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En la batalla por torcer las pobres expectativas sobre la evolución del nivel de actividad, la plana mayor del equipo económico echó mano ayer a un arsenal de datos positivos. Poco importó la relevancia de los indicadores. Lo trascendente para la conducción del Palacio de Hacienda fue difundir todo lo que tuviera a mano que respondiera a su pronóstico esperanzador. Desde el aumento en la venta de automóviles en marzo, hasta el incremento de exportaciones de Siderar a Brasil, pasando por una nueva estimación de mayor crecimiento económico en el primer trimestre y una rebaja en el precio del gasoil. Lo esencial para José Luis Machinea y sus escuderos fue demostrar que pasaron a la ofensiva. La apuesta consiste en imponer la percepción de que la economía dejó atrás la recesión y comienza una fase expansiva. El único hecho que desentonó en esa estrategia fue el anticipo de la secretaria de Industria, Débora Giorgi, respecto de que aumentaría la tasa de desocupación en la medición de mayo. Rápidamente, otros funcionarios salieron a desmentirla. A Fernando de la Rúa le preocupa la demora en la aparición de señales contundentes de reactivación. Por eso, ordenó a Machinea redoblar esfuerzos en la tarea de cambiar las expectativas a un mes de las elecciones en la Capital. En la reunión de Gabinete económico de ayer por la mañana, el ministro trasladó a sus colaboradores la instrucción de comunicar públicamente los datos que reflejan una mejoría. Antes, Giorgi había afectado ese plan, al señalar en declaraciones radiales que �lamentablemente los primeros pronósticos que tenemos indican algún leve aumento de la desocupación�. La funcionaria aclaró que eso ocurría porque �estamos comparando con octubre del �99, cuando había más de 100 mil empleos del Plan Trabajar que se dieron por las elecciones�, mientras que ahora ese programa se redujo a 45 mil puestos de trabajo. De inmediato, el jefe del gabinete de asesores de Machinea, Pablo Gerchunoff, salió a contradecirla. Afirmó que �el desempleo puede bajar levemente en mayo, y descenderá fuertemente en el resto del año�. Y el secretario de Programación Económica, Miguel Bein, agregó que el empleo privado �se está recuperando y creciendo�, y que �la posibilidad de que la desocupación baje en mayo es importante�. Una vez superada la desprolijidad del cruce, los funcionarios de Economía se abocaron a trabajar por el shock de confianza. Les ayudó que la cámara de fabricantes de autos difundió los datos de marzo. La venta de vehículos al mercado interno creció 11,8 por ciento respecto de igual mes del año pasado y 13,5 en comparación con febrero. La producción aumentó 62,6 puntos contra marzo y acumula una suba de 60,6 en el trimestre. Y las exportaciones avanzaron 69,4 por ciento en relación con febrero y mejoraron 17,5 en el trimestre. Con esos resultados, Bein se entusiasmó y dijo que �esto es una bomba atómica�, e irónicamente preguntó: �¿No es que Adefa pronosticaba que iba a vender 10 por ciento menos que el año pasado?�. Por la noche, luego de las múltiples declaraciones de Machinea, Bein y Gerchunoff, Economía difundió una planilla con un resumen de indicadores económicos. Los datos aportados allí y los que dieron los funcionarios son los siguientes: �Nuestra estimación es que el PBI crecerá en el primer trimestre entre 2,0 y 2,5 por ciento, pero después de ver el desempeño de la fabricación de autos, me atrevería a decir que va a ser de 2,5 a 3,0 por ciento�, dijo Bein. Las ventas de supermercados (en volumen) crecieron 2,7 por ciento. El riesgo país, medido por el bono FRB, bajó 3,2 por ciento en marzo respecto de igual mes del año pasado. �Estoy dispuesto a afirmar que de aquí a fin del año que viene los precios de las telecomunicaciones van a caer no menos de 40 por ciento�, dijo Machinea. Las exportaciones crecieron 14,2 por ciento en el primer bimestre y el déficit comercial bajó a 204 millones, contra 650 millones del año pasado. La valorización del peso respecto del real es del 18,7 por ciento, contra el 48,7 de febrero del �99.
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