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"Quedamos plenamente satisfechos", respondió uno de los integrantes de la comunidad judía que ayer se reunieron con el canciller Adalberto Rodríguez Giavarini, en un primer encuentro exploratorio. Rodríguez Giavarini se esforzó por que la reunión fuera un éxito: prometió que el Gobierno apoyará la rápida sanción de la ley del arrepentido y la de protección de la identidad de testigo, dos normas que la comunidad judía consideran indispensables para el esclarecimiento de los atentados contra las sedes de la AMIA y la embajada de Israel. Además, anunció que se promoverá que se eleven las penas por delitos como el de profanación de tumbas. "Significó un compromiso de mantener un diálogo permanente y fluido", explicó el titular de la DAIA, Rogelio Cichowolsky. "El canciller se comprometió a terminar con todo hecho prejuicioso y discriminatorio", añadió el dirigente. La reunión --que consistió en un frugal desayuno-- se realizó por iniciativa del canciller, del secretario de Culto, Norberto Padilla, y del director del área, José Cardozo. Del lado de la comunidad judía la delegación fue bien amplia. Además de Cichowolsky, participaron el titular de la AMIA, Hugo Ostrower, el gran rabino Salomón Benhamu, el gran rabino Víctor Cehebar, el ex presidente de B'Nai B'Rith, Jaime Kopec, y los rabinos Daniel Goldman, Simón Moguilevsky, Mario Rojzman y Marcos Marabi, entre otros. Por propia iniciativa de los funcionarios, en la conversación ingresó el tema de las leyes que la comunidad judía viene reclamando desde hace tiempo. "Son leyes necesarias no sólo para la comunidad sino para toda la sociedad", aclaró uno de los representantes judíos. Giavarini remarcó que la ley del arrepentido --que el presidente Fernando de la Rúa mencionó durante su discurso de asunción frente al Congreso-- es una prioridad para el Gobierno. Cichowolsky intervino para opinar que lo ideal sería que esa ley fuera complementada con otra que resguarde la identidad de los testigos. Las dos normas surgieron como una necesidad a partir de la investigación que lleva adelante el juez federal Juan José Galeano por el atentado a la AMIA, en la que utilizó testigos que se negaron a que se difundieran sus nombres, a quienes finalmente se identificó con letras. Rodríguez Giavarini aceptó de buen grado la sugerencia de la ley complementaria, aunque dijo que creía incluida la protección de testigos dentro de la misma ley del arrepentido. Con todo, se comprometió a impulsar las dos leyes en caso de ser necesario."De la Rúa tiene una constante preocupación por el esclarecimiento de los atentados a la AMIA y a la embajada de Israel, al igual que las profanaciones de los cementerios judíos", insistió el canciller. De inmediato, Cardozo, director de Culto, habló de la necesidad de elevar las penas a los delitos discriminatorios, como el de profanación de tumbas, que pese a que fueron incluidos en el Código Penal continúan repitiéndose. Rodríguez Giavarini dio instrucciones para "perfeccionar las tipificaciones" de esos delitos, según comentó un vocero. "Hubo una amplia coincidencia en destacar la educación como la principal herramienta para desterrar toda forma de prejuicio y discriminación, así como para la preservación de los valores fundamentales de la sociedad", fue el optimista resumen del encuentro que daba un vocero de la Cancillería.
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