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Por Mark Salisbury Bienvenidos a la tierra de Burton, la idea que tiene el director del más oscuro de los Batman de un asentamiento holandés en Nueva York en 1799. Fue construido en un campo abierto cerca de Marlow, en Buckinghamshire, Inglaterra, con un costo de un millón y medio de dólares por sólo cuatro semanas de rodaje. Decidieron filmar en Gran Bretaña cuando no pudieron encontrar un pueblo real en Estados Unidos, pero finalmente terminaron construyendo uno. Como de costumbre, Burton exhibe su hiperactividad, apenas capaz de contener su excitación. Ni la súbita aparición del sol, inaceptable debido a la naturaleza oscura y ominosa de la escena que deben filmar esa mañana, puede nublar su estado de ánimo. A Burton le encanta este lugar. Para empezar, le recuerda a los suburbios de Nueva York, donde pasa mucho de su tiempo cuando no está trabajando. Y además, está haciendo lo que más le gusta hacer. "Es duro, pero lo que más disfruto en la vida es estar en el set. Hay una atmósfera tan buena." The Legend of Sleepy Hollow, de Washington Irving, fue publicado por primera vez en 1819. Es la historia de Ichabod Crane, un maestro de escuela, seductor, que cae en desgracia con el Jinete Sin Cabeza. Es un clásico estadounidense. Aunque hubo una versión para TV y un corto animado de Disney (en 1949) que a Burton le gustó mucho ("tenía una buena mezcla de humor y terror"), ésta es la primera adaptación para cine desde la versión muda de 1912. Burton entró en el proyecto el año pasado, cuando fracasó su plan de rodar Superman (con Nicolas Cage como el hombre de hierro) y el productor Scott Rudin le ofreció el guión de Sleepy Hollow escrito por el guionista de Pecados capitales, Andrew Kevin Walker, con la colaboración de Tom Stoppard (de Shakespeare in Love). Estaba perfectamente a tono con las sensibilidades góticas de Burton y su estilo sobrenatural, y el director inmediatamente se conectó con la idea de un personaje "que vive dentro de su cabeza y se enfrenta a otro que ni siquiera la tiene". Aunque Paramount quería una superestrella para interpretar a Crane --que en el guión dejó de ser un maestro, reinventándolo como un poco ortodoxo detective neoyorquino enviado a Sleepy Hollow para investigar una serie de brutales crímenes--, Burton quería trabajar con el protagonista de El joven manos de tijeras y Ed Wood. "Me gusta trabajar con Depp porque es un camaleón, y es muy abierto y receptivo a mis ideas." El actor asegura que "fue excitante volver a trabajar con Tim, volver a entrar en su ritmo, colaborar. Es como estar en casa, es terriblemente cómodo. Eso fue lo que más me sedujo del proyecto". Y, como Burton, se sintió atraído por la historia. "Me encantaba el cuento cuando era chico. Tim y yo somos muy parecidos en eso: yo estaba obsesionado y me pasaba dibujando a Drácula y Frankenstein a una edad muy temprana. Siempre fui bastante oscuro... y siempre amé la imagen del Jinete sin Cabeza." Depp hace un gran trabajo, intrigante, dando otra actuación asombrosa, con una interpretación que es una mezcla de manojo de nervios y sutileza. Es fácil entender por qué actor y director trabajan tan bien juntos, más allá de su obvia amistad: Burton le da la posibilidad a Depp de ir más allá. Aunque Depp dice que Crane fue escrito como un protagonista standard, "un poco aprensivo, como en el libro, pero no tanto", la decisión que tomó con Burton fue "acercarlo más al texto original, e incluso ir más allá. Hacerlo un poco remilgado y torpe, como una niña púber. Es muy impresionable cuando ve un cadáver, o cuando ve un gusano... se asusta". El Crane de Depp es parte Roddy McDowall, parte Angela Lansbury y parte Basil Rathbone. "Siempre creí que Roddy tenía un don muy interesante, una gran presencia, mucha facilidad, era un actor peculiar, una de esas personas únicas", dice el actor. "Angela Lansbury fue otra inspiración, me encantó su trabajo en Muerte en el Nilo, la encuentro fascinante. Ellos dos fueron mis musas, y quizá también un poco de Basil Rathbone. Pero mi trabajo es mucho más femenino." "Es un protagonista extraño", asegura Christina Ricci, que interpreta a Katrina, la misteriosa hija de los Van Tassel, la familia más rica de Sleepy Hollow, y compañera de Crane. "Ichabod es una persona muy extraña, y es complicado ser romántica en un film como éste." Tan raro era todo que, dice Ricci, en las primeras semanas le costaba entender en qué tipo de film estaba trabajando. "No entendía nada", confiesa. "Usualmente siempre tenés una idea de cómo será la película cuando esté terminada. Por supuesto uno lee el guión, pero el