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El máximo órgano de la
central obrera facultó además al consejo directivo a "decretar un
paro nacional en defensa del empleo, el salario y las condiciones de vida
de los trabajadores" en la fecha y con la modalidad que estime
conveniente. "Reitero lo que dije en el confederal, no nos va a
temblar el pulso cuando tengamos que tomar esa medida", sostuvo
Moyano.
La convocatoria --la segunda de
este tipo que el gobierno de Fernando de la Rúa deberá afrontar contra
la reforma laboral-- fue dispuesta por unanimidad durante la reunión del
comité central confederal de los rebeldes, que deliberó en la sede de la
Unión Obrera de la Construcción (UOCRA). Ese día, "cada organización
va a disponer la hora del cese de actividades para permitir la participación
de los trabajadores en la movilización" frente al Congreso. Cuando
se le preguntó a Moyano si se instalarían "ollas populares"
frente al Parlamento, contestó: "No creo, pero posiblemente los
compañeros del interior que vayan llegando se instalen ahí en la plaza y
tendrán que comer".
El confederal se pronunció
también contra "los ajustes económicos en las provincias dispuestos
por el Fondo Monetario Internacional y el Gobierno" y contra "la
disminución de los planes (oficiales) Trabajar y su manipulación
clientelística y extorsiva por parte del Gobierno hacia los gobernadores
provinciales y los senadores de la Nación". Dispuso además realizar
el próximo 28 de abril, en Mar del Plata, una asamblea nacional por el 1º
de mayo, Día Internacional del Trabajo. Por otra parte, el sector informó
que impulsa la designación de Juan Carlos Schmidt (Dragado)
y José Azcurra (Farmacia) como directores en el PAMI, en reemplazo
de Reynaldo Hermoso (Químicos) y Domingo Petrecca (Cementerios).
La protesta que realizarán los rebeldes frente al Congreso será
similar a la que convocaron en la Plaza de Mayo, el pasado 24 de febrero.
El proyecto flexibilizador del Gobierno generó una nueva fractura en el
sindicalismo peronista, entre disidentes y dialoguistas. Mientras los
liderados por Moyano rechazan frontalmente la ley de reforma laboral, los
"dialoguistas" --con Rodolfo Daer a la cabeza-- intentan
conseguir que el Senado introduzca modificaciones al proyecto que ya fue
aprobado por la Cámara de Diputados.
Moyano aprovechó la ocasión
para criticar al ministro del Interior, Federico Storani, al expresar que
"la semana pasada dijo que yo no tenía responsabilidad para conducir
al movimiento obrero. Le digo a este señor que mis manifestaciones no le
costaron la vida a ningún argentino. Sin embargo, a las 48 horas de haber
asumido él, se produjeron dos muertes", recordó, haciendo mención
a la represión de la Gendarmería para desalojar el puente General
Belgrano, antes de la intervención federal a Corrientes.
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