Por Julio Nudler
 Aduciendo que no piensa comprarles a países que utilizan �mano de obra esclava�, en referencia a los bajos salarios (¿entrará la Argentina en esa categoría?), y vienen �a competir con las empresas nacionales con productos de menor calidad�, Carlos Ruckauf decidió ayer adquirir por decreto jeringas y otros elementos descartables de uso médico para el Estado bonaerense a una empresa argentina que había perdido la licitación para la provisión de esos insumos frente a una de origen taiwanés, y que por esa razón estaba a punto �decía� de radicarse en Brasil. Las bases legales de la medida anunciada son más que endebles, sobre todo considerando las propias palabras del gobernador, quien anticipó que en los próximos días enviará a la Legislatura platense un proyecto de Compre Argentino, implícito reconocimiento de que la decisión �de obvio objetivo político� de anular la licitación no se apoya en una ley actual y podría dar lugar a reclamos judiciales de los vencedores.
Los industriales locales recibieron con sentimientos ambiguos el gesto de Ruckauf porque, según al menos algunos de ellos, los regímenes de Compre Argentino (ley 5340, de 1963) y de Contrate Nacional (ley 18.875, de 1971) están vigentes, aunque sean ignorados. Es más: la provincia de Buenos Aires, como todas las demás salvo San Luis, adhirió a ellos, haciéndolos suyos. Por tanto, o no hace falta enviar ningún proyecto de ley, o se lo envía para replantear el régimen a nivel provincial. Por otro lado, los dueños de la empresa que obtendrá un contrato que daba por perdido, Instruequipos SA, tampoco están del todo felices. Según se quejaron ante un parlamentario, ni Ruckauf ni ningún funcionario bonaerense se avino a hablar con ellos, y han tenido que enterarse de las novedades por los diarios.
El gobernador invocó ayer la necesidad de proteger la industria y la mano de obra locales, orientando el poder de compra del Estado. En este sentido, el sector público bonaerense dará un margen de preferencia a las firmas internas (no está aún del todo claro si de ámbito nacional o sólo provincial). Esto implicaría que podrán cotizar un 5 por ciento más caro que los oferentes foráneos, margen que se estirará a un 10 por ciento cuando además cumplan con las normas IRAM (que establecen una serie de parámetros de calidad y comparabilidad).
Notablemente, ni el Compre Argentino ni el Contrate Nacional contemplaban márgenes de preferencia. Sin embargo, esto no hacía más blando el régimen porque establecía que los precios a comparar (entre las ofertas locales y las externas) eran los de contado. Excluía por tanto las condiciones de financiamiento como una variable a considerar, cuando la realidad indica que los proveedores argentinos suelen quedar absolutamente descolocados por la pobre financiación que están en condiciones de ofrecer. Además, se exigía que la cotización de los oferentes extranjeros incluyera todos los costos aduaneros e impositivos.
El Compre y el Contrate fueron suspendidos en 1989 por decisión del entonces flamante gobierno de Carlos Menem, que consiguió el dictado de la ley de Emergencia Económica para darles luz verde a las privatizaciones. El artículo 23 de esa ley abría un paréntesis indefinido en aquellos regímenes, para evitar que los futuros prestadores privados de los servicios públicos se vieran obligados a aplicarlos. Un argumento clave de quienes sostienen la vigencia de esas normas es que la ley que las suspendió, al ser de emergencia, no puede regir indefinidamente, como ocurre con las leyes normales, que se mantienen en vigor mientras otra no las derogue. Las emergencias, dicen, no pueden durar más de uno o dos años, y en este caso ya han pasado más de diez. En cuanto a la preferencia, la 23.697 preveía dársela a las pyme, beneficio que a su vez desapareció cuando Domingo Cavallo impulsó la desregulación.
Para mal o para bien, Ruckauf firmó ayer en la Casa de Gobierno platense, junto al ministro provincial de la Producción, Federico Scarabino, el decreto que consagra a Instruequipos como vencedor en lapuja. Lo hizo declarando ante los periodistas que �es una atribución del Ejecutivo provincial resolver a quién le compra�, aunque se indicó que la operación se encuadra dentro de la ley provincial de Contabilidad, 7764/71. El importe total de esta partida de jeringas supera apenas los 400 mil pesos, pero carga con una fuerte dosis política por la intensa discusión entablada en torno de los costos económicos y sociales de la apertura irrestricta.