guión es una cáscara, le falta el tono y la voz que el director le va a imprimir. Es difícil darse cuenta, y además nuestros diálogos son dramáticos y exagerados. La forma en que yo veo a mi personaje, siendo este film una mezcla de cuento de hadas e historia de horror, es la típica damisela con problemas. Me rescatan bastante, incluso." Depp se ríe cuando se le menciona la confusión de Ricci. "Creo que tiene que correr demasiado en esta película --dice--, y eso no le gusta a Christina". Ver a Burton y a Depp en el set juntos es como observar a dos escolares traviesos, dos miembros de una pequeña sociedad secreta tramando un crimen, riéndose siempre. "Nos siguen causando gracia las mismas cosas que nos divertían en El joven... y Ed Wood", cuenta Depp. Además, ambos están obsesionados con celebridades del pasado como Georgie Jessel. "Hablamos todo el tiempo de estos individuos, y nos damos cuenta de que ya no hay gente así. Puede haber personajes, pero no hay individuos únicos como Georgie Jessel o WC Fields, no hay nadie así. Ed Sullivan fue aceptado como una estrella normal, pero en realidad era el tipo más raro del mundo." Desde su primer film de 1985, Pee Wee's big adventure, Burton ha sido calificado como raro, también. Pero es el tipo de raro que hace mucho dinero. Entonces Hollywood está feliz, aun cuando no siempre lo entiendan. Beetlejuice fue un gran éxito, y convenció a Warner Brothers de que Burton era el hombre indicado para hacerse cargo de Batman. Pero mientras ese film de recaudación billonaria lo incluyó entre los tops de Hollywood, Burton se negó a seguir la previsible ruta de la secuela, eligiendo en cambio la historia muy personal de un hombre niño con manos de tijeras, imposibilitado de comunicarse con la gente, un film que marcó su primera colaboración con Depp. Un imaginativo y maravilloso, emotivo y moderno cuento de hadas, El joven... confirmó el status de Burton como visionario, y su suerte en la recaudación. Ed Wood (1994), el film biográfico del trastornado director de films clase Z (que sigue siendo su trabajo más maduro), y Marte Ataca (1996) no fueron muy exitosos, pero los 70 millones invertidos en Sleepy Hollow reconfirman sus posibilidades comerciales. Su talento, claro, nunca estuvo en duda. Aunque tuvo en mente la versión de Disney para rodar Sleepy Hollow, el film está en deuda, visual y temáticamente, con los films de horror de la Hammer de los '50, '60 y '70, protagonizados por Peter Cushing y Christopher Lee, así como a Domingo negro, la película de brujería de Mario Bava. Burton dice que no estaba intentando copiar ningún film de la Hammer, sino tratando de recuperar la atmósfera y las sensaciones que esas películas le provocaban cuando era niño. Parte de esa atmósfera tiene que ver con el uso de escenografía que era común en Hammer, y que Burton ha utilizado hasta las últimas consecuencias en el film, donde el 95 por ciento de las locaciones son elaborados sets construidos en los estudios Leavesden y Shepperton. El resultado es uno de los films más bellos de la década en materia visual. Las referencias a la Hammer van más allá de lo visual. No es la primera vez que Burton utiliza a alguno de sus héroes de la infancia en un film (su primer corto, Vincent, fue un tributo a Vincent Price). En esta oportunidad eligió al mismísimo Conde Drácula, Christopher Lee, para interpretar al jefe que envía a Depp a Sleepy Hollow. El día que Lee rodó su pequeña participación, casi un cameo, todos (Depp, Burton, incluso el compositor de la banda sonora, Danny Elfman, que apareció con una copia de la autobiografía de Lee) estaban más que en deuda con el septuagenario actor. Y Depp, que construyó una cariñosa amistad con Vincent Price durante El joven..., asegura que se sintió conectado de la misma manera con Lee. "Christopher Lee es una leyenda", insiste Depp. "Estaba muy metido en la escena. Fue una inspiración. Probablemente ha tenido que lidiar con todas las mierdas y las mezquindades del negocio en su vida, y sin embargo sobrevivió con integridad. Es un hombre amable, como lo era Vincent, lleno de gracia, humilde, sabio, un sobreviviente. Hizo cientos de films, su presencia es impresionante, es un hombre extraordinario", se entusiasma. "Cuando estás en una escena con este hombre, y él se acerca a vos y te habla con su voz profunda... lo mirás a los ojos y, mierda, es Drácula." Burton está de acuerdo. "Sí, es como ver a Drácula, aún hoy. Te hipnotiza. Todos tienen sus ejemplos en la vida, pero si yo fuera actor, ése es el tipo de actor que me gustaría ser." Traducción de Mariana Enriquez
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