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La denuncia fue presentada ante
la Unidad Funcional de Instrucción a cargo de Alejandro Collantes, en el
Departamento Judicial de San Isidro, por un policía que pidió ser
testigo bajo reserva de identidad. En la causa se dio intervención al
Juzgado de Garantías Nº 3, a cargo de Marcela De Langhe. El denunciante
tiene más de diez años de servicio y puso como testigos al titular del
comando, el comisario Alejandro Blanco, y a una docena de policías que
escucharon cuando él, de viva voz, hizo público su malestar por el
manejo que hace el encargado de la Oficina de Personal.
Otro agente, cuando escuchó lo
que contaba el suboficial de identidad reservada, dijo ante los mismos
testigos que a él le había ocurrido lo mismo. Para corroborar los
dichos, el fiscal Collazo citó a prestar declaración a treinta miembros
del Comando de Patrullas de Vicente López, unidad que ya había sido
denunciada por Fernando Maroto, juez de la Sala I de la Cámara de
Apelaciones y Garantías en lo Criminal de San Isidro, en octubre del año
pasado, por la sospechosa actuación de un patrullero que aparentemente
encubrió el accionar de una banda de ladrones. Más
allá del doméstico pedido de coima, el oficial denunciado tendrá que
responder por una estafa que parece estar muy extendida dentro de la Policía
Bonaerense. El testigo de identidad reservada sostuvo en su denuncia que
"hay personal que tendría que estar en el servicio (dentro del
Comando), pero que en ese momento hace (custodias) adicionales" en
entidades privadas, cobrando un dinero extra. La plata que ingresa por esa
vía, que sería importante, se la llevarían los jefes. El denunciante
dijo que él "desconoce quién se lleva el dinero" obtenido,
pero suministró los nombres de suboficiales que conocen de cerca las
maniobras.
Consultado por Página/12, el juez Maroto aclaró que nunca recibió respuesta
sobre la irregularidad que involucraría a los ocupantes de un patrullero
del Comando de Vicente López que en lugar de perseguir a unos
delincuentes que intentaban robar un auto, frente al domicilio del
magistrado, se limitaron a dejarlos escapar. Sobre la denuncia contra el
encargado de personal del Comando de Patrullas de Vicente López, Maroto
dijo que "desde hace mucho tiempo se sabe que los suboficiales sufren
abusos de parte de sus superiores jerárquicos".
El juez consideró que
"las maniobras en relación con las horas extra por la realización
de servicios adicionales no es tampoco un tema nuevo dentro de la Policía
Bonaerense y es algo que debería ser investigado a fondo". La semana
pasada, en San Martín, fueron detenidos 13 integrantes de la delegación
local de la Policía Científica, acusados de estafar a la provincia
mediante el cobro de servicios adicionales realizados en forma irregular.
En esa causa está prófuga la suboficial Laura Oviedo, quien, según el
fiscal que investiga la causa, trabajaba en la secretaría privada del
ministro de Seguridad, Aldo Rico, aunque el ex carapintada lo negó.
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