Por Victoria Ginzberg
El
periodista José �Pepe� Eliaschev se presentó ayer como testigo por
la defensa de Alfredo Astiz en el juicio por apología del delito contra
el represor. �Lo más grave es que no se les dijo la verdad a los
lectores� había asegurado Eliaschev sobre la entrevista publicada por
3puntos en enero de 1998, en la que Astiz se definió como �el hombre
mejor preparado para matar a un político o a un periodista�. Pero la
jugada no le salió muy bien al �ángel rubio�. El testigo afirmó que
era posible que el represor hubiera dicho lo que se le atribuye y que era
factible acordarse una extensa entrevista sin tomar nota.
Eliaschev manifestó ayer que los periodistas deben respetar dos valores
fundamentales: �identificar qué es información y qué opinión y
acreditar cuál es el origen de la información, y si no es posible,
explicar porqué�. Y ratificó que creía que Gabriela Cerruti había
ocultado a los lectores la forma en que se realizó el reportaje a Astiz.
�La entrevista debe ser un pacto y no daba la sensación de que en este
caso hubiese sido así�, afirmó Eliaschev ante una sonriente defensora
Perla Martínez de Buck. Pero el segundo tramo del testimonio no fue
favorable para el represor. �Yo no digo que Astiz no dijo lo que se le
atribuye. Como ciudadano y como perseguido no tengo dudas sobre el
carácter de Astiz y lo negativo que ha significado para la República
Argentina�, afirmó Eliaschev.
�Según su amplia experiencia ¿es posible recordar más de dos horas de
conversación y recordar textualmente más de 67 preguntas y respuestas?
-interrogó Martínez de Buck.
Eliaschev aseguró que �existen tantas posibilidades como periodistas�
y relató experiencias personales en las que realizó reportajes sin poder
grabar o tomar notas. Agregó además que �una persona como Astiz tiene
que impactar para recordar lo que dice�.
Finalmente, el juez Claudio Bonadío le preguntó al periodista si sus
declaraciones sobre la forma en que se realizó la entrevista fueron
hechas en base a una opinión personal o porque poseía información. �No
tengo información de la revista ni de los editores. Fue una apreciación
desde mis creencias y valores personales�, manifestó Eliaschev.
Antes de esta declaración, los marinos Aurelio �Za Za� Martínez y
Horacio Zaratiegui fueron sometidos a un careo que no aportó demasiado a
la causa. La discusión giró sobre una conversación telefónica en la
que Martínez le habría dicho a su compañero que se iba a ir al sur a
cumplir el castigo por haber sido el nexo entre el represor y Cerruti. �Za
Za� manifestó que a la hora en que supuestamente se había realizado la
llamada, él no había sido notificado de la sanción. El desacuerdo entre
Martínez y Zaratiegui se debía a que en la charla el primero habría
afirmado: �cada uno tiene un papel que cumplir�, lo que abonaría la
versión conspirativa acerca de que el reportaje de Astiz fue producto de
una operación del ex jefe de la Armada Carlos Marrón y a pedido del ex
presidente Carlos Menem.
El juicio oral continuará con la declaración de Claudia Acuña, ex
editora de 3puntos. Los periodistas Jorge Lanata y Martha Wierzbicki
Posse, pedidos por la defensa de Astiz, no se presentaron a declarar. El
secretario Nelson Vicente informó que Lanata �que fue citado nuevamente
para hoy� estaba fuera de la ciudad y Wierzbicki Posse dio parte de
enferma. A pedido del fiscal Gerardo Di Masi los alegatos, previstos para
hoy, se escucharán el viernes.
Astiz, el madrugador descubierto
El juicio oral en su contra por apología del delito convirtió al
represor Alfredo Astiz en un madrugador. Los tres días en los que
hubo audiencia llegó a los tribunales de Comodoro Py cerca de las
seis de la mañana para eludir los �escraches�, incluso cuando �como
ayer� la jornada judicial se inició a las dos de la tarde. A las
siete menos cuarto, el represor se bajó del Renault bordó y fue
abordado por dos reporteros gráficos que lo esperaban desde las 4.30
y un periodista radial. Los fotógrafos �entre ellos Enrique García
Medina de Página/12� persiguieron a Astiz por las escaleras del
edificio de los tribunales. El represor emprendió una carrera que lo
llevó al sótano mientras manoteaba al aire tratando de espantar a
los reporteros. Finalmente, el fotógrafo de este diario terminó en
el piso y el represor se fue a refugiar al despacho de su defensora,
Perla Martínez de Buck. De todas maneras, las precauciones del �Angel
Rubio� no alcanzaron. El viernes pasado, los HIJOS lo escracharon
dentro del tribunal. |
PELEA EN EL CONSEJO DE LA
MAGISTRATURA
Una manito para Brusa
El inminente juicio político al juez
santafesino Víctor Brusa desató roces sorpresivos entre el Jurado de
Enjuiciamiento y la Comisión de Acusación del Consejo de la Magistratura.
La comisión elevó ayer una nota en la que le cuestiona al jury haber
excluido parte de las pruebas que conformaron el dictamen acusatorio.
Entre el material descartado por el jurado figura una carpeta de recortes
periodísticos que, sostienen varios consejeros, �prueba el descrédito de
que es objeto Brusa�. Tampoco tomaron en cuenta otra carpeta presentada
por el propio magistrado santafesino con una �mil firmas� �en
términos del propio Brusa� de personas que avalaban su gestión al frente
del juzgado federal de Santa Fe, varias de las cuales serían falsas a
entender de miembros del Consejo. Y tampoco serían reales números de
documentos de identidad que figuran en la nómina.
En la reunión de la Comisión de Acusación de ayer, Fermín Garrote
propuso �plantear una cuestión institucional� contra el jury y
advirtió que, de prosperar el criterio de �voltear pruebas presentadas�,
la situación podría �derivar en un escándalo�. �Esto puede llega a
ser una anarquía�, protestó. �Nos da la impresión de que el jurado
está considerando a esto como un juicio de carácter penal, cuando en
realidad es un proceso de tipo político. Esto es lo peligroso�, añadió
el consejero y diputado de la Alianza, Melchor Cruchaga.
El titular de la comisión, el diputado peronista Miguel Angel Pichetto se
acopló a las quejas y agregó que el �recorte de pruebas por parte del
jury se hizo de manera discrecional�. Aunque no forma parte de la
Comisión de Acusación, la consejera Margarita Argüelles puso en duda
incluso que la actitud del jurado de enjuiciamiento tenga validez
constitucional.
Después del juicio a Brusa, que es el primero que llevará a cabo el jury
en su historia, en abril será juzgado el juez federal de Córdoba, Ricardo
Bustos Fierro, conocido por haber habilitado la reelección de Carlos Menem
a comienzos de 1999.
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