Charly
García y Gustavo Cerati, los mejores de la década
El
sabor
del encuentro
Hasta
ahora, un par de shows compartidos hace varios años, el fallido
disco Tango 3, la canción Pasajera en trance y unas
fotos simbólicas de fin de algo los habían reunido. Esta
vez, la excusa fue su victoria en el rubro clave de la encuesta 1999 del
No. A partir de ahí, un diálogo imperdible sobre River,
Racing, Catupecu Machu, Burt Bacharach, Menem, Ringo Starr, las mejores
canciones de cada uno y la promesa de un proyecto conjunto. Y... Es todo,
que no es poco. Felices Fiestas, amigos.
ESTEBAN
PINTOS
FOTOS: NORA LEZANO
Tremendo.
Charly García anuncia su estado en la tarde de calor, esperando
por Gustavo Cerati. Toca un poco el piano, toma agua, gaseosa y whisky
alternativamente, fuma, vuelve a tomar, vuelve a tocar el piano. Casi
siempre Los Beatles. También exhibe con orgullo una encuesta de
una revista que define muy de Palermo que lo ubica tercero
en el rubro músico del siglo, detrás de John
Lennon y apenas debajo de ¡Los Beatles! Cerati viene en camino,
avisan. La causalidad histórica de sus obras ha hecho que se reúnan,
invitados por el No, para celebrar que los músicos
argentinos de rock los hayan considerado los Artistas de la década.
Llega Cerati y trae de regalo para el dueño de casa, Play, de Moby.
Charly no sabe quién es, pero promete escucharlo ante la recomendación
que acompaña el obsequio. Pero la charla de dos argentinos, hombres,
padres de familia, músicos y estrellas de rock, se inicia verdaderamente
con un comentario de neto corte cotidiano. Charly dice algo sobre el reciente
campeonato de River, cuenta que vio el partido en Caballito, que se cortó
la luz ni bien Saviola embocó el penal y Cerati, recién
llegado, comenta: ¿Vos sos de River? Ahora te podés
reír de todos...
Charly: Ah, ja ja, ja...
C: Hoy discutíamos con él (señala a un amigo suyo),
que dice que Racing nunca había salido campeón del mundo.
G: Claro, le ganó al Celtic 1 a 0 con gol del Chango Cárdenas.
C: Cuando yo me hice de Racing, mi viejo era de Independiente. Después
no embocamos más hasta ahora.
Por eso le dicen Martín Karadagian, porque ni los chicos
pueden creer que fue campeón del mundo... (risas)
C: No sé, me río por compromiso, pero nada más.
G: No, no, no jodan con Racing. Racing es un equipo destinado a la utopía.
C: ¿River fue campeón del mundo?
El motivo del encuentro es que, con el voto de otros músicos
argentinos, ambos han sido elegidos con la misma cantidad de votos, los
artistas de la década. ¿Algún comentario?
C: Artistas hay muchos, como estrella tendría que ganar Charly
sin ninguna duda. Estrella porque tiene ese tipo de luminosidad...
G: No te hagas el vivo.
C: No, realmente, es un halago un empate con Charly. ¿Cómo
fueron los votos, qué significa bien esa elección?
Votaron 99 músicos y ustedes dos salieron primeros.
G: ¿Y para esto viniste? (Risas.)
C: Charly juega como al truco, ¿viste?
G: ¿Qué salimos?
C: Artistas de la década.
G: Está bien, está bien.
C: Estaba pensando que cuando a mí me preguntaron, yo no supe contestar
quién, realmente. Aparte, en la década pasan tantas cosas...
¿No? No por la arbitrariedad de una década, sino porque
diez años son un montón.
G: ¿De esta década?
C: Sí.
G: ¿Y de las otras décadas?
Como termina, estamos preguntando por ésta. Hace unos años,
el No hizo una sobre la historia del rock nacional y ganó el disco
de Almendra...
G: ¿Cuál de Almendra? ¿El primero? Ah, bueno, está
bien. Yo pensé que era Almendros, un grupo de cumbia rock. Yo quiero
aclarar que no tengo nada que ver con la cumbia rock, el latinaje y todo
eso: me parece una cagada, una mierda, ¿Ok? Bah, no todo, pero
casi. Que no sepan afinar, que no tengan ideas, que encima se hagan los
piolas y que sean suburbanos.
