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Por Maximiliano Montenegro@La Ley de Emergencia Fiscal, que el Ejecutivo presentará el lunes al Congreso, incluye una batería de medidas para atacar la evasión impositiva y previsional. Desde un sistema electrónico de control en sectores de altísima evasión, como el agropecuario, hasta un nuevo régimen previsional para la construcción. Además, se otorgará a las AFJP la potestad de intimar a empresas y autónomos que no estén pagando los aportes previsionales. También será incluida una norma para bancarizar las operaciones superiores a los 10 mil pesos y extender el sistema privado de control preembarque de las importaciones. Todavía se discute si conceder facultades extraordinarias a la AFIP, para trabar embargos y ejecutar en sede administrativa. Mas allá de estas iniciativas, el número dos de Rodolfo Terragno en la Jefatura de Gabinete, Raúl Palacio, le dijo a Página/12 que esa repartición ve con buenos ojos la política de dar a publicidad la lista de grandes evasores del fisco. Ayudaría a manejar el tema con la mayor transparencia, aseguró. Los equipos del Gobierno trabajan a tiempo completo para afinar los detalles de la Ley de Emergencia Fiscal. El proyecto contempla una agresiva modificación de las leyes laborales, en línea con los reclamos empresariales y del FMI; y una serie de instrumentos para facilitar el financiamiento de las PyMEs (ver aparte). En lo económico, el otro pilar del programa de Emergencia radica en un conjunto de medidas para reducir la evasión.En este tema, Terragno hizo valer el mandato constitucional que pesa sobre la Jefatura, como responsable político de la recaudación fiscal, y concentró el trabajo de los equipos técnicos de la AFIP bajo su órbita. Palacios, secretario general de la Jefatura, adelantó a este diario que la ley incluirá los siguientes puntos: u Creación de un sistema de control electrónico para fiscalizar sectores identificados como de alta evasión. Sería el caso de la compraventa de ganado, donde el dispositivo serviría para controlar el origen de la hacienda, el volumen de la faena y el destino de la carne. Sólo se especificará un marco legal y que autoridad de aplicación será la Secretaría de Agricultura y la AFIP. Como instrumentos, podrían utilizarse chips prendidos en los vacunos y/o sensores fotoeléctricos en corrales y mataderos. También se aplicará el control electrónico para los molinos harineros. u Bancarización de todas las operaciones superiores a los 10 mil pesos. Para que la compraventa de propiedades se deje de liquidar en efectivo, se propiciará una modificación de las escrituras para conciliarlas con los medios de pago bancarios. u Habrá un régimen previsional especial para el sector de la construcción, similar al que la reforma tributaria dispuso para el servicio doméstico. El mismo se aplicaría para las empresas constructoras con una facturación inferior a los 12 millones de pesos. Consistiría en un aporte fijo según la categoría ocupacional a cambio de un seguro de salud y beneficios previsionales. Además, al acogerse al régimen, automáticamente, se les otorgaría la residencia a los inmigrantes de países limítrofes que trabajan en el sector. u Se instrumentará un sistema de fiscalización previsional por medio de las AFJP, a las que se les otorgaría facultades para intimar y efectuar denuncias legales contra las empresas y autónomos que no efectuaran aportes previsionales. Actualmente, sólo el 45 por ciento de los afiliados al sistema de AFJP están pagando las contribuciones previsionales. Así, se calcula que la evasión entre los que están inscriptos y no pagan asciende a los 4 mil millones de pesos anuales.u Se extenderá el sistema de control preembarque de importaciones, que actualmente cubre un 20 por ciento de las posiciones arancelarias. Además, se prevé crear un fondo específico para su financiamiento, que podría surgir de una tasa especial (de entre 0,25 y 1 punto) a las importaciones.Hoy, el fisco les adeuda a las empresas privadas de control unos 45 millones de pesos.u Se le dará un status legal especial al SINTyS (Sistema de Información Tributaria y Social), obligando a organismos públicos y privados a aportar sus registros a esa base de datos. El SINTyS, un proyecto a cargo de Carola Pessino, funcionaria sobreviviente del menemismo, permitiría cruzar información de distintas fuentes (seguro de salud, operaciones bancarias, registro automotor, adquisiciones inmobiliarias, etc.) para ayudar a la AFIP a detectar evasores. Todavía no está decidido si se le otorgará facultades extraordinarias a la AFIP para ejecutar en sede administrativa a evasores y morosos, salteando la vía judicial. Los detractores de la medida dicen que vulnera el derecho constitucional de defensa ante la Justicia, convirtiendo a la AFIP en juez y parte.
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