Por David Cufré
Desde Santa Rosa, La Pampa
�A
nosotros plan quinquenal nos suena bien�, ironizó el gobernador de La
Pampa, el justicialista Rubén Marín, en el acto de presentación del
programa de obras públicas conjunto de la Nación y las provincias para
el próximo lustro. Se trata de la iniciativa más ambiciosa del
Ministerio de Infraestructura, que rescata la histórica denominación que
el gobierno de Juan Domingo Perón les dio a sus programas de gobierno, y
de allí el beneplácito y la chicana de Marín. La coincidencia de
nombres no parece casual, teniendo en cuenta que Fernando de la Rúa lo
promocionará como su gran obra de gobierno. El plan abarca 2600 proyectos
en todo el país, por un total de 24 mil millones de pesos. Esto es un 40
por ciento más de lo que se invirtió en infraestructura pública en los
últimos cinco años.
El ministro de Infraestructura, Nicolás Gallo, presentó aquí a sus
pares provinciales la propuesta del gobierno nacional sobre los proyectos
a encarar. En quince días, las provincias deberán entregar una versión
definitiva, que introducirá apenas algunas correcciones menores a la
iniciativa original. Aunque la coincidencia sobre los objetivos del plan
es casi total, la diferencia que anticipa una dura puja entre la Nación y
las provincias es el mecanismo que se utilizará para financiarlo. Estas
últimas sugieren obtener recursos a partir del impuesto a los
combustibles.
El plan contempla tres áreas de acción.
Viviendas: se
construirán 469 mil casas populares en todo el territorio.
Transporte:
habrá reparación y construcción de rutas por más de 30 mil
kilómetros, incluidos el tramo de la autopista que pasará por Puerto
Madero, la pavimentación de la ruta 40 �que recorre toda la zona oeste,
desde Jujuy a Tierra del Fuego� y la conclusión de las autopistas
Buenos Aires-La Plata, Rosario-Córdoba y del corredor Rosario-Victoria.
También se tenderán tres corredores bioceánicos, con rutas que van a
Brasil y Chile, y dos líneas férreas de carga en la Patagonia.
Recursos
hídricos: el tercer eje de las obras se refiere al aprovechamiento de
recursos hídricos y el armado de infraestructura para evitar
inundaciones. En el primer caso, la iniciativa más grande �y también
más resistida por grupos ecologistas� es la elevación de la cota de
Yacyretá para incrementar su capacidad de producción en un 60 por
ciento.
�Es la primera vez en mucho tiempo que se diseña un plan de estas
características. Es el comienzo de un proceso de planificación de obras
públicas, que debe contar con mecanismos de financiamiento sólidos y
bien diseñados para asegurar la ejecución de los proyectos a largo plazo�,
subrayó Gallo. Los ministros de Obras Públicas provinciales resaltaron
la tarea del gobierno nacional. En especial, la vocación por definir
pautas claras y ordenadas de construcción de obras, con recursos
distribuidos equitativamente entre todos los distritos. También
coincidieron con Gallo, en un mensaje por elevación al FMI y a
economistas ortodoxos, que no basta con asegurar la solvencia de las
cuentas públicas para aumentar la competitividad de la economía. �Si
no mejoramos la infraestructura, producimos menos y es más difícil pagar
la deuda�, le dijo a este diario el titular de la cartera de Obras
Públicas de Formosa, Fernando de Vido.
Pero los representantes justicialistas fueron más allá en su intención
de llevar a la práctica ese discurso. Plantearon que para asegurar la
realización de los proyectos hasta su finalización, y evitar que las
mismas obras sean anunciadas una y otra vez porque nunca se concretan
�como ocurrió durante la gestión menemista� resulta crucial definir
mecanismos de financiamiento suficientes. En rigor, es lo mismo que
conceptualmente sostuvo Gallo, pero hubo una diferencia. Losjusticialistas
reclamaron la creación de fondos con asignación específica para el
conjunto de las iniciativas. Su propuesta fue que el precio de los
combustibles quede fijado en su nivel actual. Si baja, la diferencia
debería destinarse al financiamiento de las obras, por lo que el
consumidor seguiría pagando lo mismo que hasta ahora.