C: ¿Suburbanos?
G: Sí.
C: Sub-urbanos.
G: Además son feos. El día que nos sacamos una foto con
él para una revista, otra de artistas de la década, cada
mil años nos ponen, éramos lo peor, estábamos en
un costadito y lo del medio de la foto no importa. Había un salame
que todo el tiempo hacía chistes, como si fuera el rey de no sé
qué, y yo ni sabía quién era.
C: ¿Uno que gritaba?
G: Sí, uno que gritaba todo el tiempo... Catupecu Chapu, esa porquería.
Catupechu Machu o Chatuca la Hiena o Machuca la Hiena, va a ser devorado
por Leonor Manson. Ojo al piojo, Capetu Cachu, lo que sea, tiene los días
contados: Mónica Sucre está atrás de ustedes, Amalita
Von Quintiero también.
C: Amalita...
G: Amalita Von Quintiero es el bajista de Backstreet Shakiro (risas).
Y Machucha La Hiena, que creo que es un grupo de Chile.
C: Bueno, él me contó lo que viene haciendo, porque tuvimos
otro encuentro para hacernos fotos. Venimos haciendo muchas fotos, Charly.
Han estado juntos bastante, últimamente ¿no?
C: Algo pasa. Se siente el 2000, ¿no? El brindis y la pelota.
G: ¿Te acordás con Yoko? ¡Qué momento!
C: Y qué foto, también.
¿Estuvieron los dos con Yoko?
C: Sí, los dos recibimos como la bendición. Fue una sensación
muy fuerte que compartimos...
G: Y ustedes no. (Risas.)
No está muy claro por qué Cerati, un rato después,
menciona la palabra Offspring. Veloz como un rayo, García
dice Spring.
Entonces Gracias totales afirma: Los mejores nombres del rock nacional
los pone Charly. Creo que Charly ganaría tantas encuestas que,
que yo tenga un empate es un verdadero honor. Te lo digo de verdad.
G: No te burles de mí.
C: ¡No, boludo! ¿Sabés la cantidad de encuestas que
podés ganar? En la del siglo se complica, por eso sólo se
le animan a la década.
G: (Mirándolo fijo.) ¿Vos pensás que yo soy el mejor
músico de la década?
C: Yo creo que estos últimos diez años fueron como un siglo
para mí. Eso siento.
Por ahí, ahora los siglos duran diez años.
C: Un diez por ciento de su valor.
G: ¿Pero soy o no soy?
C: Totalmente.
G: Apurando... (Risas.)
C: Y en el siglo, rivalizarías sin ninguna duda con el otro Carlos,
que ocupó la primera parte.
G: Y bueno, hice una mano 04 Medellín. (Risas.)
C: Yo comparo la situación de recibir una encuesta de la que tengo
que hablar con la realidad de cuando tenés que hacer la encuesta.
Realmente, hablaba con amigos... A mí se me hace difícil,
sobre todo cuando se habla de una década. Yo lo dejé en
blanco, la verdad, no porque no crea que no haya, sino porque creo que
hay una cantidad importantísima de artistas que hicieron algún
escalón. Algunos son más brillantes, otros más populares.
Y te ponen en una situación de definir... A veces no es fácil.
Y en este año estuvo todo esto del fin de siglo.
G: A mí todo esto me parece superfluo. Lo que mejor me parece es
que estemos acá nuevamente y que sea una cosa así... Por
lo que representamos, por los ecos que provocamos, por el grupo que podríamos
hacer, imaginariamente, sumando fuerzas. Y eso está bueno. El motivo
principal es la música y supongo que yo les cerraba a algunos todo
el panorama sin uno o sin el otro. Eso lo digo así de última,
pero si pensamos bien... Me acuerdo cuando Luis Alberto y yo éramos
como River y Boca, o Pappo y yo: era un bajón total. C: Sí,
es como los Redondos conmigo.
