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Después del anuncio del plan presidencial de dolarizar la economía para salvarla de la peor crisis de su historia, la protesta social aumentó y el FMI prometió enviar una misión.
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![]() Hoy, el Parlamento indígena, conformado por la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), retoma sus reuniones luego de una pausa desde el sábado. La Coordinadora de Movimientos Sociales de Ecuador rechazó ayer el sistema de "dolarización" y ratificó la convocatoria a una "protesta total" para exigir la renuncia del jefe del Estado. La Coordinadora, que junto a la poderosa Conaie han convocado a un levantamiento popular para el próximo sábado, anunció que "la movilización será progresiva" hasta lograr que Mahuad dimita. Ese frente social rechazó mediante un comunicado la sola idea de dolarizar y opina que esa decisión "significa una profundización del modelo neoliberal que agravará los problemas del país y sumirá en mayor miseria a las mayorías". Ratificó su reclamo para que Mahuad dimita con todo su equipo de gobierno, así como la "autodisolución del Congreso" y la reorganización de la Corte Suprema de Justicia. Comerciantes informales y formales también han anunciado medidas de presión ante la inactividad del mercado que, según sus voceros, los ha llevado a la bancarrota. Las manifestaciones estudiantiles que se ubican alrededor de las universidades estatales en Quito y Guayaquil ya se reanudaron y tienden a tomar mayor fuerza, mientras continúa vigente el estado de emergencia decretado por el gobierno desde este jueves pasado. Los sindicatos públicos han organizado una jornada de protesta para el miércoles, aun conociendo que la represión podría ser muy fuerte, ya que derechos constitucionales como el de reunión y protesta están suspendidos por la emergencia nacional. La dolarización sólo podrá entrar en vigencia una vez que sea aprobada por el emisor Banco Central (BC). Uno de sus directivos, Mario Prado, presentó ayer su dimisión ante el Congreso nacional. En carta que hizo llegar al presidente del Parlamento, Juan José Pons, argumentó que ante la falta de consenso para estabilizar la economía, consideraba que no podía permanecer en el cargo y comunicó que su decisión era irrevocable. Virginia Fierro renunció ayer por la noche como gerente general del emisor Banco Central del Ecuador por discrepancias con la propuesta de dolarización, medida que era analizada por el directorio de esa entidad monetaria. Se esperaba un pronunciamiento de Pablo Better, presidente del BC y de los restantes miembros de esa entidad, que la semana pasada anunciaron que no habría dolarización ni convertibilidad "porque el país no estaba debidamente preparado". En caso de que Better y los demás miembros del directorio del BC se resistan a la dolarización, podrán ser destituidos por el Parlamento a petición del jefe del Estado. El Fondo Monetario Internacional (FMI) reaccionó de inmediato a la noticia de la dolarización, y su director, Michel Camdessus, emitió ayer un comunicado en el que --sin calificar la medida-- compromete los esfuerzos del organismo. Una vez que se identifiquen las medidas apropiadas, el FMI "está dispuesto a trabajar con las autoridades ecuatorianas para apoyar su programa económico", señaló Camdessus, quien agregó que el FMI "aportará asistencia técnica para adaptar sus estrategias fiscales y bancarias a la dolarización". El Instituto tenía previsto el envío de una misión a Quito la semana próxima, pero el anuncio de la dolarización "cambia completamente la naturaleza de la misión". El economista Guillermo Calvo, profesor de la Universidad de Maryland y especialista en dolarización, dijo que lo más preocupante del caso ecuatoriano es que el gobierno de Mahuad "ha perdido totalmente la credibilidad", lo que significa que una salida podría requerir "un cambio, en el más alto nivel". Calvo opinó que el problema crucial para que la dolarización tenga éxito en Ecuador es la reforma del sistema financiero y del sector bancario, ya que los bancos "están virtualmente quebrados" y el gobierno carece de recursos para recapitalizarlos. En la Argentina, el ex ministro de Economía, Domingo Cavallo, padre reconocido de la "convertibilidad", decidió ayer guardar silencio este lunes sobre la dolarización impulsada en Ecuador. Cavallo asesoró al depuesto gobierno ecuatoriano del ex presidente Abdalá Bucaram, a quien había entusiasmado a examinar seriamente la posibilidad de establecer una moneda convertible, apoyándose en el modelo anticrisis que él impulsó en la Argentina en 1991.
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