El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, denunció en una entrevista que la oposición está “empleando una campaña sucia”, con apoyo de los medios de comunicación privados, para evitar perder en primera vuelta y llegar a un ballotage en las próximas elecciones del domingo, en las que se elegirán los cargos de presidente y vicepresidente, así como los 137 miembros de la Asamblea Nacional y los cinco representantes del Parlamento Andino. Correa pidió a la ciudadanía no dejarse engañar con las nuevas “bombas”, como por ejemplo, que Odebrecht financió su campaña de 2006.
“Esta gente está desesperada. Las encuestas dicen que habrá una sola vuelta y su estrategia no es subir sino bajar a (el candidato oficialista) Lenin (Moreno) para obligar a ir a una segunda vuelta. Ojalá mejore la ética política pero también mediática”, expresó ayer por la noche Correa.
El mandatario anticipó que un diario de Guayaquil, que apoya al banquero Guillermo Lasso, candidato del opositor “Movimiento CREO”, va a tratar de desprestigiar al vicepresidente Jorge Glas. “Si no se presentan pruebas no crean nada. Es una campaña sucia para impedir que se gane en una sola vuelta”, reclamó e indicó que en los próximos días intentarán ligarlo “desesperadamente” con supuestos escándalos sobre Odebrecht.
El presidente contó que el único contacto que tuvo con el director de la compañía brasileña se dio a través de su hermano Fabricio, con el que mantiene una relación conflictiva desde que el mandatario canceló los contratos que su empresa tenía con el Estado, pero dijo que siempre estuvo “a 1.000 kilómetros de distancia” del director de Odebrecht.
Además de los cargos electorales, el domingo los ecuatorianos tendrán que responder a una consulta popular paralela sobre si están de acuerdo en que se prohíba a los servidores públicos la tenencia de bienes o capitales en paraísos fiscales. Correa enfatizó que su gobierno ha liberado una iniciativa nacional e internacional contra esta problemática "que afecta el progreso de los países en vías de desarrollo", y que por ello, muchos “se la tienen jurada”.
“Nosotros estamos luchando contra la máxima expresión del capitalismo salvaje sin rostro, que son los paraísos fiscales”, subrayó el mandatario al indicar que solo en los últimos años más de 2.700 millones de dólares (2,7 puntos del PIB) salieron de Ecuador rumbo a esos territorios libres de control tributario.
Durante la entrevista, también citó al libro “Ecuador en la Mira”, del noruego Eirik Vold, quien a través de una investigación de los cables de Wikileaks descubrió cómo Lasso acudía a la embajada estadounidense en busca de apoyo para armar un frente empresarial contra su gobierno.
Correa explicó que los ataques “contrarevolucionarios” contra su presidencia se dieron con la supuesta intervención de los hermanos William y Roberto Isaías, exbanqueros radicados en Miami con causas por delitos financieros. “Mi gobierno fue el único que se atrevió a incautarle los bienes”, expresó.