Tal vez sea una cuestión de costumbre argentina...
G: Es tan ridículo eso. Que no pasa por uno, además, pero
sí a través de la gente. Y es real, eso de que se genera
odio. Hace poco fui a un club de fans de Soda, y pasaban a los Redondos.
Estuvieron tocando juntos en el Gran Rex en las presentaciones de
Bocanada, ¿fue la primera vez?
C: No, tocamos en Mar del Plata una vez, otra vez en Palladium y otra
vez en México.
G: Lo que yo recuerdo con más cariño es Tango 3. Que nunca
se hizo, pero la onda que pusimos...
C: Llamar por teléfono a Ringo Starr también me pareció
un momento único... (Risas.)
G: O cuando estaba mi acompañante terapéutico, porque yo
en esa época estaba en una clínica. Me acuerdo de Gustavo
entrando a la casa de Pedro, donde grabábamos. El trajo una botella
de champagne y el cabezal del Marshall sin parlantes, sabiendo que lo
iba a quemar. Lo tomé como un hecho quijotesco y heroico, para
destacar. Hiciste una cosa que, qué sé yo, a mí me
cayó bien...
C: Te diste cuenta que era torpe.
G: No, que eras bueno.
Tango 3 nunca se concretó, finalmente. Pero sí una
canción No te mueras en mi casa que... ¿salió
de ahí?
C: Sí, y también estaba una idea que yo ya tenía,
que era Sueles dejarme solo. De la otra hicimos la letra,
porque no existía la música prácticamente...
G: No, jamás existió.
C: Para mí también fue impresionante ver funcionar esa química,
que había conocido de antes. Pedro y él, muy fuerte. Pedro
me invitó, ya había hablado con Charly, y yo de alguna manera
estaba buscando mi lugar, no me daba cuenta que había un lugar
igual. Era tan fuerte la presencia de ellos. Rock nacional...
G: Y de todos los países.
C: Aunque queda totalmente chico. Pero es muy efectivo.
G: ¿Rock? Ok, salimos en la Rolling Stone, no en la Premiere.
Tal vez ahora puedan hacer Tango 2000.
G: ¿2000 tangos?
C: Yo diría hacer Tango 01, y que nos den el avión. Ya con
las influencias que tiene Charly con Carlos...
G: El es un fan mío y quiere ser mi manager.
C: Esa es una de las cosas más geniales que le escuché decir
a Charly. Vive diciendo frases absolutamente increíbles, pero la
de quiero a Charly como a mi manager me mató... O sea,
no sólo tenemos el Tango 01.
G: Tenemos, tenemos, de Anillaco hasta ¿cómo se llama ese
grupo, Tucapa chupa?
Pensemos la posibilidad de que hagan algo juntos, de retomar...
G: Tomemos...
C: Eso, tomemos en vez de retomar.
G: Escuchame, nosotros dos y ¿a quién más ponemos?
C: Y... Vos habías hablado de Ringo Starr, no sé si seguís
manteniendo esa idea.
G: Claro, ¡aguante Ringo Starr! Hay que buscarlo en el Playboy club,
entre dos siliconas. ¿Y de bajista? Podríamos poner uno
y después echarlo.
C: Pedro tiene que venir también. Bueno, ahí estamos retomando.
Yo toco el bajo también, me encanta.
G: Yo también, entonces están ¡Los Bajeros!
C: ¿Y los Bajaraj?
G: ¿Y La máquina de hacer bajaraj?
C: Cómo vino de vuelta Burt Bacharach...
G: Se pasó treinta años jugando al tenis, y cuando ya no
podía más dijo ¿A quién agarro? ¡A
Elvis Costello! _Tocó en Punta del Este, hace poco.
C: Es verdad...
G: ¿Tocó
qué?
_¿Es
tan bueno como para estar de moda ahora, otr vez?
C: Es muy bueno.
G: Es para gente como voz.
Acto seguido, García se levanta del sillón y, mientras Cerati
dice " No me emociona, pero puede funcionar, desde el easy listening
", comienza a tocar el piano. Una de Bacharach. Y dispara: "¿Cuando
viste un conjunto de rock argentino que haga una canción así?.
