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LA PARODIA DE LA GUERRILLA ENTRERRIANA
Un estrellato muy efímero 

La Justicia tiene prácticamente probado que el comandante Carlos es, en realidad, José Lima, quien suele autodenominarse como subcomandante �Chelo�. Los seudoguerrilleros fueron repudiados por lucrar con la distribución de planes Trabajar.

Noemí Rivero, la gorda �Pato�, fue detenida ayer.
El monte de entrenamiento resultó ser un terreno baldío.

Por Laura Vales y Raúl Kollmann

t.gif (862 bytes) El juez federal de Concepción del Uruguay, Juan José Papetti, tiene prácticamente probado que José �Chelo� Lima fue quien se disfrazó de subcomandante Carlos y que su fieles escuderos Carlos Sánchez y Noemí Rivero, la gorda �Pato�, son los otros que aparecieron en el tragicómico show mediático que transmitieron Crónica TV y Radio 10 desde Concordia. Se comprobó también que no hubo �entrenamientos en los montes entrerrianos� sino algunas tomas en un terreno baldío a 20 cuadras del centro. El magistrado ordenó una serie de allanamientos en los que se encontraron las ropas que usó la gorda Pato en la filmación, pero todavía no aparecieron las armas usadas en la parodia. Hoy, Papetti debe decidir si les concede la excarcelación a los detenidos. Ambos fueron acusados por casi todo el arco político de Concordia de lucrar con los planes Trabajar y la desesperante situación que existe en la ciudad. 
Ayer, en Concordia no hubo ningún corte de ruta en repudio a las detenciones, como habían anunciado algunos seguidores de Lima. En realidad, las organizaciones de desocupados fueron convocadas a participar a acciones de protesta pero se negaron a sumarse al juego. Todos estaban pendientes, en cambio, de una promesa oficial sobre el envío a la ciudad de 500 planes Trabajar. 
Así las cosas, Ramón, el hermano de José Lima, decidió encadenarse frente al despacho del intendente de Concordia para decirles a los medios que los detenidos no tuvieron nada que ver con un show televisivo. Noemí Rivero �la gorda Pato� también fue al edificio de la municipalidad para reclamar por sus compañeros, pero terminó siendo detenida y trasladada a Concepción del Uruguay, donde hoy será interrogada por el juez Papetti. 
El magistrado tenía el miércoles algo de dudas sobre si los guerrilleros truchos eran realmente Lima, Sánchez y Rivero. Pero las primeras pericias de voz de la Gendarmería indican que se trata de ellos, y el reloj que llevaba en la entrevista el comandante Carlos resultó ser idéntico al que después se vio en la muñeca de José Lima. El hallazgo de las prendas que habría usado Rivero en la filmación terminó de comprometer la situación de los acusados. 
Los encapuchados hicieron su aparición estelar el miércoles a la mañana en una emisión de Crónica TV y Radio 10 en la que se presentaron como guerrilleros que habían decidido pasar a la lucha armada. �Vuelve la década del �70 aunque a algunos los asuste�, anunció uno de ellos, que se presentó como el �comandante Carlos� y aseguró haberse capacitado en México y Colombia. El Gobierno los identificó como Lima y Sánchez, y la Gendarmería presentó una denuncia por la que fueron detenidos. 
Ambos fueron interrogados ayer durante más de cuatro horas y su defensor oficial presentó pedidos de excarcelación que serán resueltos esta mañana. Lima y Sánchez tienen ya cuatro procesos abiertos por cortes de ruta; en esta causa están en cambio imputados por apología del crimen y atentado al orden constitucional y la vida democrática, delitos para los que se prevén penas de 5 a 15 años.
Si todo avanza de acuerdo con lo previsto, esta mañana será interrogada Noemí Rivero y luego deberán declarar siete empleados de Crónica TV. Fuentes cercanas a la investigación dijeron que existe un especial interés en determinar qué papel tuvo el canal en el armado de todo el episodio. Por eso también fue citado el periodista de Concordia Luis Bertoni, uno de los que advirtió que, la noche previa a la aparición de los guerrilleros truchos, hubo una reunión en un hotel entre la gente de Crónica y Lima. 
Los periodistas de Concordia, mientras tanto, avanzaron en otro tipo de comprobaciones: el supuesto monte de entrenamiento del �Comando Sabino Navarro� que apareció en las imágenes es en realidad una zona baldía del Parque Rivadavia, ubicado a unas 20 cuadras de la municipalidad y muycerca de la mansión del senador Augusto Alasino. Y las ruinas que se veían como trasfondo son las de El Naranjal de Pereda, una histórica residencia abandonada que está a pocos metros de la sede de la Escuela de Caballería.


�Gente que extorsiona�

El ministro del Interior, Federico Storani, y los principales dirigentes políticos de Entre Ríos coincidieron ayer en que la aparición del �Comando Sabino Navarro� fue una noticia armada y acusaron a José Lima y Carlos Sánchez de lucrar con los planes de asistencia a los desocupados. Estas fueron algunas de las declaraciones que se escucharon: 
  �Estamos investigando si detrás de esto hay alguien que ayudó a que se produjera�, dijo Storani. �Esta es gente que vive de la extorsión y que logró montar un show con la complicidad de algunos medios de comunicación.�
  �José Lima aparece trabajando en el Concejo Deliberante local, aunque nunca trabajó realmente. Hace unos meses me dijo personalmente que recibían planes Trabajar de 200 pesos y se quedaban con la mitad. Son personas que cuentan con respaldo directo o indirecto de sectores políticos�, aseguró el gobernador Sergio Montiel.
  �Fue una noticia trucha�, sostuvo el intendente de Concordia Hernán Orduna. �José �Chelo� Lima es un empleado público que se dedica a la extorsión política y ha lucrado con los desocupados. Lima medró como intermediario, consiguiendo y repartiendo cupos de emergencia laboral y quedándose con parte del dinero destinado a los que no tienen trabajo.�
  �Fue un montaje lastimoso, una puesta en escena lamentable y bochornosa�, agregó el cura de Concordia Andrés Servín, conocido por su trabajo con los desocupados. �Acá la situación social es muy dura y por eso todo cobra una gravedad especial. Si el canal vino engañado, con una simple mirada se podía haber dado cuenta de que al lado de un regimiento y a 20 cuadras del centro de la ciudad nadie puede hacer una cosa así.�

 

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