Por Fernando Cibeira Quiero agradecer a
Chacho Alvarez la amplitud de criterio, dijo Fernando de la Rúa ayer durante la
presentación de ministros. La frase sonó a reconocimiento por los primeros sapos que el
Frepaso debió digerir a partir de la masiva designación de economistas de tinte liberal
en el gabinete de la Alianza. De cualquier forma, dentro del Frepaso aseguran que la
relación entre los socios no está dañada y que la módica representación en el
Ejecutivo sólo serán ministros Graciela Fernández Meijide y Alberto
Flamarique estará compensada con que se ubicarán en las dos áreas donde el
gobierno de la coalición prometió poner mayor énfasis. Las expectativas, ahora, están
colocadas en la ubicación de sus equipos en las segundas líneas. El Frepaso tiene la
aspiración de ingresar un secretario en cada cartera, pero saben que no será sencillo.
Hay algunos ministros que todavía no mostraron espíritu aliancista,
sostienen.
No había mucho Frepaso en el acto de anuncio en el Hotel Panamericano. Sólo se veía al
candidato a jefe de gobierno porteño, Aníbal Ibarra y al diputado bonaerense Rodolfo
Rodil. Había algunos más: los que se aprestan a estrenar un cargo, como el cordobés
Horacio Viqueira, futuro secretario de Empleo, o Eduardo Sguiglia, quien ocuparía el
ORSA, el organismo que controla los aeropuertos. Con el diploma que les otorgaba cuatro
años más como diputados bajo el brazo, Darío Alessandro y Nilda Garré llegaron tarde y
subieron directamente a los pisos altos a saludar.
En los albores de la campaña de la Alianza, se especulaba que los ministerios del Frepaso
serían cuatro, agregando en la hipótesis Justicia y Educación. Ayer, cerca de Chacho
Alvarez justificaban la reducción en el resultado del 24 de octubre. Lo de la
provincia de Buenos Aires fue determinante. No podemos exigir más, respondían.
Luego de la derrota en la provincia, el candidato frepasista a ministro de Justicia, el
constitucionalista Rafael Bielsa, terminó recalando en la SIGEN.
En Educación, en cambio, dentro del mismo Frepaso reconocen que, por motivos
desconocidos, al propio Alvarez no le disgustaba el nombre de Juan Llach. No se
puede decir que lo haya impulsado, pero lo cierto es que no lo vetó, explicaba un
amigo del vice electo. Ahora, la cantidad de planteos lanzados desde filas frepasistas
complicó mucho la incorporación de equipos propios en Educación. Ayer se mencionaba la
posibilidad de que Ricardo Ferraro que fue de los que mantuvo una posición más
contemporarizadora con Llach se quedara con una secretaría.
Hay que tener en cuenta que la ayuda social y el desempleo son las dos áreas
centrales del Gobierno. Creo que con Acción Social y Trabajo se cumplen las expectativas
que podíamos tener, sostenía uno de los diputados que suele argumentar a favor de
las posiciones oficiales. En este sentido marcaba que el ministerio de Fernández Meijide
no había sido desmembrado y que conservó Turismo, Deportes y Recursos Naturales. En
estos dos últimos lugares ya designó a los frepasistas Hugo Masci y Oscar Massei.
También recordaban que la Secretaría de Ciencia, que manejará el socialista Dante
Caputo, tiene casi un rango ministerial.
A partir de hoy, la lucha del Frepaso pasará por hacerse de la mayor cantidad de
secretarías posible. La aspiración es de una por ministerio pero aceptan que podrían
terminar siendo menos. Por ejemplo, que Federico Storani lleve a Interior al renovador
salteño Ricardo Gómez Diez significaba un lugar menos para el Frepaso, pero era aceptado
porque es un nombramiento que ayuda al espíritu aliancista.
Chacho está trabajando personalmente por los espacios de su partido. Le acercó a Ricardo
Gil Lavedra el nombre de Nilda Garré como posible secretaria de Justicia, pero hasta ayer
no había una definición. El Frepaso aspira a un lugar en Justicia luego de que la
fiscalía anticorrupción, en la que pensaba colocar a un jurista propio,
quedarafinalmente para el ex camarista federal y socio de León Arslanián, Jorge
Torlasco.
También están esperando algún llamado de Rodolfo Terragno porque suponen que alguna de
las estratégicas secretarías de la Jefatura de Gabinete serán para su partido. Además,
hay expectativas en que César Mayoral ocupe un lugar relevante en Cancillería.
Desde estos cargos, y desde el gobierno porteño (ver aparte), el Frepaso espera hacer una
gestión diferenciadora dentro del gobierno aliancista, tal como lo prometió Chacho luego
de que Graciela perdiera su interna con De la Rúa. Por lo pronto, ya preparan la batería
de medidas de ayuda social y de planes de empleo con los que buscarán lucirse.
Los cargos en la ciudad Las expectativas del Frepaso no sólo están puestas en colocar a sus hombres
en las segundas líneas del Ejecutivo nacional. Con el pase a la Rosada de funcionarios
que vinieron acompañando a Fernando de la Rúa en la ciudad quedaron cuatro secretarías
vacantes, que en el Frepaso esperan cubrir con su propia tropa. De esta forma suponen que
le dotarán a la candidatura a jefe de gobierno de Aníbal Ibarra de una imagen de
experiencia de gestión, algo que hasta ahora no tiene y aparece como su principal flanco
frente a candidatos como Domingo Cavallo y Gustavo Beliz. Además, Ibarra acompañará al
actual vicejefe, Enrique Olivera, en las reuniones de gabinete y harán juntos incursiones
por los barrios. |
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