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Por Mariana Carbajal  "Quiero
aclarar que ellos me han pedido que esté acá", aclaró Mariano Grondona al mostrar
frente a las cámaras de TV a Josecito. La exigencia la habían puesto los padres del
niño, presentes junto a él y al periodista en el estudio de Azul Televisión. La
exposición del chico y su traumática historia en el programa "Hora clave", el
noticiero de Azul Televisión y otros canales generó duras críticas. "Nunca se
debió haber expuesto así a un menor", coincidieron en objetar la diputada de la
Alianza, Elisa Carrió; la directora porteña de la Familia y el Menor, María Orsenigo;
la abogada Carmen González; y el sociólogo especializado en Comunicación, Alberto
Quevedo. "La exhibición del pequeño como se lo mostró en la noche del jueves viola
el derecho a la intimidad contemplado en la Convención Internacional por los Derechos del
Niño", señalaron. Ante todo está "el deber de informar y mostrar la realidad
tal como es", salió al cruce de los cuestionamientos Ricardo Cámara, director de
noticias de Azul Televisión."La exposición de este tipo de casos en la TV tiene que ver con una explotación comercial de las miserias humanas", opinó Carrió, quien, junto a la abogada González, estuvo presente en el estudio durante la emisión de "Hora clave", mientras las cámaras mostraban al niño, visiblemente presionado por sus padres para que hablara, dando una versión de los hechos que los beneficiara. "Hoy la frontera entre los programas políticos y los amarillos se ha desdibujado", observó Quevedo, secretario académico de Flacso. "Ningún adulto tiene derecho a meterse en la intimidad de un menor", señaló González, especializada en temas vinculados con menores. Página/12 intentó ayer consultar a Grondona, pero el periodista no pudo ser localizado. "La exposición del niño fue un acto de violencia más hacia él. Aunque la critico, estoy segura de que Grondona no lo hizo por amarillismo sino por su criterio filosófico de que se debe mostrar todo", consideró Carrió. "Yo soy periodista y mi deber es informar y mostrar. La historia de Josecito había tomado estado público en la mayoría de los canales de televisión de Buenos Aires. No fuimos nosotros quienes lo pusimos en el aire. Además, me pareció periodísticamente importante mostrarla como paradigmática de lo que ocurre con los niños en estado de pobreza en la Argentina", argumentó Cámara. El caso "Josecito" se gestó en el programa de Grondona. En la última emisión de "Hora clave", a partir de las 23, en pleno horario de protección al menor, y con el chico en el estudio, el periodista retomó la historia del pequeño, que había empezado a contar cuatro meses atrás. Grondona mostró primero un video de Josecito, correspondiente a una emisión de julio, donde el pequeño contaba su experiencia de chico de la calle y relataba cómo había llegado, casi medio año antes, al hogar de Mónica Carranza, después de dormir durante varios días en una plaza. "Ahí conocí a mi mamá Mónica", destacaba el niño el fuerte vínculo afectivo que había entablado con la mujer, que encabeza el comedor infantil de Los Carasucias, en el barrio porteño de Mataderos. Según Carranza, Josecito le había dicho que no tenía madre y que se había escapado de su casa porque su padre lo obligaba a mendigar. Los padres, luego, lo negaron. Las escenas del segundo video que presentó Grondona fueron violentas, sórdidas y desgarradoras. Había sido filmado días atrás con una cámara casera por la gente del hogar de Los Carasucias, cuando los padres de Josecito --su madre, en realidad, no había muerto-- llegaron al lugar para reencontrarse con el niño: el pequeño se aferraba angustiado a la cintura de Carranza, sin querer siquiera mirarlos. Hasta que en un momento, el padre, José Miguel, empezó a tironearlo y finalmente lo arrancó por la fuerza. Desesperado, Josecito trató de zafarse, lloró, se soltó y volvió a abrazar a Carranza. "¡Déjenme!", suplicó. El tercer video que se vio en "Hora clave" fue grabado por las cámaras de Azul Noticias. La primera imagen mostró a Carranza abriendo la puerta de su casa. Un periodista le preguntó si iba a entregar al chico. Ella respondió afirmativamente, pero después Josecito dijo que no. "Sin gritos, sin violencia, luego de una hora de diálogo, la historia tuvo un final feliz", concluyó el cronista y se vio al niño, sonriente, retirándose con sus padres en un automóvil. Cerca de la medianoche del jueves, en el set de "Hora clave" se escribió un capítulo más de la historia, pero con Josecito en vivo y en directo, de frente a las cámaras. "Quiero aclarar que ellos me han pedido que esté acá", se excusó Grondona, señalando a los padres del niño. "Si ésa era la condición, no tendría que haber tratado el tema en el programa", cuestionó la abogada González. "Si el caso estaba en manos de un juzgado, debió haberse tratado en un ámbito judicial, con equipos técnicos especializados y sin cámaras de televisión", opinó Orsenigo, directora porteña del Menor y la Familia.
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