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El presidente, Ibarra y Chacho mantuvieron una postura única: la victoria de Domingo Cavallo no les impedirá una amplia victoria. |
Por Santiago Rodríguez  Nada ha cambiado. Esa fue la imagen que la Alianza en pleno se esforzó en dar ayer frente al triunfo de Domingo Cavallo en su interna con Gustavo Beliz para dirimir la candidatura a la Jefatura de Gobierno porteña. Desde el presidente Fernando de la Rúa, quien dijo estar �seguro� de que la coalición ganará, hasta el propio postulante aliancista, Aníbal Ibarra, quien afirmó que le resultaba �indistinto� enfrentar a cualquiera de los dos ex ministros menemistas, todos sintonizaron el mismo discurso.�Estoy seguro de que Ibarra y Felgueras ganan ampliamente, pero no quiero entrar en la elección de la Ciudad de Buenos Aires�, afirmó De la Rúa. La única referencia concreta a Cavallo y Beliz que realizó el Presidente fue para felicitarlos y desearles �que puedan desenvolver con amplitud su campaña� y de lo que sí habló fue del sistema de votación telefónica al que ambos recurrieron para saldar su interna: lo calificó como �curioso� y manifestó que desea �conocerlo un poco más porque es extraño, no hay identificación del votante�. El vicepresidente Carlos �Chacho� Alvarez no tuvo empacho en meterse en la campaña porteña y arremetió contra Cavallo. �Es �destacó� el responsable de profundizar las desigualdades sociales y económicas entre los argentinos.� Y tampoco se privó de hablar acerca de la votación telemática utilizada por los ex ministros menemistas, sobre la cual apuntó que �no es para emocionarse ni para despreciar� y remarcó que �sólo sirve para los porteños�. Ibarra se mostró indiferente ante la novedad de tener que enfrentar a Cavallo el próximo 7 de mayo, pero no dejó pasar la oportunidad de hacer campaña contra quien será su principal adversario. �No conoce los temas de la ciudad. No lo digo despectivamente, lo digo como dato de la realidad�, señaló el aliancista, tras recordar que el propio Cavallo �ha reconocido que no los conoce�. Ibarra expuso también que el ex ministro de Economía llegó �a esta ciudad unos días antes de las elecciones de octubre del año pasado, cuando vio que no tenía perspectivas�, pero advirtió que a los asuntos porteños �no se lo aprende en dos o tres meses�, sino que es necesario estar mucho en la ciudad y con la gente. Otro de los dardos lanzados por Ibarra fue en respuesta a la afirmación de Cavallo de que Carlos Menem, Alberto Kohan y Carlos Corach votarían la fórmula aliancista. �Es tan poco serio como poco creíble. Quien compartió un gabinete con ellos fue Cavallo, no Aníbal Ibarra.� El aliancista también puso en duda la vocación de su contrincante para llevar a la práctica su promocionada propuesta de rebaja de impuestos y recordó: �Cuando era ministro de Economía quería subir los impuestos en la ciudad, hasta se peleó con (Carlos) Grosso por eso. Decía que pagaba más por su departamento en Córdoba que por el que tenía en esta capital. Dice eso porque ahora es candidato y está a dos meses de las elecciones�. Ibarra salió a cruzar con dureza a Cavallo, aunque en su entorno adelantaron a Página/12 que la idea es no entrar en el terreno de las polémicas que plantee su adversario. �Cavallo pretende que se discuta lo que él quiere. Es un mesiánico que dice cualquier cosa y se lo cree, pero los problemas de la ciudad son otros y no los que él aspira a discutir�, explicó uno de los conductores de la campaña aliancista, convencido de que el ex ministro tratará de �nacionalizar� la campaña. Cavallo comenzó a reclamar ayer mismo un debate con Ibarra. En el comando aliancista aseguraron que �por supuesto, debatiremos�, aunque aclararon que �el debate se realizará en el momento oportuno�.
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