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 "Full
compañía". El mensaje difundido por correo electrónico en la empresa de cajeros
automáticos era terminante. Aventaba cualquier posibilidad de tomarse vacaciones, o
apenas una licencia para festejar la llegada del 2000. A raíz de la falla informática,
la noche del milenio dividirá a los trabajadores del país en dos sectores: los que
celebren en sus casas y los que deban estar en sus puestos, atentos al eventual desquicio
que puedan ocasionar las computadores por culpa del doble cero. El Y2K no es clasista: en
la legión de quienes deben trabajar esa noche se cuentan directivos y gerentes,
especialistas en sistemas y responsables de prensa, operarios de mantenimiento, hombres de
vigilancia y trabajadores rasos. Las empresas con más gente afectada serán las de
servicios públicos, los bancos y cajeros, y las compañías aéreas y aeropuertos. En
algunos casos, los damnificados podrán ir con sus familias para brindar todos junto al
jefe. La mayoría, sin embargo, rezará a su santo favorito para que no ocurra ningún
desaguisado. Y zafar después de medianoche. Dos años de trabajo ininterrumpido, auditorías internas y externas, pruebas de conectividad y simulacros sobre posibles situaciones de contingencia conforman la caja de herramientas a la que recurrieron las grandes empresas para evitar el colapso a la 0 del 1º de enero de 2000. Ese día, para muchos será en realidad la continuación de un largo 31: desde el mediodía habrán estado enchufados a Internet para recibir informes sobre otros lugares. "Por la diferencia horaria con otros continentes tendremos información sobre cómo se comportaron los equipos y sistemas de otros operadores del mundo que utilizan la misma tecnología", explica Luis Perazo, director de Comunicaciones de Telecom. Según contó, "además del refuerzo de guardias, la compañía reprogramó las vacaciones del personal afectado a las fases críticas del proyecto". "El plan es que la dirección y la alta gerencia esté reunida para seguir la evolución de los acontecimientos por si surge alguna eventualidad", contó a este diario Fabián Falco, responsable de prensa de Aguas Argentinas. "Las actividades críticas para nosotros comenzarán a la tarde y se van a extender hasta la madrugada. El plan de contingencia elaborado prevé refuerzos en las áreas críticas y operativas. Por lo especial de la fecha, se sumará el personal de sistemas, se reforzará la cantidad de camiones cisternas y las guardias en los distintos distritos". Para los integrantes de la guardia activa de la red de cajeros Link, los festejos "en la noche de transición" serán como en casa, pero en la oficina central junto a las computadoras. "La empresa contrató un servicio de catering y nos dio la opción de invitar a nuestros familiares directos. Por los números que estoy manejando, esa noche vamos a ser 55 adultos acompañados por unos 15 chicos. Seguramente estaremos en nuestros puestos de trabajo hasta las primeras horas de la madrugada, y si todo sale bien nos iremos todos juntos a seguir festejando", cuenta Teresita Michetti, una de las responsables del proyecto 2000 de Link. El gerente general de la red, Alfredo Fraire, detalla qué significa
eso de full compañía: "El día 31 entrarán en acción equipos humanos de
seguimiento de funcionamiento del computador central y Aunque juran que nada malo ocurrirá, en Edenor tienen previsto un plan de crisis que sólo se pondrá en marcha si ocurre algún inconveniente. "Esa noche tenemos pensado estar en la empresa todos los que conformamos el equipo de prensa", cuenta Gerardo Sanguine, responsable de las Relaciones Públicas. "Nos vamos a convocar desde las 21 hasta las 2, aproximadamente --señala--. La idea es poder brindar información a los medios que lo necesiten y ya que estamos festejar un poco entre nosotros, hasta que se compruebe que todo funciona según lo previsto." En una situación similar se encontrarán los empleados y técnicos de la empresa Edesur, cuyo plan de contingencia y cronograma de guardias activas entra en funcionamiento, también, a las nueve de la noche en la que el resto del mundo estará de festejo. "Por encima de las guardias habituales, esa noche estarán en sus puestos de trabajo más de 300 empleados de la compañía", contó Daniel Martini, gerente de Relaciones Institucionales. --¿Habrá festejos? --No está programado montar ningún esquema de celebración en los lugares de trabajo, porque esperamos que todo funcione normalmente y pasadas las 2 de la madrugada poder estar cada uno festejando en su casa. A los bancarios los espera un fin de semana ajetreado. Pese a que el 31 no atenderán al público, deberán pasar la mayor parte del cambio de año en sus puestos. "El jueves 30 a la noche deben estar cerrados todos los procesos del '99, ya que el 31 se harán los controles de todo lo hecho el día anterior. La idea es terminar con todo a las 18 del 31", cuenta Adriana Rush, responsable del Proyecto 2000 de Banco Río. Para ella y algunos compañeros, los festejos tienen pronóstico moderado: el 1º, desde temprano, los encontrará de nuevo trabajando. "A las 6, un empleado por sucursal y todo el personal de sistemas comenzarán a hacer verificaciones en las 25 sucursales testigo del país. Allí se chequeará el normal funcionamiento de la energía, sistemas y comunicaciones. Ese día también se harán transacciones entre sucursales como prueba". Para verificar que el cielo funcione normalmente, también deberá estar al pie del cañón la gente de las aerolíneas y los aeropuertos. Jorge Suárez, director de Operaciones y Servicios de Aeropuertos Argentina 2000, cuenta que "ese día estará reunido para seguir el curso de los acontecimientos el comité de crisis integrado por hombres de la Fuerza Aérea, la Secretaría de Transporte, las compañías aéreas y el ORSNA". "En los aeropuertos bajo nuestra responsabilidad se duplicará el personal de operaciones, mantenimiento y de gestión. El número de empleados afectados esa noche en Ezeiza será de 60 y en Aeroparque, 50", señala. --¿Que cómo será nuestro brindis? Todavía no lo sabemos, pero por lo que vemos eso va a ser lo único improvisado de esa noche. Producción: Daniel Franco.
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del soft de aplicación de los
cajeros, quienes a partir de las 12 y hasta las 20.30 se reportarán cada media hora ante
un conference scholl integrado por 25 personas. A partir de ese momento, entra en escena
un grupo de doce personas que estarán hasta el cambio de horario al lado de nuestro
computador principal. Un segundo grupo, cuyos integrantes pasarán las fiestas en sus
casas, se reportará a la 0.10, y si todo sigue igual podrán seguir festejando. En el
mismo sentido, el conference Scholl de contingencia se disolvería a la 0.20. Luego del
brindis, claro."