Por Santiago Rodríguez Las
conversaciones que los principales operadores políticos de la Alianza y Nueva Dirigencia
mantienen desde hace tiempo de cara a las próximas elecciones porteñas están a punto de
comenzar a rendir sus frutos: los diputados que acompañan a Gustavo Beliz se sentarán
hoy en sus bancas de la Legislatura para comenzar a discutir la ley electoral del distrito
y no descartaron llegar a un acuerdo con la coalición para facilitar su aprobación.
Detrás de este primer entendimiento subyace la posibilidad de que Nueva Dirigencia
termine respaldando al candidato aliancista a jefe de Gobierno de la ciudad, Aníbal
Ibarra, en una eventual segunda vuelta contra Domingo Cavallo.
La convocatoria a las elecciones porteñas es un asunto que va de la mano de la sanción
de la ley electoral, prevista en la Constitución local. En la jefatura de Gobierno de la
ciudad no descartaron convocar con el Código Nacional Electoral, que es el instrumento
que siempre se utilizó hasta el momento, si los legisladores no aprueban la norma. Pero
en el entorno del candidato de la Alianza consideran que es preciso terminar con las
listas sábanas y, por lo tanto, no están de acuerdo con esa alternativa. El problema es
que la Alianza requiere de diputados de otros bloques porque por sí sola no reúne los
dos tercios necesarios para aprobar la ley electoral. Nueva Dirigencia colaboraría para
lograr esa mayoría especial.
Decidimos comenzar a debatir con el fin de llegar a un acuerdo en este tema,
explicó a Página/12 un destacado operador de Nueva Dirigencia. Las diferencias entre ese
partido y la Alianza en torno de la ley electoral ya no son sustanciales como lo eran
hasta hace unos días. Los hombres de Beliz no tendrían mayores inconvenientes en que 20
diputados sean elegidos por distrito único como hasta ahora y los 40 restantes en las
cuatro zonas 10 en cada una en las que se dividirá la ciudad para los
comicios. Lo que reclaman es la aplicación de un sistema de proporciones que resulte
favorable a los partidos chicos, cosa que los aliancistas no advierten como un
inconveniente insalvable.
El debate sobre la ley electoral que entrará en vigencia en la ciudad quedará abierto
hoy y todo indica que se prolongará en el tiempo. Un importante legislador aliancista
especuló con que se podría llegar a sancionar en los primeros días de
febrero y explicó a este diario que no se puede seguir dando vueltas más
allá de esa fecha, porque cada partido debe adecuar sus estatutos y elegir a sus
candidatos.
Pero en la Alianza la expectativa no está centrada sólo en el hecho de que la gente de
Beliz facilite la aprobación de la ley electoral, sino también en lo que ese apoyo puede
significar a futuro. Desde hace tiempo los operadores más importantes de Nueva Dirigencia
y de la coalición hablan sobre la posibilidad de que uno apoye al otro en el caso de un
ballottage. Los principales interlocutores son el belicista Enrique Rodríguez y el
frepasista Raúl Fernández, aunque como publicó hace un mes Página/12 también Ibarra y
Beliz evaluaron esa alternativa en un almuerzo, en el cual acordaron además no agredirse
durante la campaña. Ahora que Beliz decidió aportar a la sanción de la ley electoral y
las encuestas muestran a Ibarra primero, en el entorno del aliancista se entusiasmaron con
la posibilidad de que Nueva Dirigencia termine apoyándolos si hay -como también indican
los sondeos segunda vuelta.
EL GOBERNADOR DICE QUE COBRARA 12 MIL PESOS
Ruckauf es duro para las cuentas
La
repercusión pública del astronómico sueldo que iba a cobrar Carlos Ruckauf, unos 23.000
pesos como anticipó Página/12 el domingo pasado, borró la sonrisa del gobernador y el
autosalariazo quedó trunco. El mandatario bonaerense anunció ayer que su remuneración
sólo será de 6000 pesos, aunque por los adicionales la cifra trepará a 12.000. Sin
embargo, fuentes de la Legislatura provincial aseguraron que hasta tanto no se
defina concretamente cuál es el básico de los miembros de la Corte de Justicia
bonaerense, que sirven de parámetros para el sueldo del gobernador, es difícil
determinar cuánto cobrará Ruckauf y su gabinete.
A Ruckauf no le gustó la revelación del monto de su salario y no dudó en considerar a
este diario como irresponsable por divulgar esta información. Para tratar de
disipar su responsabilidad, dijo que el gobierno de Eduardo Duhalde envió a la
Legislatura, como es su obligación, la fijación del sueldo del gobernador del orden de
los 6000 pesos que, más el conjunto de los adicionales, podría irse a una cifra cercana
a los 12.000 pesos, pero inmediatamente después se contradijo al sostener que
fijé por decreto que ningún funcionario, incluido el gobernador, puede cobrar más
de 10.000 pesos por mes.
Lo que no aclaró el mandatario provincial cuál es el básico de su remuneración. Por
ley debe ser similar a la del presidente de la Suprema Corte de Justicia bonaerense. Es
aquí donde comienza a gestarse otro interrogante; los propios legisladores de la Alianza
sostienen que no está suficientemente claro cuál es el básico de un juez de la Corte y
esto es fundamental para calcular el salario de Ruckauf que todavía sigue siendo una
incógnita.
Walsh junto a Gaggero Patricia Walsh-Manuel Gaggero. Esa es la fórmula que Izquierda Unida
presentaría para las próximas elecciones a jefe de Gobierno porteño. Estamos
conversando y es muy probable que se logre este acuerdo. No tengo ningún problema en ir
primero o segundo, explicó Gaggero, a quien el Frente de la Resistencia nomina para
la jefatura de la comuna. Se está discutiendo, indicó también el dirigente
del PC Jorge Kreynes. En el esquema que están pensando los partidos de izquierda Walsh
candidata a la presidencia en los últimos comicios encabezaría la fórmula
para el Ejecutivo, mientras que el secretario general del PC, Patricio Echegaray, sería
el primer candidato a legislador local.
Yoma quiere a Cavallo
Es un buen candidato y sería un buen jefe de
Gobierno, opinó ayer el senador menemista Jorge Yoma acerca de Domingo Felipe
Cavallo y se pronunció así a favor de un acuerdo entre el justicialismo y Acción por la
República para las próximas elecciones porteñas. A propósito de esa posibilidad, Yoma
sostuvo que sería lógica, porque Cavallo hizo toda su carrera política en el
peronismo. Su vuelta al peronismo no sería nada rara, sería la lógica; fue diputado
nacional y siete años ministro de (Carlos) Menem. El senador riojano consideró,
además, que la pelea entre el ex mandatario y su ex ministro no sería obstáculo para
una alianza porque en política los odios son tan efímeros como los amores. |
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