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Por Gustavo Veiga  La
productora televisiva Torneos y Competencias (TyC) le reclama a la gobernación de Mendoza
una deuda de 630.000 pesos que le ha servido como excusa para mudar el fútbol del verano
desde la provincia cuyana a Córdoba. Ese compromiso, contraído por la administración
del ex gobernador justicialista Arturo Lafalla, no sería reconocido por su sucesor,
Roberto Iglesias, que representa a la Alianza. Pero más allá de este desacuerdo por las
pérdidas que arrojó la última temporada mendocina, lo concreto es que la disputa de los
clásicos Boca-River y Belgrano-Talleres resultaba mucho más seductora en términos
económicos y deportivos para TyC que continuar como hasta ahora: jugando en Mendoza y con
las cuentas en rojo. El 12 de este mes comenzará la Copa Córdoba con el clásico
cordobés más importante y, dos días después, Boca y River estarán cara a cara en el
primer partido del año que muchos –vaya originalidad– no se cansarán de
denominar el primer superclásico del milenio. El escenario ya no será el estadio Islas
Malvinas sino el Chateau Carreras y, de ese modo, TyC espera recuperar parte del terreno
perdido durante el verano de 1999, que no le resultó demasiado propicio.Armando Tedesco,
director deportivo de la productora de TV, desmintió que el monto reclamado haya sido
contraído por el grupo Vila, un conglomerado de medios originario de Mendoza que mantiene
deudas con el Estado nacional por 12.000.000 de pesos. “Nosotros firmamos un contrato
con la provincia de Mendoza. Este tema lo hemos conversado con el ex gobernador Lafalla en
Buenos Aires, incluso hasta le ofrecimos un plan de pagos. Lo que ocurre es que, en el
medio de todo esto, entre nuestra empresa South American Sports (subsidiaria de TyC) y la
gobernación, aparecía una firma que formaba parte del grupo Vila”, explicó el
hombre de Torneos. La deuda que la dueña de los derechos televisivos del fútbol en la
Argentina reclama nace de las pérdidas originadas durante las últimas Copas de verano
jugadas en Mendoza. Como la concurrencia a los partidos fue bajísima y los recursos por
publicidad también, apenas se recaudó el 35 por ciento del presupuesto pautado y eso
provocó el agujero negro de 630.000 que ahora exige cobrar TyC. La productora les pagó a
los clubes participantes a razón de 100.000 pesos por encuentro y el anterior gobierno
mendocino no habría podido juntar las empresas necesarias para auspiciar el
fútbol.“En Mendoza y Córdoba los estadios son explotados por los respectivos
gobiernos y por eso hay que tratar con ellos. El secretario de Deportes mendocino, como
administrador de ese bien, me decía: ‘Yo te doy la cancha, pero que vengan Boca,
River...’, en fin, quería hacer como con la Fiesta de la Vendimia. Me parece
bárbaro, pero a nosotros nos deben ellos. En cambio, ahora que vamos a llevar el fútbol
a Rosario no firmo contratoscon ningún gobierno. Hablo con Central, que es el dueño del
estadio”, explicó Tedesco.Esta historia, que acaso termine en los tribunales,
continuará en Córdoba, donde sí esperan levantar la puntería quienes tienen el negocio
del fútbol televisado en sus manos. Allí se jugarán cuatro partidos entre el 12 y el 22
de este mes que, seguramente, no les hacen ninguna gracia a los técnicos y a los
jugadores. A los primeros, porque no podrán presentar sus equipos con el suficiente
tiempo de preparación, y a los auténticos protagonistas del espectáculo porque les
cortan las vacaciones. Negocios son negocios y al que no le gusta ya sabe lo que tiene que
hacer.
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