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"La situación es grave.
Se ha excluido temerariamente al sector de la producción en la discusión
de modelo de ciudad que buscamos", escribió Meldini en una carta
dirigida a las cámaras industriales, en la cual advirtió sobre los
riesgos que correrían las empresas con el nuevo Plan Urbano. Según
Meldini, el actual Código Urbano --vigente desde 1977-- privilegia el
negocio inmobiliario en desmedro de las industrias, "y si no se
formulan cambios en los usos del suelo (las actividades que se pueden
desarrollar en un determinado lugar), las industrias de la ciudad van a
desaparecer".
Tanto la carta como las
declaraciones formuladas por el director general de Industria a Página/12
enervaron a Mahler, el jefe inmediato de Meldini. A menos de tres
meses de las elecciones en el distrito, en el Gobierno porteño no quieren
que se noten las controversias internas. Y ayer, después de leer el artículo
de este diario donde se reflejó la crítica carta de Meldini a los
empresarios, el subsecretario reiteró el pedido de renuncia a su
colaborador. Hasta anoche, el director general seguía ocupando su
despacho en el piso 15º de Sarmiento 630. Rafael Kohanoff, secretario de
Industria porteño, se encuentra en Italia y no se expidió sobre el
conflicto en su área.
"Meldini es un ex
funcionario", le dijo Mahler ayer a este diario.
--¿Por qué le pidió la
renuncia?
--Porque adoptó una posición
personal, que no se atiene a la realidad, de manera inconsulta.
--¿Es falso que el Plan
Urbano que prepara el Gobierno autónomo ponga en peligro la existencia de
las industrias, tal como plantea su colaborador?
--Así es. Meldini oculta la
situación real del sector. En el Plan Urbano está perfectamente
contemplada la competitividad de todas las actividades económicas,
incluida la industria.
--Sin embargo, los
empresarios industriales se sumaron a las críticas de Meldini y reclaman
cambios en el plan.
--No es cierto que haya
protestas. No hemos recibido ninguna.
--Pero Meldini reunió a
varias cámaras del sector y hubo coincidencias en el diagnóstico del daño
que provocaría el plan oficial.
--Es lógico que si un
funcionario exacerba a los empresarios, concite algún apoyo.
--¿Meldini se queda afuera
del Gobierno por ventilar una interna?
--Las razones del pedido de
renuncia son cuestiones de Estado que no pueden hacerse públicas. Lo
cierto es que en el Gobierno de la Ciudad no hay discrepancias.
Mientras se dirime la cuestión
política, los industriales criticaron ayer con dureza al plan que
motoriza el Gobierno porteño. "Necesitamos un Plan Urbano que
blanquee a las industrias que en gran medida no están habilitadas.
Estamos cansados de pagar coimas para seguir trabajando. Queremos pagar,
pero al Estado. Saldríamos beneficiados todos", señaló a este
diario Germán Lima, directivo de Apyme.
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