�El financiamiento propuesto por el Gobierno es absolutamente
insuficiente�, aseguró en diálogo con Página/12 el ministro
bonaerense, Julián Domínguez. �Tenemos que jugar una carta fuerte o
resignarnos a administrar la escasez�, añadió su par salteño, Oscar
Aguirre, al insistir con la demanda de los fondos con asignación
específica. Gallo, en cambio, sostuvo que los montos asignados y la
fuente para obtener esos recursos aseguran la realización de las obras.
Para encontrar un punto de acuerdo, la Nación y las provincias
resolvieron crear una comisión mixta que deberá estudiar el tema. Esa
comisión tendrá que evaluar cómo y a través de qué vías se financian
los proyectos. De ese modo, ambas partes zanjaron por ahora el único
punto que los distancia.
Sin embargo, los ministros provinciales se mostraron decididos a pujar por
los fondos con asignación específica. La propuesta alternativa de Gallo
fue que el aumento de recaudación que se produciría en los próximos
años por el incremento de consumo de los combustibles sea destinado, en
un 80 por ciento, a financiar los planes de infraestructura. Las obras
previstas son todas en las que tienen participación directa la Nación y
las provincias, mientras que las que vayan a realizar en exclusividad los
distritos del interior serán financiadas con sus propios recursos.
Pulseada por el peaje
La deuda de la Nación a los concesionarios de rutas
nacionales es la mitad de lo que reclaman las empresas. Esa es la
conclusión a la que arribó esta semana una comisión especial del
Ministerio de Infraestructura, creada por Nicolás Gallo para
responder a las demandas de los contratistas. La estimación oficial
es que la deuda supera apenas los 100 millones de pesos, contra los
211 millones que exigen las compañías. A partir de esa definición,
el Gobierno considera que se encuentra en mejor posición para
negociar con las concesionarias. Para tener más elementos de
presión, Gallo dispuso que la revisión de deudas que hizo su cartera
sea auditada por la Sigen. Una vez que el organismo oficial presente
su informe, Gallo convocará a las empresas para iniciar una nueva
ronda de discusiones. La disputa comenzó hacia el último año de
gestión del gobierno menemista. Las empresas propusieron que, para
saldar la deuda contraída por el Estado, al no pagar los subsidios,
se les extendiera el plazo de concesión, que vence en 2003. Gallo
admite que la deuda existe, pero sostiene que las empresas aplicaron
mecanismos de indexación totalmente erróneos. Según dijo a este
diario un estrecho colaborador del ministro, �las empresas querían
hacer un negocio financiero�. |
Principales iniciativas
El plan de obras públicas diseñado por el
Gobierno, que pondrá en marcha junto con las provincias, abarca
proyectos de viviendas, transporte y recursos hídricos. Las
principales iniciativas, de las 2600 que integran el programa, son
las siguientes:
469 mil
viviendas populares a 9 mil pesos. Las primeras dos mil se
inaugurarán en Santiago del Estero durante abril. El comprador
deberá pagar cuotas mensuales de 25 pesos.
Autopistas
Buenos Aires-La Plata, Rosario-Córdoba, la ribereña en el área
metropolitana (Puerto Madero) y corredor vial Rosario-Victoria.
Pavimentación
del 40 por ciento de la ruta 40, que corre desde Jujuy a Tierra del
Fuego. Reparación de rutas 3 y 81.
Pavimentación
y construcción de nuevas rutas por más de 30 mil kilómetros.
Ferrocarril
trasandino del sur, de Zapala (Neuquén) al límite con Chile.
