Por F. M. desde Mar del Plata
 La
tarde ya estaba calentita en el centro y al anochecer estalló en un feroz
tiroteo frente al estadio. El resultado es atroz: hay seis internados en
el hospital Interzonal de Agudos General San Martín, uno de ellos en
grave estado, cinco detenidos en la seccional 3ª marplatense de los
cuales cuatro habrían iniciado el tiroteo y cuyas identidades no fueron
proporcionadas. El quinto detenido es Salvador Eugenio Tapia, dueño del
puesto de choripán donde comenzó la pelea y del auto de donde se sacó
la única arma secuestrada. En la seccional también hay un número no
determinado de �demorados�.
A la tarde, la policía detuvo a más de diez adolescentes en la zona
céntrica porque produjeron pequeños incidentes y robos a turistas en la
peatonal. Varios de esos chicos estaban identificados con los colores de
Boca pero pertenecen al núcleo principal de la barrabrava boquense. Antes
de eso ya se habían cruzado con hinchas de River en encuentros en la
calle y la playa Bristol, pero las agresiones no habían superado los
insultos habituales de hinchas de equipos adversarios. El desastre se
produjo más tarde y en el seno de la barrabrava de Boca.
La interna explotó a apenas 50 metros del estadio José Minella y frente
a un numeroso personal policial afectado al operativo de seguridad del
clásico que se vio sorprendido y desbordado. Alrededor de las 18.45 un
numeroso grupo de barrabravas de Boca que se dirigían a la cancha
caminando por la Avenida de la Olimpíada se cruzó a la altura del bosque
del Tiro Federal, que linda con el estadio, con otro grupo de barras que
�estaban tomando bebidas frente a un puesto de choripanes�, según
dijeron testigos de la batalla. Comenzaron a insultarse. La pelea se
produjo por diferencias entre ambos grupos, principalmente entre �uno
que anda siempre con fierros y otro que no está de acuerdo con eso de las
armas�, coincidieron en el testimonio varios hinchas de Boca que conocen
la intimidad de �La 12�.
Tras los insultos, uno de los barras buscó un arma dentro de un auto
Peugeot 504 rojo chapa patente V 057397 con la que efectuó cinco
disparos, como comprobó la pericia policial. El dueño del vehículo y
del puesto de choripanes, Salvador Eugenio Tapia, quedó detenido tras el
tiroteo. Su esposa Griselda Moyano dijo que su marido no es el dueño del
arma: �Mi marido es el dueño del puesto de choripanes. El tiene el
puesto en Mar del Plata desde hace once años. La gente de Boca lo conoce
porque siempre le piden que le guarden los bolsos y las banderas�, le
contó a Página/12. Como mínimo, deberá explicar cómo estaba el arma
en el baúl de su auto.
Un oficial de la policía que presenció el tiroteo desde donde estaba
apostado relató que los disparos fueron realizados desde el bosque del
Tiro Federal, predio que da sobre la cabecera que ocupó la hinchada de
Boca: �Comenzaron a insultarse y uno de los hinchas se metió en el
auto, sacó el revólver, se metió en el bosque y desde allí empezó a
disparar. Después dejó el arma y comenzó a caminar, pero otro que
estaba con él agarró el revólver y se lo llevó�, dijo el policía
que prefirió guardar su nombre en el anonimato.
Entre los heridos que fueron internados en el hospital Interzonal con
custodia policial hay varios barrabravas con antecedentes en la Justicia.
Entre ellos, Fernando �Nando� Di Zeo y Miguel Angel �De Lomas�
Cedrón, que en marzo del año pasado participaron de la feroz golpiza a
los hinchas de Chacarita en la Bombonera. Cedrón y Leonardo Cabral son
los dos heridos más graves de los seis internados en el Interzonal. Los
otros son Juan Cabral Machado, Roberto Ibáñez y José Fernández. La
policía y el fiscal Gustavo Fissone trataban anoche de definir a qué
grupo pertenecen los seis heridos y los otros cinco detenidos en la
comisaría, entre los cuales está Tapia. Al cierre de esta edición
seguía tomando declaraciones a �varioshinchas demorados� tratando de
definir si participaron del enfrentamiento o sólo fueron testigos
presenciales.
Todavía no se pudo establecer la cantidad exacta de disparos producidos
durante el enfrentamiento. El arma secuestrada que estaba en el auto de
Tapia es un calibre 38 y tenía cinco vainas servidas. Pero Cedrón tiene
siete disparos, lo cual ya habla de la existencia de otras armas.
Testigos, vecinos, curiosos que suelen aparecer como hongos tras episodios
de esta naturaleza aportaban todo tipo de versiones, algunas sensatas,
otras disparatadas. Pero varios oficiales de la seccional 3ª consultados
por este diario coincidían en que hubo �no menos de 20 tiros durante la
balacera�.
| Uno operado y muy grave
Miguel Angel Cedrón resultó con las
heridas de mayor gravedad durante el tiroteo. Un médico del hospital
Interzonal dijo a Página/12 que �tiene los intestinos destrozados�,
cuando el barrabrava estaba en el quirófano. Tras la operación a que
fue sometido, el médico Norberto Abaurre dijo que �pudimos sacarle
la bala y cicatrizar las múltiples perforaciones en la zona
intestinal y ahora está fuera de peligro�. Cedrón fue pasado a una
sala de terapia intermedia, donde permanecerá en observación.
El otro paciente grave es Leonardo Cabral, quien tiene heridas de arma
de fuego en el tórax, abdomen izquierdo y pie izquierdo. Fernando Di
Zeo, el otro barra que estuvo en los incidentes de la Bombonera con
los hinchas de Chacarita, tiene una herida de arma de fuego en la cara
con salida en el maxilar. Roberto Ibáñez tiene un balazo en la
parrilla costal izquierda con orificio de salida. Jorge Cabral Machado
sufrió herida de arma blanca y de fuego en pie y rodilla izquierda,
mientras que José �Mellizo� Fernández tiene un balazo en el
cuello. |
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