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Por Victoria Ginzberg  La
subsecretaria de Derechos Humanos, Diana Conti, se entrevistó ayer con miembros de la
mesa directiva de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH). Durante la
reunión se habló extensamente de la controvertida Comisión de la Verdad que se crearía
dentro de la subsecretaría para sistematizar la información sobre los crímenes de la
última dictadura. "Nosotros recalcamos la importancia de no ceder al terrorismo
verbal de los militares que tienen que declarar en los juicios y los que alertan sobre una
posible intranquilidad en las Fuerzas Armadas por ese motivo", aseguró Simón
Lázara, vicepresidente de la APDH. Este encuentro fue el primero de una serie de
entrevistas que la funcionaria mantendrá con organismos de derechos humanos y las
Cámaras Federales que investigan el destino de los desaparecidos. Adolfo Gass, Juan José Prado, Juan Carlos Dante Gullo, Lucía Alberti, Sergio Di Gioia, Leandro Despuy, Horacio Ravenna, Ana María Mercado y Aldo Etchegoyen fueron, además de Lázara, algunos de los miembros de la APDH que recibieron en su sede a Conti. Durante el encuentro, que se realizó en un clima abierto y tranquilo, la funcionaria explicó que en la subsecretaría se está pensando implementar un mecanismo para ordenar y acrecentar la información sobre el destino de los desaparecidos, pero aclaró que aún no había una definición sobre la metodología que se iba a utilizar. La semana pasada, las agrupaciones defensoras de los derechos humanos se intranquilizaron cuando se enteraron de que una de las propuestas de Conti era que los militares que quisieran aportar información pudieran declarar ante un grupo de notables bajo identidad reservada. Los miembros de la APDH le recordaron a la funcionaria que el ex jefe del Ejército, Martín Balza, realizó en varias oportunidades reclamos para que sus subordinados aportaran, anónimamente, datos sobre los desaparecidos y no obtuvo respuesta. Todo parecería indicar que la propuesta de identidad reservada para los militares no prosperará. Colaboradores de la subsecretaria aseguraron que fue sólo una idea que se barajó, pero que aún no está definida. De hecho, agregaron que la ronda de reuniones de la funcionaria con los organismos y con las Cámaras Federales --que hoy continuará con una visita a las Abuelas de Plaza de Mayo-- está destinada a oír y consensuar propuestas con respecto al funcionamiento de la comisión. Durante la entrevista de Conti con la APDH --el único organismo de los llamados "tradicionales" que no se pronunció explícitamente a favor de su nombramiento-- se mencionó también el proyecto de Ley de la Verdad, redactado por los diputados justicialistas Mario Cafiero y Marcelo López Arias. En esa propuesta, criticada tanto por los sectores cercanos a las Fuerzas Armadas como por los defensores de derechos humanos, se establecía la creación de una Comisión de la Verdad integrada por diputados y senadores, y conducida por un consejo designado por el Poder Ejecutivo. Ayer se recordaron los reparos que los organismos plantearon a la propuesta. En su momento, por ejemplo, se recalcó la necesidad de que la búsqueda de la verdad debía ir acompañada por la identificación de los responsables. El proyecto fue presentado en febrero de 1998, pero quedó archivado en un cajón. Luego, los juicios de las Cámaras Federales hicieron que la búsqueda de la verdad fuera canalizada judicialmente. Allegados a la subsecretaria aclararon que la futura Comisión de la Verdad no se interpondrá en la tarea que están realizando los Cámaras Federales con respecto a la averiguación de lo sucedido con los desaparecidos. Uno de los temores de las agrupaciones defensoras de los derechos humanos era que el organismo que funcionará en la subsecretaría estuviera destinado a trabar la marcha de los juicios. Hasta ahora, lo único que parece estar firme en relación con la comisión es que se intentará sistematizar y preservar la información --a través de su informatización-- que existe tanto en la subsecretaría como en los organismos de derechos humanos.
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