Graciela y Felgueras disputan el PAMI con Lombardo. La ANSeS sigue en disputa. Diana Conti será subsecretaria de Derechos Humanos.
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Con los ministros ya designados, en la Alianza continuaron ayer delineando las funciones que tendrá cada cartera, un ejercicio que supone la definición de espacios de poder y que, por lo tanto, genera tironeos entre los futuros funcionarios. Un ejemplo es el PAMI, que podría quedar bajo la órbita de Graciela Fernández Meijide en Acción Social o de Héctor Lombardo en Salud. El otro tema de discusión pasa por la integración de las segundas filas de los diferentes ministerios, que también se va resolviendo de a poco: la diputada frepasista Diana Conti habló ayer con el próximo titular de Justicia, Ricardo Gil Lavedra, quien le ofreció hacerse cargo de la Subsecretaría de Derechos Humanos. Los tiempos apremian. Es que, aunque no es necesario que especifique qué secretarías dependerán de cada cartera, la Ley de Ministerios que Fernando de la Rúa quiere tener lista la semana próxima debe precisar las atribuciones de cada organismo. Los encargados del diseño de la estructura, Jorge de la Rúa y Marcos Makón, reciben diariamente decenas de llamados de los próximos funcionarios que buscan preservar las competencias de sus ministerios. El PAMI actualmente es un ente descentralizado, pero la idea es que, en simultáneo con su intervención, pase a depender de un ministerio. Héctor Lombardo, designado ministro de Salud, ha hablado profusamente de los planes de la Alianza en la obra social de los jubilados. Sin embargo, la versión más repetida daba al PAMI como próxima dependencia de Acción Social. Ayer, Fernández Meijide se reunió a la tarde en el Hotel Panamericano con Cecilia Felgueras, su futura viceministra, para conversar sobre los planes sociales que implementará la Alianza. Todavía no queda claro si, en caso de que se confirme el pase a Acción Social, la obra social de los jubilados quedará bajo el mando de Graciela o formará parte de la secretaría de Felgueras. Cecilia quiere que el PAMI dependa directamente de ella, aseguraron ayer cerca de la funcionaria porteña. Otro organismo que podría ser transferido es el de Defensa del Consumidor, que hoy está bajo la órbita de Secretaría de Comercio del Ministerio de Economía y que podría pasar a Justicia. Algo similar ocurre con la Subsecretaría de Derechos Humanos: actualmente depende del Ministerio del Interior, pero ya está confirmado que será transferida a Justicia, un reclamo histórico de los organismos de derechos humanos. Ayer, Gil Lavedra se comunicó con Diana Conti para ofrecerle este cargo que, según sostienen en el Frepaso, le corresponde a esa fuerza por un acuerdo anterior a las elecciones. Diputada nacional por la provincia de Buenos Aires, Conti fue uno de los ocho dirigentes del Frepaso que firmaron el proyecto de anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final que tanto revuelo causó dentro de la Alianza. Tiene buen diálogo con los organismos de derechos humanos e investigó los negocios de Emilio Massera. Otro que definió algunos de sus colaboradores fue Rodolfo Terragno en la Jefatura de Gabinete. En la Secretaría de Control Estratégico quedaría el ex funcionario alfonsinista Raúl Palacio, mientras que en Equidad Fiscal iría Marta Barros, una especialista que se desempeña en la Fundación Siglo XXI. Un tercer funcionario será Leandro Papik. Hay cuatro lugares relevantes que aún no ha sido definidos por De la Rúa. Para el PAMI y la ANSeS se barajaron una serie de nombres, desde el bonaerense Melchor Posse al cordobés Ramón Mestre, respaldado por el poderoso radicalismo de su provincia. Otra incógnita es la SIDE. De la Rúa quiere ocuparse personalmente y necesita a alguien de confianza, aseguran cerca del presidente electo. Los nombres que sonaron para comandar a los espías son dos: el cordobés Eduardo Capdevilla, ex funcionario de Eduardo Angeloz, y Horacio Jaunarena, hombre de confianza de Federico Storani. La última duda pasa por los cargos principales en el Ministerio del Interior, como el secretario de Seguridad. Para estos lugares se barajaban ayer los nombres de los diputados cordobeses Carlos Becerra y José Cafferata Nores.
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