  Gran victoria de Instituto que, de haber tenido un poco más de serenidad y aptitud definidora sobre el final, pudo ser un poquito más holgada. Así, los de Juan José López ratifican su capacidad para enfrentar con buenos resultados a los grandes: batieron antes a Racing e Independiente. Ahora esperan, el domingo, a Boca. San Lorenzo estuvo muy por debajo de lo mejor que puede y completó una semana �más allá de la tragedia de Mirko Saric� absolutamente negativa: perdió tres partidos en seis días, quedó fuera de la Copa Libertadores y se alejó de la punta que lo tenía como único poseedor hace dos fechas.
El primer tiempo se caracterizó por el control recíproco y las pocas llegadas. Pero en el arranque nomás hubo una jugada que pudo haber cambiado el trámite de todo el partido. Angel Sánchez anuló un gol de Ariel López por offside, cuando todo pareció indicar que el delantero, cuando salió el remate al arco del que él usufructuó el rebote en Klimowicz, estaba bien habilitado. Muy poco más podría aproximarse el equipo de Ruggeri a lo largo del período. Apenas algo más �un cabezazo de Mauro Amato (de lo mejor), y un remate de Marczuk� pudo arrimar el equipo de Juan José López. El Miliki Jiménez quedó entrampado en la marca personal y poco flexible de Ortiz. Sin embargo, el complemento mostraría a los cordobeses más decididos mientras San Lorenzo, que ya había perdido a Michelini, desgarrado, en el primer tiempo, quedaba librado al trabajo solitario pero empeñoso de Romagnoli, a veces bien acompañado por Estévez pero con poca respuesta en Ariel López. Además, los locales predominaron decididamente en el medio gracias al andar de Rimoldi y a la movilidad, echándose atrás y mostrándose, de Mauro Amato. Y sería una pared entre estos dos la que posibilitaría la apertura del marcador en buena jugada. Ruggeri contestó con el ingreso de Moreno buscando más fútbol pero no pudo. Más allá de una gran habilitación de Romagnoli que Klimowicz le tapó en mano a mano a Erviti, no dispuso de opciones. Instituto sí: Amato le dio al travesaño en la mejor jugada colectiva de la noche y al final no supieron, varias veces, dar la estocada final. Igual le alcanzó.
BUENA VICTORIA DE LOCAL CON GOLES DE FORLAN Y GALVAN
Fue el regreso de los Rojos vivos
Independiente insinuó una gran recuperación al ganarle 2-0 a Gimnasia en Avellaneda, pero sobre todo porque exhibió momentos de muy buen fútbol durante gran parte del juego. Para el equipo platense fue la segunda caída seguida, lo que se agrava por la floja labor individual y colectiva que mostró a lo largo del partido.
De arranque nomás Independiente trató de dejar en el olvido las tres derrotas consecutivas que traía. Por eso salió a presionar bien arriba con sus volantes y ahogar en la salida misma de Gimnasia. Con esa actitud complicó al conjunto visitante y justificó plenamente la ventaja que consiguió con un notable anticipo de Forlán luego de un centro de Bruno Marioni. Pero, lejos de conformarse con la diferencia, Independiente continuó con su insistencia y creó no menos de seis situaciones de gol, una razón más que suficiente para justificar la victoria y para dejar la sensación de que la ventaja era exigua. Un zurdazo de Marioni y un derechazo de Forlán, ambos rebotados en el palo izquierdo de Hernando, pudieron marcar una diferencia más acorde con lo que ocurrió en el campo. Gimnasia apenas inquietó con un remate bajo de Messera que controló sin problemas Mondragón.
Muy poco cambió en la segunda parte. Los locales continuaron manejando el ritmo según su conveniencia y el equipo de Gregorio Pérez siguió mostrando una imagen poco convincente. Para colmo, cuando Gimnasia empezaba a esbozar una pequeña reacción, llegó el segundo gol de Independiente que liquidó el partido. Luego de un rechazo corto de Cufré, Galván remató con categoría por encima de Hernando. La pelota rebotó en el travesaño, pegó en el arquero y se metió. De ahí en más, el Rojo contó con varias ocasiones para golear, pero sus delanteros fallaron en la definición.
GOLEADA Y BUEN FUTBOL EN FERRO
Newell�s ya es algo serio
Muy buen triunfo de Newell�s, que de este modo se coloca bien arriba, ya como potencial candidato, pegado a Boca y River, que tienen partidos pendientes. Mérito pleno del equipo de Andrés Rebottaro, que sale a jugar con el mismo esquema en todo terreno.
Anoche fue un ejemplo más de convicción: antes de promediar la primera etapa, ya ganaba 3-0 a través de conquistas alcanzadas por su defensores. Los cabezazos de Fuentes y Crosa, ante centros de Manso y Quintana, y el disparo de afuera de París. En ese lapso Argentinos no existió, absolutamente desbordado en el fondo y con Insúa sin rumbo en el medio: Cejas fue une espectador.
En el segundo, Argentinos salió más decidido y pudo descontar, mientras los de Rebottaro se echaban atrás para contragolpear. Y así fue que consiguieron llegar otra vez al gol sobre el final por intermedio de Gigena, recién ingresado por Real.
|
