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ENRIQUE MATHOV
"No hay plazos para designar al jefe de la Policía"

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El secretario de Seguridad Interior dice que debe cambiar la cúpula de la Federal, pero que el Gobierno no tomará decisiones abruptas. Mathov sostiene que el jefe de Gobierno porteño participará en el nombramiento de los jefes de la Policía metropolitana y reconoce que el traspaso policial a la ciudad tal vez nunca se concrete.


t.gif (862 bytes)  --¿Qué va a pasar con todos aquellos policías que quedaron involucrados en causas judiciales sospechados de participar en redes de protección de prostíbulos, puestos de venta ambulante y locales de juego clandestino a cambio de coimas?

--Siguen los procedimientos. Pero mucho depende de la actividad de los magistrados. Cuando el juez dicta sentencia, no le quepa duda que todo policía condenado es separado del cargo. Siempre en la administración pública, si alguien está involucrado en un caso detectado de corrupción o delito, hay que separarlo.

--Con ese criterio puede pasar mucho tiempo y policías corruptos seguir en sus puestos. Las investigaciones que salieron a la luz revelarían la existencia de una red de corrupción policial organizada y arraigada.

--Ojalá los magistrados actuaran con mayor celeridad.

--¿Cómo se va a efectuar el traspaso de la Federal a la ciudad de Buenos Aires?

--Primero el Congreso tiene que modificar la Ley Cafiero, la Ley Orgánica de la Policía Federal y la Ley de Coparticipación Federal para poder transferir a la ciudad autónoma los recursos para pagar a la policía. La Constitución determina que cuando se transfieren servicios a las provincias tienen que ir acompañados de recursos económicos. Los tiempos parlamentarios no sabemos cuáles serán.

--Pero esto puede traer quejas de parte de las provincias.

--De hecho, hace un año y medio está en el Senado el proyecto del senador García Arecha y no lo han querido tratar.

--Entonces se habla mucho de traspaso, pero tal vez ni se concrete.

--Y sí. Hasta que no cambie la composición del Senado...

--Mientras tanto, ¿qué cambiará en la Policía Federal?

--La intención es reforzar la Superintendencia Metropolitana a través de un convenio que dé una mayor injerencia al jefe de Gobierno de la ciudad en la designación y remoción de los jefes más importantes que tienen competencia en la ciudad. De ese modo, la ciudad autónoma participa en el diseño de políticas de seguridad, por ejemplo, el despliegue policial en las calles. Queremos hacer más eficiente la actuación de los policías en del perímetro de 200 kilómetros cuadrados de la ciudad.

--Si el comisario Rubén Santos se convierte en jefe de la Policía Federal, pasarían a retiro casi todos los jefes más encumbrados. ¿Usted quiere que cambie la cúpula de la Policía Federal?

--Pienso que sí, la cúpula de las fuerzas de seguridad, en general, se cambian. No solamente en la Argentina sino en el resto del mundo, fundamentalmente cuando el partido político es distinto del anterior se efectúan modificaciones en las cúpulas de las Fuerzas Armadas y de Seguridad. Es para generar un acercamiento, una identidad, en cuanto a la política a implementar.

--¿Santos será finalmente el nuevo jefe de la Policía Federal?

--No lo sé. Hay varios jefes superiores de la Policía Federal que pueden ser designados por el Poder Ejecutivo. Cualquiera de los primeros veinte.

--Pero el nombre de Santos viene sonando desde hace rato.

--No sé por qué.

--¿Cuándo se va a saber quién es el nuevo titular?

--No hay plazos. Una de las características de este cambio de gobierno es que no hay situaciones abruptas. La continuidad democrática ha demostrado que las instituciones siguen funcionando y que las planas mayores no son contempladas como partidistas del presidente anterior. Cuando el Presidente haya decidido qué impronta quiere poner, designará a los jefes de la Policía, la Prefectura y la Gendarmería.

--¿Quién va a ser el superintendente de Seguridad metropolitana, a cargo de las 53 comisarías porteñas?

--Todavía no está firmado el convenio ni discutida la estructura, menos se va a saber un nombre.

--¿La injerencia del jefe de Gobierno porteño se traducirá de algún otro modo en los hechos? ¿Podrá dar órdenes a la policía, por ejemplo?

