| La tendencia a
atribuir el conflicto social y la protesta popular a la acción de “activistas de
extrema izquierda infiltrados”, tratando de justificar, de esa forma, la represión,
como recientemente lo ha hecho el ministro del Interior Federico Storani, no es nueva. A
mediados de la década del 70 el dirigente radical Ricardo Balbín hablaba de
“guerrilla industrial” para referirse a los trabajadores que se movilizaban en
defensa de sus derechos, y esta imputación sirvió de excusa para establecer el
terrorismo de Estado a partir de 1976 con sus secuelas de asesinatos, desapariciones,
torturas y todo tipo de vejámenes. Luego de reestablecida la democracia, en ambas
gestiones, la de Alfonsín y luego de la Menem, se siguió atribuyendo a los
“infiltrados” la legítima protesta de nuestro pueblo frente a un modelo que ha
quintuplicado la deuda externa, colocado por debajo de la línea de pobreza a más de 13
millones de compatriotas y condenado a la desocupación a cerca del 20 por ciento de la
población activa.Esta concepción de la historia como una sucesión de conspiraciones,
desconoce que, por el contrario, la misma es el devenir de la constante lucha de los
hombres y los pueblos por una sociedad más justa. Pasar del reino de la necesidad al de
la libertad.Por eso, en Corrientes los que enfrentaron a la Gendarmería fueron los que
durante casi un año construyeron la “plaza del aguante”, los que protagonizaron
cientos de marchas, los que representan la mejor tradición de este pueblo de luchadores.
Entre ellos, por cierto, había militantes del Frente de la Resistencia y de Patria
Libre.No podía ser de otra manera, ya que nuestro Frente nace como respuesta a la
irracionalidad del capitalismo salvaje y a la crisis por la que atraviesan las formaciones
políticas tradicionales. En él confluyen peronistas, radicales, comunistas, socialistas
y cristianos, que se proponen articular un nuevo proyecto nacional liberador.Por eso
estuvimos y estaremos en todas las luchas que lleve a cabo nuestro pueblo. Por ello,
señor ministro, intente escuchar los reclamos y no apele, como lo hizo hasta ahora, a
viejos slogans de represores y sus métodos siniestros para justificar la represión. *
Candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad por el Frente de la Resistencia. |
