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Aunque por ventas de
pasajes Aerolíneas factura alrededor de 1000 millones de pesos anuales,
en 1999 registró pérdidas por 170 millones y en el '98, por 68 millones.
El pasivo acumulado desde su privatización alcanza la friolera de 830
millones.
En el Ministerio de
Infraestructura prefieren esperar la propuesta que presentará Ferreras
antes de suspender el convenio con Estados Unidos. El acuerdo de
"cielos abiertos", firmado por el ex presidente Carlos Menem en
octubre del año pasado luego de un bienio de negociaciones, prevé la
desregulación total, en el transcurso de este año, del transporte de
cargas. Y en forma gradual de 21 frecuencias de pasajeros en cada país, a
razón de 7 por año, comenzando este año y terminando en el 2003. En ese
año se producirá, para ambos países, la desregulación total. No
obstante, este acuerdo estaba estrechamente vinculado a la participación
de American Airlines en la gestión y potencial control mayoritario de
Aerolíneas. La salida de los estadounidenses fue la primera señal de
fisura del acuerdo.
Al momento de la
privatización, el Estado garantizó a Aerolíneas el monopolio por diez años
de las rutas internacionales. Vencido el plazo, el Gobierno tiene la
facultad de otorgar nuevas licencias a otras operadoras nacionales. Esta
es la principal preocupación de los españoles, pues la exclusividad de
algunas rutas se cuenta entre los pocos activos no devaluados que le
quedan a la compañía.
Fuentes de la SEPI
informaron que el holding estatal está elaborando un plan de rescate para
AA luego de rechazar la propuesta de American para adquirir el paquete
mayoritario de la compañía. Según publicó la prensa española, la
propuesta habría consistido en el ofrecimiento de 200 millones de dólares
para adquirir el 68 por ciento de las acciones. Sin embargo, el rechazo no
se debió tanto a la cifra ofrecida como a la forma de abonarla. American
condicionó el pago a la obtención de ganancias durante los próximos
diez años; una oferta poco auspiciosa si se recuerda que durante su gestión,
iniciada en 1998, se registraron pérdidas, según resulta de los
balances, por más de los 200 millones propuestos.
Según trascendió, el
plan de salvataje y reestructuración que propondrá Ferreras el próximo
lunes será similar al Plan Director aplicado para Iberia, compañía que
luego de dar importantes pérdidas y llegar a situarse entre las peores de
Europa, comenzó desde entonces a dar ganancias. Los gremios locales, que
agrupan a los casi 6 mil trabajadores de AA, advertidos por el seguro
ajuste que se viene, propusieron la formación de un comité de crisis.
Desde España se pretende que el Estado argentino, que conserva sólo el 5
por ciento de la compañía, realice un significativo aporte de capital
para su salvataje. "No, absolutamente no", fue la categórica
respuesta del ministro de Infraestructura y Vivienda, Nicolás Gallo, al
ser consultado por enésima vez sobre la cuestión.
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