa se refería al Partido
Justicialista.
A 20 días de su salida del poder, el peronismo neoliberal que encabeza Carlos Menem se
anotó algunos últimos porotos: a) en su carácter de presidente del Senado, Carlos
Ruckauf hizo efectivos a 86 empleados transitorios de esa Cámara, todos ellos del PJ,
muchos ligados por lazos de parentesco con legisladores; b) durante la inauguración de la
sede diplomática de la Autoridad Nacional Palestina en Buenos Aires, Menem invitó a
Arafat a visitar el país, “aunque yo ya no sea presidente”; c) el canciller Di
Tella designó 9 embajadores nuevos; d) se puso en marcha una iniciativa para establecer
un aumento general de las tarifas ferroviarias –prevé un incremento del 128 por
ciento en 5 años– mediante un oscuro ardid en la Comisión correspondiente de la
Cámara de Diputados; e) está también en marcha una pérfida maniobra para usurpar la
banca que dejará vacante el aliancista Alfredo Avelín cuando asuma la gobernación de
San Juan; f) contra lo que dispone la ley, fue designado Rodolfo Barra en la Auditoría
General de la Nación; g) “last but not least”, el PJ se apresta a aprobar una
Ley de Presupuesto que encubre un déficit de 2000 millones de pesos y viola la Ley de
Convertibilidad Fiscal.
El menemismo entiende la política como una ecuación de suma cero: lo que suma de un
lado, resta del otro. En función de esto desarrolla un juego de obstrucciones,
zancadillas, trampas y traiciones, que disuelve la palabra, envilece la política y
precariza la democracia. (Y que aplica incluso, de un modo patéticamente visible, a su
propia vida interna.) Declamará ser proclive al diálogo y a la colaboración pero
actuará de manera contraria. El gobierno entrante debe reconocerlo y andar con pies de
plomo. No habrá un verano de convivencia, como algunos suponíamos. Lamentablemente, la
guerra ya empezó.
* Sociólogo. Vicerrector de la Universidad Nacional de Quilmes. |
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