El
brasileño está decididamente molesto. Cuando entrás a un negocio te saludan en
castellano, cuenta irritado sobre las playas de su propio país. Es que, al grito de
déme dos, la horda de argentinos ya empezó a desembarcar en las costas
brasileñas. La diferencia cambiaria, ventajosa para los turistas, alimenta los
contingentes que eligen principalmente Florianópolis, pero también Salvador, Río,
Buzios y Camboriú. Con la devaluación empezó la catarata y desde hace 90 días en
clase turista está todo agotado, informa un representante de ventas de Varig. Un
panorama similar describen las empresas de ómnibus, que aunque multiplicaron los coches
con destino a Florianópolis aseguran no tener ni una plaza disponible en las próximas
semanas. Los operadores turísticos brasileños se frotan las manos ante lo que, confían,
será una temporada record: dicen que esperan entre 700.000 y un millón de argentinos,
ávidos de gastar allí sus dólares.Tras el fracaso de ventas, en materia hotelera, que
significó la Reveillon 2000, con el comienzo de la temporada verano otra vez la sonrisa
vuelve al rostro de los empresarios del sector turístico. Es que miles de argentinos, por
aire y por tierra, están llegando día a día dispuestos a revivir el festín de compras
de principios de los 80 y a gozar de algunas de las mejores playas y aguas del
continente.Un preanuncio de lo que serán los balnearios del sur Florianópolis o
Camboriú- lo representan los datos que indican que hasta el día 18 no hay pasajes para
viajar por tierra y que el número de micros que diariamente son despachados
completos se ha triplicado. A Florianópolis estamos enviando 10 coches
diarios y a Río 1, cuando lo normal eran 3 y 1 asegura una empleada de la empresa
de ómnibus Pluma, cuyas unidades por 171,50 pesos, en servicio común, y 239, en coche
cama, llevan y traen a la oleada porteña rumbo a la isla. Un panorama similar se percibe
en las ventanillas de Flecha Bus cuya flota diaria se duplicó en relación a lo que
fue la última semana de diciembre.Pero no todos los interesados en viajar han hecho
preparativos con antelación; al menos eso se desprende de la información que brinda una
empleada de la oficina turística de la embajada de Brasil en Buenos Aires.
Actualmente estamos atendiendo entre 170 y 200 consultas diarias sobre lugares y
posibles destinos, informa en perfecto portuñol Cristiane quien asegura que los
destinos más buscados por los argentinos se reparten entre Florianópolis, Río, Buzios,
Salvador, Natal y Fortaleza.Página/12 dialogó con varios argentinos que ya están
dorándose bajo el sol brasileño. Elegimos Florianópolis por su cercanía y por el
costo de los pasajes, cuenta Pablo, de 28 años quien está disfrutando, junto a su
mujer, de las playas y de la movida nocturna preparada para los argentinos.
Después de un buen día de sol la escena se traslada a los boliches, para los más
jóvenes, y a las casas de espectáculos, para los mayores, cuenta Ezequiel de 35
años quien un día llegó como visitante y nunca más pudo volver a su departamento del
barrio de Congreso. Ahora hay algo que ha invadido toda la costa. Se llama Axé
music y empezó como una especie de gym-danza de playa, hasta convertirse en el ritmo que
suena en todos lados, con el que grandes y chicos queman calorías en masa, asegura.
Un paraíso con pocos argentinos es lo que vino a buscar Pepe quien eligió
Salvador, capital del estado de Bahía, como lugar para gastar sus dólares. Ir a
Florianópolis es como estar en Mar del Plata, pero con argentinos barderos, por eso me
vine para el norte. Acá por 15 pesos hago buceo y si tengo mucha sed puedo morir tomando
cerveza por 1 dólar la botella. Gustavo tiene 25 años y se declara el vocero
periodístico de un grupo de chicos que llegó de Almagro. El mejor lugar es
el Morro de San Pablo. Allí hay fiesta permanente de argentinos y europeos. Y de
inmediato empieza a narrar una travesía que, por sólo 7 pesos, incluyó un viaje en
ferry, hasta la isla de Itaparica, su cruce en ómnibus hasta Valencia ypor último la
llegada a su destino en un barquito de madera. Para nosotros Brasil está regalado
asegura. Por 35 dólares por día alquilamos una posada en la playa y por 1,50
te tomás una caipirinha cuando la garganta te lo pide. Pero no todo es carnaval en
tierra carioca. Maximiliano, de 24 años, viajó a Río junto a dos amigos con quienes
alquiló un departamento desde Buenos Aires por 700 dólares la quincena.
Según cuenta le habían prometido dos ambientes junto a la playa a cambio de abonar un
adelanto de 300 dólares. Así lo hizo. La diferencia, según lo pactado, la pagaría en
una inmobiliaria de Copacabana al recibir la llave. El depto. existía, la
inmobiliaria también, pero de la vieja que nos sacó los 300 mangos nadie tenía
idea.Informe: Daniel Franco. |