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una semana de haber estrenado su cargo en La Moneda, el aún flamante
presidente socialista Ricardo Lagos dio la primera señal de luz verde a
los tribunales que llevan adelante las querellas en contra de Pinochet, al
hacer pública su voluntad de modificar el proyecto del Estatuto para ex
presidentes, gracias al cual los ex mandatarios que renuncien a asumir
como senadores vitalicios podrían mantener sus honorarios y, lo más
importante, sus fueros. El anuncio corrió a cargo del nuevo ministro del
Interior José Miguel Insulza, quien aclaró que Lagos realizaría los
cambios al proyecto que actualmente está en el Senado sólo si se lo
piden los parlamentarios. Sin relación de causa y efecto en el medio,
pero con una coincidencia casi milimétrica, tantas �tensiones�
provocaron el desmayo de la mujer del ex dictador, Lucía Hiriart, en la
apartada residencia familiar de descanso en Bucalemu.El futuro del Estatuto será uno de los principales temas de discusión del encuentro entre Lagos y los presidentes de los partidos que forman la Concertación, básicamente porque se trata de un proyecto que surgió por iniciativa de un grupo de senadores de la alianza gobernante, además de otros opositores, y que ya fue aprobado por ambas cámaras del Congreso. El presidente �no va a tomar iniciativa sobre esto porque es un tema en el cual los parlamentarios se embarcaron y lo hicieron por casi unanimidad�, aclaró Insulza. Sin embargo, el apuro del Ejecutivo por tratar el tema tiene un límite temporal inminente: el próximo 25 de marzo debería ser ratificado por el Parlamento, pero el socialismo y el Partido por la Democracia ya adelantaron que no darán su respaldo al proyecto porque no están dispuestos a reconocer a Pinochet como ex presidente. De todos modos, lo que está en juego es la posibilidad de que el ex dictador aproveche ese Estatuto �o más precisamente la protección legal que otorgaría� para resguardarse de las 75 querellas que existen en su contra y que, si no fuera porque goza de fueros parlamentarios, podrían abrir una decena de juicios en su contra. Esa posibilidad no estuvo muy alejada de las negociaciones para lograr el regreso de Pinochet a Chile mientras estaba detenido en Londres, sobre todo si se tiene en cuenta que una de las �condiciones� era que el ex dictador se retirara de la vida política. Por otra parte, aunque el ministro Insulza aclaró que �esos señores tienen fuero y se desafueran por la Corte de Apelaciones�, los críticos aseguran que el proyecto no establece claramente cómo podría ser desaforado un ex presidente, por lo que las posibilidades para que el juez Juan Guzmán Tapia tenga alguna chance con Pinochet quedarían prácticamente enterradas. Otra decisión del gobierno, también relacionada con Pinochet, fue dar de baja el recurso chileno ante la Corte Internacional de La Haya para resolver el conflicto jurisdiccional con Madrid desatado por la detención del ex dictador a pedido del juez español Baltasar Garzón. �Se ha sentado un peligroso precedente�, advirtió el presidente de la derechista Renovación Nacional, Alberto Cardemil, que no fue el único que se quejó del trato que recibe su Tata. �Querellas hay muchas, pero vamos a ver cuántas son reales. Es muy fácil inventar querellas�, se quejó el empresario Hernán Briones, miembro de la Fundación Pinochet que ayer reunió a 600 personas en una misa para agradecer �a Dios y la Virgen santísima� el regreso a Chile de su otoñal patriarca.
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