--La autoridad política no tiene por qué saber cómo organizar la persecución de un delincuente. Participar en la designación del jefe de Policía metropolitana es la forma de dar la impronta de lo que pretende la ciudad autónoma en materia de seguridad. Hoy, la política la determina el presidente de la República, a través de su ministro de Interior. A lo mejor el ministro está preocupado, con razón, por cuáles son las prioridades en la triple frontera. En cambio, para el jefe de la ciudad lo serán, por ejemplo, los asaltos que se cometen en los taxis.

--En los diez años de gobierno de Carlos Menem, el Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, nunca fue detenido en una protesta. Esto sí sucedió esta semana en un gobierno de la Alianza. ¿Por qué?

--Esta vez siguió convocando a la gente que desobedecía la orden de una fiscal y un juez consideró que eso era desobediencia y ordenó la detención. Antes se ve que nunca intentó incumplir con la orden de un magistrado y ahora se encontró en esa situación. Si ante la orden de un magistrado alguna persona desobedece, comete el delito de desobediencia. Por eso ordenó las detenciones.

--¿Entonces usted cree que la detención estuvo bien?

--No puedo juzgar de esa manera, sólo conozco la exteriorización del hecho. No conozco la causa porque el Poder Judicial es independiente. Si estuvo bien o mal es el Consejo de la Magistratura el que tendrá que decirlo.

--¿Qué novedades hay en la investigación del tiroteo en Corrientes? ¿Se sabe quién dio la orden de disparar, que derivó en dos muertes?

--Quiénes eran los francotiradores, quién ordenó disparar, lo debe estar estudiando el juez penal a cargo de la investigación sobre la muerte de las dos personas.

--Usted, como secretario de quien dependen las fuerzas de seguridad que intervinieron, ¿qué información tiene?

--Nosotros no tenemos información de la causa del juez. En este momento no tengo la precisión, pero supongo que debe haber una presentación hecha por el Estado nacional y los abogados para tratar de impulsar el tema, porque las fuerzas federales que estaban a disposición del juez tuvieron ocho bajas con motivo del ataque de los francotiradores.

--¿Qué pruebas hay de que los jóvenes murieron con balas de infiltrados?

--A los francotiradores siempre se los puede suponer como infiltrados. Francotirador es un libre tirador, alguien que no se identifica, que no está uniformado. En Corrientes hubo una grave responsabilidad por parte de la policía provincial, que debió haberle dado protección a la Gendarmería y no se la dio, y permitió que durante casi siete horas existiera una balacera contra las fuerzas federales sin ir a la búsqueda y la identificación de quiénes estaban tirando. Tiraron contra los gendarmes, contra los civiles, contra todo lo que se les cruzó. Quiénes eran, no lo sabemos.

--¿Por qué se está haciendo una investigación administrativa dentro de la Gendarmería?

--Siempre que hay alguna actividad donde hay heridos se hace un sumario para ver quiénes los hirieron. Eso le sirve a las propias fuerzas para analizar su comportamiento.

--Apareció un equipo de intercepción de llamadas debajo del puente. ¿Qué se sabe de esto, quién lo usó, a quién pertenecía?

--Un aparato que estaba en la frecuencia que estaba utilizando la Gendarmería estaba tirado debajo del puente y había una casilla de madera con el equipo de transmisión de exteriores de una FM. Lo primero le llamó la atención, la segunda no. Alguien estaba escuchando a la Gendarmería. Hay una denuncia, pero no se sabe de quién era el equipo.

--¿Qué otros temas puntuales le preocupan ahora?

--La preocupación que tiene el Gobierno es la sincronización de las acciones de todas las policías del país. Para optimizar el desempeño hay que articular eso. El primer elemento encaminado a eso es la creación del Consejo Federal de Seguridad, el ámbito en el cual los responsables de la seguridad de las 26 provincias y del Gobierno de la ciudad tienen que tratar de sincronizar acciones. No solamente hay que sincronizar las policías sino también los sistemas judiciales. A veces hay que sincronizar acciones en las jurisdicciones limítrofes y a veces a nivel internacional. Es, por ejemplo, el caso de los robos de automotores. Si tienen un auto robado en Santa Fe, a lo mejor el auto fue levantado en la provincia de Buenos Aires, entró a Santa Fe y habría que ver a qué ciudad o país se dirigía. La sincronización con los sistemas judiciales apunta a desentrañar la banda y no solamente a la condena del tipo que estaba trasladando el vehículo. Hay muchos otros temas. El perfeccionamiento y la capacitación policial y la incorporación de tecnología.

 

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