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Cuando se anunció la
reconciliación de sus ex ministros, el ex presidente llamó a los
integrantes del Partido Justicialista metropolitano, la única estructura
que todavía responde a sus deseos. Ayer, en sus oficinas de avenida
Libertador, Menem se encontró con Alberto Kohan, César Arias, Antonio
Cafiero, Daniel Scioli, Carlos Corach, Antonio Cassia, Miguel Angel Toma,
Alicia Pierini, Cristian Ritondo, Inés Pérez Suárez, Claudia Bello y
Kelly Olmos, entre otros. A todos les dijo que "es imprescindible
aprovechar el acercamiento entre Cavallo y Beliz, y así recuperar el
partido para los justicialistas con candidatos propios".
Inmediatamente los presentes
comenzaron a conversar sobre los escenarios posibles. *
Primer escenario. Mantener la candidatura de Raúl Granillo Ocampo,
algo que quedó descartado luego de que Menem ordenara conformar una
comisión para que se reúna con el ex ministro cuando regrese de La
Rioja. Menem quiere que hoy mismo defina de una vez por todas si renuncia
o no a su candidatura. En realidad, tal como confió uno de los
participantes de esa reunión a Página/12,
"a Granillo no se le perdona su compromiso con Cavallo en caso de
ballottage".
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Segundo escenario. Rechazado rápidamente por los participantes del
encuentro: llegar a las elecciones sin fórmula apoyando al binomio
Cavallo-Beliz. *
Tercer escenario. Al fin y al cabo, el único digerible para los
menemistas: tener un candidato.
Una vez establecido el consenso
las miradas de los presentes se dirigieron a las cabezas de Scioli y de
Cafiero. Varios de los participantes juran que Menem se inclinará por el
ex motonauta ya que pasó de ser independiente a menemista y, por último,
justicialista, situación que el propio Menem consideró a viva voz que
"ésa es la evolución normal de cualquier ser humano".
En tanto, los duhaldistas que
apoyan al cavallismo, Alberto Iribarne, Jorge Argüello y Alberto Fernández,
mantienen permanentes reuniones para determinar cómo sobrevivir a esta
reconciliación. Ninguno de ellos se anima siquiera a mencionar como
negativo el reencuentro de los candidatos. "Es altamente positivo, y
lo vamos a hacer ganar a Cavallo", dijo Argüello a este diario.
Desde luego, para ese caso esperan no quedar con las manos vacías. Cuando
se acercaron a Cavallo aspiraban a que Iribarne, ex jefe de campaña de
Eduardo Duhalde, fuera su compañero de fórmula. Hoy deben concentrar
toda su energía para convencer al pragmático ex ministro de Economía de
que Iribarne debe ser el futuro secretario de Gobierno o la cabeza de
lista a legisladores, lugar que habían negociado para el actual
legislador Argüello antes del reencuentro.
Por ahora, este grupo jura no
estar nervioso y que los acuerdos con Cavallo se mantienen intactos. De
todas formas observan con atención cómo se resolverá la situación
interna del PJ porteño.
El otro grupo que también mira
los movimientos del menemismo en el justicialismo metropolitano es el que
milita en las cercanías de Nueva Dirigencia, el partido de Beliz. Diego
Santilli, María Laura Leguizamón e Irma Roy son número puesto en la
lista de legisladores que presentará ND. Soportaron con estoicismo el
desplante de Beliz al acuerdo con el justicialismo, luego de que la
interna de su partido repudiara un posible acercamiento con el menemismo.
Hoy su moneda de cambio es la de ser responsables de la generación de una
tercera lista porteña, integrada íntegramente peronistas que no están
en el partido, y que lleven al binomio Cavallo-Beliz o Beliz-Cavallo en la
cabeza de la boleta electoral. Para ello están conversando con dirigentes
como Guillermo Oliveri, Carlos Sandá, José Santamaría (sindicato de
porteros) y Andrés Rodríguez (UPCN).
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