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 Aunque
en las últimas dos semanas las imprudencias de Aldo Rico los habían
separado, un acto en conmemoración del 18º aniversario de la
recuperación transitoria de las Islas Malvinas volvió a reunir ayer al
presidente Fernando de la Rúa y al gobernador Carlos Ruckauf. El jefe de
Estado y el mandatario bonaerense consideraron el tema como una �cuestión
de Estado�. Por su parte, Carlos Menem tuvo un acto propio en Escobar,
armado por el intendente Luis Patti, y lo utilizó para volver a hablar de
su proyecto para el 2003. Mientras que Izquierda Unida quemó retratos de
la ex primera ministra británica Margaret Thatcher y banderas inglesas y
norteamericanas en la Plaza San Martín.Después del escándalo con el que Aldo Rico pretendió salpicar la figura presidencial, De la Rúa y Ruckauf volvieron a verse en un acto realizado ayer en el partido de La Matanza. A la ceremonia también concurrieron el intendente local, Alberto Balestrini, y los jefes del Ejército, teniente general Ricardo Brinzoni, y de la Armada, Joaquín Stella. Ambos se mostraron cordiales y hasta tomaron agua del mismo vaso. Según De la Rúa, el patriotismo común �debe ser una acción de conjunto para la recuperación de la soberanía en nuestras islas, donde yacen sepultados los cuerpos de tantos jóvenes argentinos. Hoy (por ayer) venimos a decirles que como se hace en la corteza de un árbol, cada vez es más profundo en el corazón de los argentinos el respeto y el afecto a quienes se jugaron por la patria en las islas todavía irredentas�, destacó el Presidente. Sobre la situación de los ex combatientes, De la Rúa subrayó que �cuando fuimos percibiendo las circunstancias adversas del conflicto, las noticias de los �pozos de zorros� y los pies congelados (de los soldados) o de la falta de elementos, acompañamos con profundo dolor a los que estaban combatiendo por nuestra soberanía�. �Y nos dolió después profundamente el silencio, la indiferencia o el disimulo a su regreso�, por eso el jefe de Estado expresó: �Quiero saludar aquí a aquellos jóvenes; a todos los oficiales, suboficiales y soldados, a los que dejaron su vida en las islas o en el mar, a los que sufrieron heridas, a los que simplemente lucharon y volvieron�. Ruckauf coincidió en la mayoría de los puntos con De la Rúa, al señalar que �hay una sola política exterior en la Argentina y hay un solo conjunto de argentinos que trabajamos frente al mundo; no importa de qué partido provengamos, todos vamos a respetar la institución presidencial y el comando de la República, como lo marcó el pueblo�. Ruckauf relató que durante su reciente visita a Estados Unidos �voces ansiosas me preguntaban si en la Argentina había diferencias o riesgos por los colores políticos de los que gobernamos y les decía y reitero aquí que no lo hay�. Según el gobernador bonaerense en el tema Malvinas �también tiene que ver, porque a aquí no hay diferencias, todos queremos que nuestro territorio esté íntegro y todos queremos que se haga en paz, no queremos aventuras que hagan que nuestros hijos rieguen con sangre nuestra propia tierra�. Sobre la forma en que debe conducirse la relación con Gran Bretaña para recuperar Malvinas, Ruckauf puso como ejemplo a Hong Kong: �Queremos cambiar del peso de la historia. Parecía imposible que China recuperara Hong Kong de las manos británicas, pero lo hizo, porque es una protagonista central de la historia del mundo�. Por su parte, la coalición Izquierda Unida (IU) realizó un acto ante el Monumento a los soldados caídos en Malvinas y quemó retratos de la ex primera ministra británica Margaret Thatcher y banderas inglesas y norteamericanas. Luego de colocar una ofrenda floral al pie del monumento, en la Plaza San Martín, Vilma Ripoll, candidata a legisladora por IU señaló que �este acto es en defensa de la soberanía argentina sobre las islas Malvinas contra la política de rapiña del imperialismo inglés�.
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