|
Por A. H. M. El Senado dio otro paso en el camino hacia la destitución del presidente del Banco Central, Pedro Pou, al aprobar en el recinto, el miércoles por la noche, la creación de una comisión que deberá establecer el mecanismo para removerlo del cargo. En respuesta a una iniciativa aliancista que contó con el apoyo de varios legisladores del PJ, la Cámara Alta convocó a una comisión especial facultada para desplazar al banquero de su puesto. Este cuerpo estará a cargo de los titulares de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Economía de ambas cámaras legislativas: Alcides López (UCR-Alianza) y Carlos Verna (PJ), en el Senado; y en Diputados Raúl Baglini (UCR-Alianza) que encabeza la de Presupuesto. El proyecto de resolución se aprobó aprovechando la ausencia de los dos hombres que sostuvieron a Pou ante cada embestida, Eduardo Menem y Eduardo Bauzá. En su texto, la iniciativa ordena la convocatoria a la comisión prevista en el artículo noveno de la Carta Orgánica del Banco Central de la República Argentina, a efectos de que en caso que esta así lo considere, proceda a recomendar al Poder Ejecutivo Nacional la remoción del Presidente de dicha entidad, Pedro Pou. La decisión final sobre la continuidad de Pou quien tiene mandato hasta el 2004 recae sobre el Presidente de la Nación, con lo cual dicha comisión sólo tiene facultad para recomendar su destitución por los cargos de mal desempeño o incumplimiento de los deberes de funcionario público. El proyecto fue redactado por López, José Genoud y Pedro Del Piero (Frepaso) y aprobado el primero de diciembre por catorce legisladores de las comisiones de Economía y Presupuesto. Entre los justicialistas reacios a Pou aparecen Augusto Alasino, Carlos Verna, Ricardo Branda y Jorge Yoma, quienes pretenden desplazar a los actuales miembros del directorio del Central. La dura puja que mantienen desde hace tiempo el banquero y los legisladores se agravó en los últimos dos meses a partir de la intención de Pou de designar a Roxana Matías Gago y Guillermo Lesniewer, dos personas de su confianza para cubrir lugares vacantes en el directorio de la entidad, pero los senadores que integran la Comisión de Acuerdos rechazaron sus pliegos. Las diferencias de los senadores con Pou tienen orígenes que exceden la polémica por la designación de los directores, que motivó hace tres meses la abrupta interrupción de una reunión entre ambas partes y la amenaza de renuncia del banquero. Una buena porción de los legisladores cuestionan a Pou porque consideran inadmisible el proceso de exagerada extranjerización de la banca, el intento de privatizar el Banco Nación y la falta de apoyo a las PyMES pese a sostener un sobreencaje de 20.000 millones de pesos que no sirve más que para mantener tranquilo a los mercados, como señaló anoche un legislador. Los senadores también tienen en cuenta las argumentaciones que el juez Gabriel Cavallo realizó para procesar a Pou, y a un grupo de directores del Central, tras las caídas de los bancos Mayo y Patricios, por considerarlos responsables del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario publico. En su momento, los senadores señalaron en el dictamen que las autoridades del Central no fueron diligentes en tiempo y forma pese a que contaban con informes concretos que daban cuenta de la delicada situación del Patricios mucho antes de su suspensión. Mientras que en otro párrafo señalaron que la absorción del Patricios por el Mayo se llevó adelante a pesar de informes técnicos que desaconsejaban la operación.
|