Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


AGENDA OPTIMISTA DE REP PARA EL AÑO QUE VIENE
El 2000 será bueno o no será

El humorista de Página/12 presenta su nueva obra, en donde Lukas apenas aparece ¡sonriente! y los protagonistas pasan a ser Gaspar, Auxilio y los bebés mellizos. “Es como si fuera el cuaderno nuevo de la primaria, dan ganas de empezarlo y haciendo siempre buena letra”, dice el autor.

Hay frases de Julio Verne, Henry Miller, Whitman y Fangio, un horóscopo alentador y mucho, mucho espíritu positivo.

na33fo01.gif (29583 bytes)

t.gif (862 bytes)  “Porque éste era el último año del cerdo y me parece que ahora a uno se le abre un nuevo talonario. Que debe ser llenado con optimismo”, reflexiona Miguel Rep cuando se lo interroga sobre el porqué del contraste 1999-agenda pesimista/2000-agenda optimista. De un estado a otro, sin escalas. “A la maldita cifra redonda del 2000 no le doy mucha bola en verdad”, dirá más tarde. “Pero sí que empieza un nuevo ciclo. La agenda del año pasado era como muy barroca, como si fuera una suma de muchas cosas que habían pasado e iban a pasar. Ahora hay como una voluntad de empezar de cero”.¿Y Lukas, el dark eternamente conflictuado y abrumado por el ser y la vida, eje central del bajón propuesto por la anterior edición? “Lukas no puede soportar otra cosa que no sea una agenda pesimista. En esta, creo que aparece una sola vez, pero para mostrar el contraste. Pero están los otros, que no creo que sean optimistas. En todo caso, son vitales. Por ejemplo, en el caso de Gaspar, que creo es el menos vital, por lo menos tiene esa cosa de haber llevado adelante su familia, que es lo único que le salió más o menos bien, pese a sus bajones y a haber pasado por todas las tormentas. Están, además, Auxilio y los mellizos, Luis y Septiembre... Pero la verdad es que más que los personajes, lo que está en la agenda es una cosa más metafísica: los diálogos con la luna, con el mar. Las búsquedas del bebé, lo que piensan. Es como ¿qué será de esto?”. Diseñada por Alejandro Ros, editada y seleccionada por Mariela Mosnaim y, detalle fundamental para entender el contraste con la del año pasado, en colores, la agenda 2000 de Página/12 es, en palabras de su autor, “una respuesta”. En cada semana del año por venir, un pequeño cuadro expresa la sensación positiva del momento. No hay lugar para la tristeza. “Lukas sólo podía hacer una agenda en 1999. Porque se acaba algo... Yo sabía que nunca más iba a aparecer él en una agenda”, dice.Sin embargo, el primer intento en cuestión, resultó –contradiciendo su espíritu, inclusive– todo un éxito. El mismo autor lo ha comprobado a lo largo de este año, y de todas las maneras posibles: por amigos, conocidos y desconocidos que usaron y/o regalaron el ejemplar. “Todos los que la tienen la usan. Eso está bueno. Aunque era difícil y conflictiva para entender, inclusive para vender. Había gente que creía que traía mala suerte, mala onda. Alguna gente habrá pensado ‘¿cómo me vas a regalar una agenda pesimista? ¡Es un bajón!’, porque puede aceptar la fatalidad de la Ley de Murphy, pero no la idea de pensar un año entero pesimista. Como al final ocurrió: fue un año horrible. En fin, creo que la agenda acompañó esa horripilancia de este año. Esperemos que la agenda optimista acompañe esa cosa de bañarse, salir limpio a enfrentar el día”, monologa Rep.Aunque no tenga “proyección de los días” ni tampoco una idea certera sobre “qué va a ocurrir pasado mañana”, el humorista piensa que una agenda también sirve para una pequeña pero importante duda temporal. Del tipo: “¿Qué será de nuestras vidas el 8 de agosto del 2000? No lo sé, aunque no soy de consultar mucho una agenda. Sin embargo, lo que descubrí con la agenda de Lukas es que estaba buena, no tanto para recordar compromisos, sino para recordar hitos que sucedieron en tu vida. Quizás dentro de diez años, uno querrá saber qué pasó tal día y para eso está bueno tener una suerte de testimonio escrito. Y te acordás: ‘Ah, ese día estaba almorzando con Hiroito...’ (risas). Eso es algo que hace Quino. Anota todo: hasta qué película vio. Entonces él sabe que tal día de tal año vio La manzana. Yo me acuerdo, por ejemplo, qué hice y con quién estaba la noche después del 5 a 0 de Colombia a la Selección en la cancha de River. Yo propongo que la agenda también se utilice para escribir, incluso en el día posterior, qué pasó. Tipo: ‘Ayer debuté en la isla Maciel’... (risas). O ‘Hoy asumo como jefe de Gabinete’ Para eso está buena. El objetivo final de una agenda optimista es, justamente, que la gente la use para recordar lo bueno”.

 

PRINCIPAL