Ferrocarril
transpatagónico, en el tramo San Antonio Oeste-Puerto Madryn.
Hidrovía para
la navegación en los ríos Paraná y Paraguay.
Obras de
defensa y encauzamiento de aguas en el río Bermejo, para evitar
inundaciones en Salta.
Elevación de
la cota de Yacyretá y obras complementarias para aumentar en 60 por
ciento la capacidad de producción de la represa.
Construcción
de desagües cloacales y provisión de agua potable en diversas
localidades bonaerenses. |
Infraestructura negocio el plan con Economia
Las cuentas seguirán en orden
Por D.C.
Desde Santa Rosa, La Pampa
Antes de lanzar
oficialmente el plan quinquenal de obras públicas, el ministro de
Infraestructura, Nicolás Gallo, lo negoció políticamente con su par de
Economía, José Luis Machinea. Le aseguró que la realización de las obras
no ocasionará un desequilibrio de las cuentas públicas, dado que se
buscarán distintas fuentes de financiamiento. Una de ellas será el
lanzamiento de un bono por 450 millones de pesos, por el cual ya anticiparon
su interés las AFJP. Ese será el monto de la primera emisión de este
año, pero le sucederían otras.
�Es el plan para cubrir las necesidades básicas insatisfechas en materia
de infraestructura�, definió Gallo en diálogo con Página/12. Ese fue el
otro argumento que le presentó a Machinea. Le dijo, además, que el
programa ayudará a mejorar la imagen pública del Gobierno, que hasta ahora
se ha mostrado esencialmente preocupado en contener el déficit fiscal.
A pesar de la aceptación de Machinea, Gallo impulsa que el programa de
obras quede ratificado por el Congreso y las legislaturas provinciales. La
intención evidente del titular de Infraestructura es asegurar que los
fondos estarán disponibles para completar las obras.
La redacción del proyecto comenzará dentro de quince días, cuando los
gobiernos provinciales entreguen a la cartera de Infraestructura sus
correcciones al plan quinquenal (ver nota central). El programa es por 24
mil millones de pesos, de los cuales 5500 millones se utilizarán para
finalizar obras iniciadas por el gobierno anterior. La inversión prevista
para el quinquenio, por áreas, es la siguiente:
Transporte vial: 9500
millones de pesos.
Viviendas y desarrollo
urbano: 5200 millones.
Recursos hídricos:
3400 millones.
Transporte
ferroviario: 1780 millones.
Agua potable y
desagües cloacales: 1375 millones.
Hidrovía: 690
millones.
Transporte aéreo: 665
millones.
Riego: 655 millones.
Control de
inundaciones: 540 millones.
El futuro de Aerolíneas
El plan de salvataje de Aerolíneas Argentinas que
deberá presentar su controlante, Iberia, llegará a manos de
Nicolás Gallo a fines de abril. Según trascendió, la compañía
española propondrá capitalizar Aerolíneas en 200 millones de
dólares, de los cuales 10 millones deberán ser integrados por el
Estado argentino. De ser así, el gobierno aceptará la propuesta.
Por otra parte, James Cheek, ex embajador de Estados Unidos y actual
representante de American Airlines, se reunió anteayer con Gallo
para explicarle por qué la empresa estadounidense se retiró de la
conducción de Aerolíneas. Le dijo que la línea de bandera �está
en un estado muy difícil de revertir�. Para no complicar aún
más su situación, el Gobierno mantendrá una postura contraria a
acordar una política de cielos abiertos con Estados Unidos. En su
lugar, avanzará con convenios de desregulación del transporte
aéreo con los socios del Mercosur. La postura del Ministerio de
Infraestructura es que liberalizar el tráfico comercial con Estados
Unidos sería negocio para este último país, pero resultaría
totalmente perjudicial para las compañías argentinas, que en este
momento no están en condiciones de competir de igual a igual con
las grandes empresas norteamericanas. |
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