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De la Rúa partió por la mañana
en el Tango 02 junto a Raúl Alfonsín, el canciller Adalberto Rodríguez
Giavarini, el presidente provisional del Senado, José Genoud, y el
diputado Marcelo Stubrin. Apenas llegó a Santiago, De la Rúa se reunió
con el alcalde de la ciudad, Jaime Ravinet. Una vez que finalizó la reunión,
el Presidente participó de un almuerzo organizado por la Cámara
Argentino-Chilena de Comercio. Allí, De la Rúa expresó su deseo de que
Chile se integre plenamente al Mercosur. "El crecimiento y desarrollo
de Chile es beneficioso para la Argentina; y el crecimiento y desarrollo
de la Argentina es beneficioso para Chile. La relación está en su
momento más alto", señaló.
"Como presidente pro
tempore del Mercosur los invito a que avancemos en esta dirección",
dijo De la Rúa que, no obstante, reconoció que "hace falta un mayor
equilibrio macroeconómico entre los distintos países y que aún queda un
largo camino por recorrer". Lo escuchaban, además de unos 500
empresarios, el futuro ministro del Interior de Chile, Miguel Insulza, la
futura canciller, Soledad Alvear, y el embajador argentino en ese país,
Daniel Olmos.
En sintonía con su discurso
integracionista, De la Rúa reveló además que dio instrucciones a los
legisladores de la Alianza para que aprueben lo antes posible el Tratado
Minero con Chile, ya que "esto le dará un gran impulso a la minería
de ambos países". El Presidente finalizó su discurro con una
apelación para que la Argentina y Chile "salgan juntas a explorar la
posibilidad de acceder a los nuevos mercados", lo que generó
aplausos entre los empresarios.
Al igual que Bolivia, Chile es
un "miembro asociado" al Mercosur. La categoría se explica por
Luego de un breve paseo por las
calles de Santiago junto a su mujer, Inés Pertiné, De la Rúa se trasladó
al Palacio de La Moneda, en donde el presidente Eduardo Frei saludó a las
delegaciones extranjeras. Allí, De la Rúa se reunió brevemente con
Cardoso. Fue el segundo encuentro entre los dos presidentes, que ya se habían
entrevistado en Brasilia para buscar alternativas que permitan revitalizar
el Mercosur luego de la conflictiva situación creada por la decisión de
Brasil de devaluar su moneda.
Según informó el canciller,
durante el encuentro los dos presidentes aseguraron que "relanzarán"
el Mercosur y acordaron que seguirán trabajando con el propósito de
acelerar el ingreso de Chile como miembro pleno. "Fue una reunión
cordial y amistosa", dijo Rodríguez Giavarini. Y explicó que De la
Rúa y Cardoso acordaron seguir avanzando para establecer un mecanismo de
resolución de controversias en el marco del Mercosur. Durante la reunión
se volvió a plantear la posibilidad de establecer consulados conjuntos
entre los dos países y se propuso realizar la primera experiencia de este
mecanismo en Shanghai, China. Ambos presidentes coincidieron además en la
idea de crear, en el marco del Mercosur, un acuerdo "con el espíritu
del tratado de Maastricht" de la Unión Europea. Hoy a las 11.30 el presidente argentino participará de la ceremonia de asunción de Lagos, al que De la Rúa definió como "una gran figura" y "un amigo personal". Una vez que finalice el acto, De la Rúa tiene prevista una serie de actividades: una entrevista con el candidato presidencial de México, Vicente Fox Quedada, otra con el jefe de Estado de Nueva Zelanda, Helen Clark, y un encuentro con la colonia de residentes argentinos. El domingo se reunirá a solas con Lagos en el Palacio de La Moneda, desde donde se dirigirá luego hasta el aeropuerto internacional de Santiago. Allí, De la Rúa se subirá al avión para volver a Buenos Aires junto a su comitiva y a una persona más, que tiene previsto llegar hoy a Santiago para la ceremonia de asunción: el ex presidente Carlos Menem.
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la decisión del gobierno chileno de demorar la integración plena ante la
posibilidad de unirse a los Estados Unidos en otro acuerdo global, el
NAFTA. Sin embargo, las dificultades de Bill Clinton para extender el
NAFTA impulsaron a Chile a modificar su posición. El año pasado, el
canciller chileno, Juan Gabriel Valdés, adelantó que su país quería
integrarse totalmente al Mercosur. La integración de Chile y de Bolivia
fue impulsada especialmente por la Argentina, ya que permitiría acceder a
una puerta de salida de los productos hacia los mercados del Pacífico.
Además, en caso de que se concrete el acuerdo, todos los países limítrofes
con la Argentina quedarían integrados al Mercosur.