Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


“Vamos a conseguir un acuerdo
a más largo plazo”

na06fo01.jpg (9663 bytes)

na06fo02.jpg (7436 bytes)
Ministro de Economía, José Luis Machinea, y número dos del FMI, Stanley Fischer.
Estuvieron reunidos en Washington durante cuatro horas, hablando de la situación argentina.


t.gif (862 bytes)  ”Pensamos que en las próximas semanas vamos a lograr un acuerdo con el Fondo Monetario, y que este acuerdo va a ser a más largo plazo que el actual”, dijo el ministro de Economía, José Luis Machinea, tras reunirse por espacio de cuatro horas, con el número dos del FMI, Stanley Fischer. Previamente, se había entrevistado con Lawrence Summers, secretario del Tesoro norteamericano. Entusiasmado por el trato recibido en Washington, Machinea afirmó que allí existe “una visión muy positiva de la política económica” aplicada en Argentina por el gobierno de Fernando de la Rúa.Ayer, bien temprano, José Luis Machinea se encontró con el secretario del Tesoro norteamericano, Larry Summers. Con el aval de su par norteamericano, marchó un rato más tarde para afrontar el primer round con el FMI, que reclama explicaciones de por qué Argentina superó la meta de déficit fiscal pautada para el año pasado en casi 2 mil millones de dólares y cuáles son las garantías de que no sucederá lo mismo este año, en el marco de un nuevo acuerdo. Así, mantuvo una reunión de cuatro horas, inusualmente larga para entrevistas de este nivel, con Stanley Fischer, el hombre del gobierno norteamericano en el Fondo y, por lo tanto, en la actualidad, el funcionario con mayor influencia dentro del organismo. Distendido, después del encuentro, confió en que, en las próximas semanas, Argentina logrará “un acuerdo a más largo plazo” con el FMI. Las negociaciones formales se iniciarán el miércoles próximo, cuando desembarque en Buenos Aires la misión técnica encabezada por la italiana Teresa Ter Minassian. Sin embargo, Machinea habría dado ayer en Washington un paso clave, al tantear la posibilidad de negociar con el Fondo un nuevo acuerdo que podría extenderse hasta el 2003, es decir, hasta el final del mandato de Fernando de la Rúa. Así, el nuevo programa con el FMI serviría de paraguas frente a cualquier tormenta que se desatara en los mercados financieros internacionales.Por lo pronto, el equipo económico pretende que el FMI extienda el financiamiento “contingente” disponible para Argentina de 2800 a 5000 millones de dólares. Esos fondos sólo serían desembolsados en caso de que el país enfrentara una crisis de financiamiento. Mientras tanto, actuarían como un seguro para la Convertibilidad a los ojos de los inversores internacionales. Pero claro, en el Fondo nada es gratis. En Washington dudan de que la reactivación sea tan vigorosa como sostiene Machinea y quieren garantías de que el gobierno nacional podrá cumplir con una meta de déficit fiscal para este año de 4500 millones de dólares. Incluso, a costa de exigirle al Gobierno de que se comprometa a realizar un nuevo recorte del gasto público hacia mediados de año si los números de recaudación no vienen según lo esperado. Además, Ter Minassian y compañía pretenden que el ajuste alcance también a las provincias (ver aparte).Simultáneamente, a miles de kilómetros de Washington, desde Miramar, el presidente Fernando de la Rúa dijo que el Fondo Monetario no presiona a la Argentina: “No es presión, son puntos de vista”, afirmó.

 

EL FANTASMA DEL ESTALLIDO SOCIAL EN EL INTERIOR
Catorce provincias en crisis

Por M.M.

t.gif (862 bytes) Por lo menos catorce administraciones provinciales se hallan en una delicada situación financiera que, de profundizarse, dispararía más de un conflicto social. Casi por igual, la responsabilidad pesa tanto para justicialistas como para la Alianza. Así surge de un informe sobre las finanzas provinciales, elaborado por la consultora M-Unit, especializada en asesorar a gobiernos del interior. Por eso, el interés del gobierno nacional de negociar caso por caso, al margen de las presiones del Fondo Monetario. Las siete en la cuenta del PJ: Tucumán, Tierra del Fuego, Salta, Jujuy, Formosa, Misiones y La Rioja integran el lote de administraciones justicialistas “altamente endeudadas”, o con problemas para abonar a proveedores y, al menos, salarios de diciembre o noviembre y medio aguinaldo. Con los siguientes casos particulares:u Tucumán: “Esta provincia es equivalente a Tierra del Fuego respecto de la gravedad de sus indicadores financieros y la temperatura social existente”, asegura el estudio. Y agrega que “sólo la emisión de bonos con poder circulatorio, emisión de cheques diferidos y estrategias de financiamiento de corto plazo han permitido financiar el pago de parte del medio aguinaldo”. u La Rioja: “La futura eliminación del régimen de promoción industrial y el veto del Ejecutivo de la ayuda especial de 250 millones de pesos anuales tornarían imposible la sustentabilidad financiera de la provincia”, se dice. Para colmo, ya no quedan activos a privatizar y, pese a los ATN de la era menemista, la provincia tiene afectada la coparticipación en un 65 por ciento para pagar deudas. “No contar con recursos excepcionales y el aumento del endeudamiento con la reestatización del Nuevo Banco de La Rioja impiden abonar el sueldo del mes de diciembre, cuestión que se traslada a los municipios”, afirma MUnit. Las siete en la cuenta de la Alianza: Catamarca, Chaco, Entre Ríos, San Juan, Chubut y Río Negro son también provincias altamente endeudadas. A las que hay que sumarle la dramática situación de Corrientes, bajo la intervención federal a cargo de Ramón Mestre. Con el siguiente detalle: u Río Negro: es hoy una de las provincias más complicada financieramente. Tiene embargados el 98,5 por ciento de los fondos que recibe por coparticipación de impuestos. Adeuda parte de los aguinaldos y el mes de diciembre a los empleados públicos.u Catamarca: “La falta de financiamiento para cancelar el mes de diciembre y medio aguinaldo en la provincia y municipios, así como el atraso en el pago de proveedores y contratistas, y el congelamiento de las grandes inversiones mineras, debido al derrumbe del precio internacional del oro y el cobre, alimentan un clima de convulsión social”.

 

 

PRINCIPAL