Fín de la fase Bacharach.
_¿Qué canción les hubiese gustado componer del otro?
C: Empezando "Pasjera en trance" , por ejemplo. (lo mira) No
te di alternativa la otra vez ¿no? Era una medida imposición,
es que es un tema que te ha dado muchas satisfacciones, coincidirás...
G: Me ha dado muchas satisfacciones y tiene el estilo Cerati Stereo. Tiene
un sampler y qué sé yo, esas cosas.
C: Hay muchas, pero ésta será porque la tocamos en vivo
y para mí fue como una celebración. Salió buenísimo
y todos los notamos. Charly fue el manager del sound y de arreglos. la
forma en que marcaba las situaciones fue buenísima. Todos los músicos
que estaban conmigo me lo comentaron. Quedaron muy impresionados. De ser
un caos, no se sabían muy bien las, partes, pero cuando lo hiciomos
fue ¡guau! Fue muy bueno, ese momento, y también el que protagonizamos
con Fito, sobre todo en ...
G: En esta puta ciudad...
C: Yo escribí "En la ciudad del a furia"
G: Bueno, ese tema me gusta de él. Y me gusta mucho, conceptualmente,
el álbum de Soda que hizo Almodovar...
C: Doble vida.
G: Ese.
_Que no es de los más valorados de Soda ¿no?
C: Hasta yo no lo tengo valorado, pero ahora a partir de lo que dijo Charly
voy a mirarlo de otra manera.
G: Me pareció impresionante, y me pareció también
muy él (lo señala).
Ahí mismo, cambia abruptamente el ángulo del diálogo.
García inquiere al cronista sobre los discos de ambos en esta década,
empieza el recuento más o menos ordenado cronológicamente-no
sin ciertas vacilaciones, nobleza obliga-y la razón de su "examen"
parece ser que conduce a Clics modernos. Dice que ése "es"
de los noventa: "ahí está lo que venía después.
Después no sé que pasó" Otro salto.
G: ¿Hay algo más nacional que Soda Stereo? Gropo de rock
nacional...
C: Claro que sí.
G: Y en este momento de gloria, quiero emitir un recuerdo para todos los
que no están acá con Gustavo y conmigo, que también
se merecen estar con nosotros- o nosotros no nos merecemos estar con ellos.
Como por ejemplo Fito, Luis Alberto...
C: Daniel Melero.
G: Melero, Los redonditos de ...
Eso. Lito Nebia y tantos otros sin los cuales hubiese sido imposible estar
acá. Y los demás, que son Carca y toda esa mierda.
C: Pero Carca es muy rock nacional también...
G: Carca es Edelmiro Molinari en ácido, ¡es lo peor!
Salta al piano y la emprende con una mínima versión de una
canción de Color Humano. Lanza toda clase de epítetos contra
el retro-rockero porque, según dice él, habló de
"mariconadas como Sui Generis". "Justo leí eso cuando
me estaba comiendo una empanada buenísima", precisa. Promete
hacer tronar el escarmiento contra ese comentario desafortunado. Cerati
lo mira. Cuando concluye la diatriba, sugiere cómplice "¿Por
qué no nos vamos los tres, a hacerlo solos?". La escena siguiente
se desarrolla en la "habitación" del dueño de
casa, un Vietnam privado. "La sensación es la de un avión
que se cae y la gente se empieza atirar", dice García sobre
el fin de la década. "Gente que se olvida de lo que le conviene,
gente que ama desesperada mente lo que ama y mucha pasión",
sigue. Cerati coincide. El siguiente y final juego es, a pedido de García,
imaginar cada uno un epitafio del otro.
G: Guitarrista, compositor, luchador, buena persona.
C: Un montón de cosas con la sensibilidad, muy fuerte para todos
No sé cómo escribirlo en el epitafio. Abajo de la palabra
"Estrella" ... Todo el mundo es una estrella, ¿verdad?,
pero... No todas brillan igual. Esa es la cuestión.
G: ¿Nada más? (risas). Sensibilidad, de ahí viene,
loco. Hay gente que siente y otra que no siente. Yo siento.
|