En ciertos aspectos parece un sueño imposible volver a algunos criterios que rigieron el uso de los recursos públicos. El Contrate Nacional, de los tiempos de Aldo Ferrer en Economía, no distinguía sólo a los proveedores por su localización sino también por la composición de su capital. Así, para la contratación de servicios �proyectos de ingeniería, por ejemplo� se exigía mayoría nacional. El control de la empresa debía estar en manos de argentinos residentes en el país.
| Fallo que deja sin tela
El Tribunal Arbitral del Mercosur falló contra la protección que Argentina estableció para cinco productos de la industria textil brasileña. En julio del año pasado la aplicación de salvaguardas dio un respiro a los productores locales y pareció poner fin al conflicto del sector, afectado tras la devaluación del real. La decisión del tribunal arbitral, el mecanismo legal que la Unión Aduanera estableció para la resolución de los conflictos, era una medida esperada y ya conocida por el Gobierno desde el pasado viernes. Alejandro Sampayo, presidente de la Federación de la Industria Textil, se quejó del árbitro de partes del país dentro del tribunal, �el que no parecía representar a la Argentina�. Ahora la industria �se encuentra en una situación de absoluta indefensión frente a una legislación mal hecha�, afirmó. Pero lo que traerá peores repercusiones para el sector textil no será sólo la caída de la protección con Brasil, sino que, de aceptarla, haría caer los derechos del país ante las demás naciones del mundo, entre ellas China y Pakistán, a las cuales se les aplicó el Acuerdo de Textiles y Vestimenta. |
| Giavarini, ganador
El canciller Adalberto Rodríguez Giavarini derrochó optimismo y declaró que Argentina ocupa dentro del Mercosur �una posición de liderazgo�. Además, las controversias comerciales con Brasil no afectan las relaciones bilaterales, las que, de acuerdo a la perspectiva del diplomático, son �muy superiores a las que existían hace tres meses y cualitativamente diferentes�. Aunque reconoció que restan divergencias en el plano económico, el funcionario dijo que el �Mercosur político está consolidado y tenemos que avanzar rápidamente para consolidar y crear nuevas instituciones� que permitan superar las diferencias pendientes. El canciller viajará mañana a San Pablo, donde se reunirá con empresarios brasileños. Consultado por las perspectivas de la relación con Brasil, Rodríguez Giavarini describió �la sensación de que hay como una melancolía por el lado argentino, estamos hablando del país al cual más le exportamos, con el cual tenemos superávit comercial�, se entusiasmó. �Lejos de ser una agenda triste, la nuestra es una agenda ganadora�, concluyó. |
PROTESTA POR EL NUEVO REGIMEN AUTOMOTOR DEL MERCOSUR
�Cerraron o se fueron 80 empresas�
Empresarios y trabajadores metalúrgicos marcharán juntos para protestar por los términos del nuevo régimen automotor que negocian Argentina y Brasil. La movilización a la Secretaría de Industria se producirá el próximo miércoles, cuando funcionarios de ambos países se encontrarán para avanzar en esa discusión. Será la segunda vez que industriales y operarios del sector coincidirán en un acto de protesta. El 22 de julio del año pasado hicieron el mismo recorrido al organismo oficial cuando su titular era Alieto Guadagni. Se quejan de que la política automotriz seguida hasta el momento provocó en el �99 el cierre o éxodo a Brasil de 80 empresas autopartistas. Y apuntan que las pautas del nuevo convenio mantiene las condiciones desfavorables para la producción nacional.
�Roque Fernández nos dijo que no importaba la devaluación de Brasil porque poco a poco el real se iría revalorizando. Ahora Machinea nos vuelve a decir lo mismo. El resultado es que mientras tanto cierran empresas, se pierden miles de puestos de trabajo y no se toman medidas en favor de la industria local�, enfatizó Francisco Gutiérrez, dirigente de la Unión Obrera Metalúrgica. Juan Carlos Lascurain, presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos, añadió que la medida de fuerza se tomará luego de que resultaran infructuosas sus gestiones para entrevistarse con el presidente de la Nación, Fernando de la Rúa, el ministro de Economía, José Luis Machinea, y la secretaria de Industria, Débora Giorgi.
El régimen automotriz que negocian los principales socios del Mercosur establecería que el arancel para la importación de piezas de extrazona sea de sólo el 2 por ciento, como en la actualidad. También se fijaría que los vehículos estén integrados con un 30 por ciento de autopartes fabricadas localmente. Los empresarios y los trabajadores metalúrgicos reclaman que el arancel se ubique por lo menos en el 18 por ciento y que los componentes nacionales alcance al 50 por ciento.
�Para los vehículos importados el arancel se elevará del 20 al 35 por ciento. Pero las autopartes quedan absolutamente desprotegidas, con un arancel de apenas 2 por ciento�, se quejó Lascurain, quien comentó los resultados de un informe elaborado por la entidad que preside. Allí se revela que entre 1992 y 1998 el déficit comercial por la importación de autopartes fue de 11.800 millones de dólares, sobre un desequilibrio total de 19 mil millones en el intercambio comercial argentino.
�La mayoría de las partes importadas han venido de Europa. Esto ha tenido un impacto devastador en tradicionales productores nacionales de ruedas, piezas estampadas, limpiaparabrisas, motores y motores de arranque, que han sido reemplazados por importaciones masivas favorecidas por las excepciones al pago de aranceles que el régimen otorga a las terminales automotrices�, concluyó Lascurain.
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