La
conductora televisiva Susana Giménez pasará Nochebuena y Navidad en cama: sufre una
anexitis, una inflamación en los ovarios y las trompas, que le obliga a no menos de una
semana en reposo. La diva de los teléfonos fue internada ayer a las cuatro de la mañana,
tras haber sentido dolores muy fuertes en la zona del abdomen. Los responsables del
sanatorio, según dijo el médico personal de la animadora, Alfredo Cae, le advirtieron
que en principio debe guardar reposo por un lapso que puede extenderse hasta los diez
días. La emisión de anoche de "Susana Giménez" fue conducida por Juan Alberto
Mateyko, poco después de que la dueña del espacio fuese sometida en la clínica Otamendi
a una tomografía computada. "Un problema de este estilo demanda 48 o 72 horas de
internación, por lo mínimo", señaló Cae. "Después deberá seguir en reposo
en su casa." De cualquier modo, agregó, está fuera de peligro. "Le estamos
dando analgésicos para aliviar los dolores y la estamos hidratando, además de realizarle
una serie de chequeos para prever que no surja ningún tipo de complicaciones. Susana
está con ganas de irse en cualquier momento, pero eso no es posible. Hay que esperar para
ver cómo evoluciona."Una fuente del sanatorio dijo a Página/12 que la
conductora fue internada de urgencia presa de fuertísimos dolores, con un cuadro en
principio preocupante. Los médicos que se abocaron a atenderla y contenerla le
diagnosticaron un "cuadro de inflamación anexial", que es una inflamación de
los anexos del aparato genital que reviste cierto cuidado pero que no pone en peligro la
vida de nadie. Cae confirmó eso: "Este fue un proceso inflamatorio del que todavía
no podemos determinar el origen, pero podría ser bacteriano. De todas formas no descarto
que sea de origen urinario". Giménez había acordado con el canal que concluiría la
temporada televisiva 1999 el miércoles 30, ya que el 31 se emitiría un ciclo especial
con "los mejores momentos" del año, pero ahora todo eso está en estudio.
Según trascendió, había tenido un fin de semana intenso, antes de la crisis que derivó
en su internación de urgencia: el sábado concurrió a la fiesta de cumpleaños del
guionista de televisión Hugo Sofovich y el domingo a una de Telefé. Lo que no estaba de
fiesta era su rating: el viernes apenas sumó diez puntos, casi la tercera parte de lo que
era su media hasta hace poco.
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