Por Raúl Kollmann
El
método elegido por Gustavo Beliz y Domingo Cavallo para dirimir su
interna es tan original �y complejo� que, en verdad, no se usó hasta
ahora en ningún lugar del mundo. Hoy se firmará el acuerdo con
Telefónica de Argentina, a un costo aproximado de 500.000 pesos, y será
esa empresa la que hará todo el proceso del voto telefónico. El proceso
es el siguiente:
Si usted es el
titular de su línea telefónica, podrá llamar el viernes 10 o el sábado
11 a un número determinado en el que funcionará una especie de centro de
atención. El viernes trabajarán allí 150 operadores y el sábado 300.
Por el método
de identificación de llamadas, en el centro de atención ya sabrán de
qué teléfono llega la comunicación y quién es el titular de la línea.
El siguiente
paso es que le pedirán su número de documento, con el que controlarán
que usted vote una sola vez ya que, a través de una computadora, harán
una especie de marca en el padrón. O sea que si usted llama nuevamente ya
lo tienen registrado como habiendo votado.
El operador
tendrá una versión del padrón en el que no figurarán los afiliados a
la UCR y a los partidos del Frepaso. De esa manera se controlará que no
voten afiliados de la Alianza.
Si usted no es
el titular de la línea, o sea que es la esposa, alguno de los hijos, la
madre o el familiar que fuera, no podrá votar a través de esa línea.
Obviamente tampoco sufragarán así los que no tienen teléfono o viven en
casas en que la línea no está a su nombre. Para estos casos habrá que
concurrir a un locutorio.
Los locutorios
en los que se podrá votar son los que actualmente existen en los barrios,
aunque no serán todos. Habrá una lista. En ese locutorio, el votante se
encontrará inicialmente con dos fiscales, uno de Beliz y otro de Cavallo,
ante los cuales deberá exhibir su documento.
Los fiscales
llamarán desde el locutorio al centro de atención y allí verificarán
que la persona no haya votado y que no sea afiliado a algún partido de la
Alianza.
El siguiente
paso consistirá en que al votante Fulano le dirán que entre a la cabina
número X. Allí levantará el teléfono y escuchará: �Si usted quiere
votar a Domingo Cavallo, marque uno; si usted quiere votar a Gustavo
Beliz, marque dos�.
Como es
lógico, el votante marcará uno o dos y después escuchará: �Gracias
por participar en la interna abierta del Encuentro por la Ciudad�.
Salida de la
cabina del locutorio y fin del proceso.
Como se verá, es una metodología fácil para el titular de la línea,
pero más bien complicada para todos los demás integrantes de la familia
o los que no tienen teléfono. Además, está bastante alejada de las
tradiciones electorales del país: no hay escuelas ni mesas ni padrones en
papel. Deberá verse si la gente se siente cómoda votando en un
locutorio.
Los dirigentes del Encuentro de la Ciudad aseguran que no habrá problemas
para el control del escrutinio, algo que será casi instantáneo, ya que
cada voto electrónico queda registrado en una computadora central, con un
sistema cerrado, que sólo se abrirá al final de la jornada del sábado
11. Al atardecer �posiblemente el cierre sea a las 20-. bastarán unos
minutos para saber el resultado.
�Todo esto no es lo ideal, pero no había otra posibilidad. La fórmula
tiene que estar elegida dentro de 10 días, porque el 17 es el último
plazo legal. Esperamos que voten unos 70.000 ciudadanos�, le dijo a este
diario uno de los dirigentes del nuevo frente.
Dos interrogantes
¿Cavallo uno, Beliz cero? A priori, las condiciones en las que se
hará la interna en el Encuentro por la Ciudad favorecen al ex
ministro de Economía. El complejo método de llamadas telefónicas y
locutorios hace más difícil el voto de las capas más pobres de la
población y por consiguiente de buena parte del aparato peronista que
considera a Cavallo su enemigo principal y podría haber favorecido a
Beliz. El ex ministro de Economía, además, tiene mayor arraigo en
los barrios de mayor poder adquisitivo y por lo tanto seguramente
tiene más adherentes que Beliz entre los titulares de las líneas
telefónicas.
De todas maneras no hay que descartar que los aparatos del PJ muevan
su gente, aunque será un poco extraño verlos bajándose de micros y
remises y haciendo colas delante de un locutorio.
¿Habrá voto oculto? Con estas reglas del juego, adherentes al
radicalismo y al Frepaso .-no afiliados a los partidos-. tal vez se
tienten y decidan jugar en la interna, votando en contra del candidato
que menos les gusta. Si son titulares de la línea, no necesitan
exponerse: no tienen que ir a una escuela ni entrar al cuarto oscuro.
Desde su casa, prácticamente en el anonimato, pueden perjudicar a un
candidato con su voto. Sería la irrupción de los llaneros
solitarios. |
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