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 El Gobierno en bloque �con De la Rúa a la cabeza� salió a respaldar la permanencia de Graciela Fernández Meijide en el Ministerio de Desarrollo Social tras el escándalo desatado en el PAMI, donde su cuñado y ex interventor, Angel Tonietto, debió renunciar tras ser denunciado por beneficiar a una clínica de su esposa, es decir la hermana de Graciela. �La ministra tiene mi total confianza�, sostuvo el Presidente. �En términos políticos, el episodio está concluido�, agregó Carlos �Chacho� Alvarez. �De la Rúa siempre ratificó mi trabajo�, completó la propia Fernández Meijide. Desde la Oficina Anticorrupción, el fiscal José Massoni le acercó otro motivo de alivio al aclarar que el tema no la compromete. Pero dejó claro que en el caso de Tonietto �hubo conflicto de intereses�. Y aunque el contenido de esa investigación se guarda bajo siete llaves, todo indica que la situación del ex interventor es cada vez más comprometida. Dos funcionarias de la obra social ratificaron ante los fiscales anticorrupción que fueron presionadas para recategorizar el hogar terapéutico de su mujer. Hoy debe declarar José Amorín, el ex subinterventor de Prestaciones Sociales señalado como responsable de esas presiones. Según confiaron a Página/12 allegados a Amorín, el ex funcionario dirá que Tonietto no le exigió que intercediera en favor de la clínica Florida II, pero sí le preguntó qué estaba pasando con el trámite para recategorizarla cuando se enteró de que no había alcanzado el puntaje requerido. Hasta ahora, Tonietto adujo en su defensa que todo el trámite fue normal y que nunca movió un dedo en favor del centro del que es socia su mujer, Juana Castagnola. Incluso juró que si los cointerventores Cecilia Felgueras y Horacio Rodríguez Larreta desconocían que su esposa tenía ese hogar terapéutico fue justamente porque no quería sacar ninguna ventaja de su situación de poder dentro del PAMI. El argumento será difícil de sostener si se comprueba que efectivamente siguió de cerca la evolución del expediente interno que mejoró los ingresos de la clínica, al punto de deslizar sus inquietudes al responsable de la evaluación ante un primer dictamen adverso. Una de las funcionarias del PAMI que declaró ante la Oficina Anticorrupción es Patricia Halfón, quien como subgerente de discapacidad dijo haber recibido una orden de José Amorín, por entonces subinterventor de Prestaciones Sociales, para que volviera a evaluar la clínica de la esposa de Tonietto, a la que el puntaje no le había alcanzado para ser recategorizada. �La mujer le está rompiendo las pelotas�, le escucharon decir entonces a Amorín. Lo que siguió fue una feroz pelea entre Amorín y Halfón, quien terminó pidiendo su traslado. Después, el centro fue recategorizado, con lo que incrementó su facturación en un 25 por ciento. Tonietto reconoció que el cambio de categoría significó un aumento de ingresos mensuales cercano a los 5 mil pesos. La de ayer fue la primera declaración pública de De la Rúa sobre el tema. �La ministra tiene mi total confianza porque su función es otra y, además, es completamente ajena al episodio�, sostuvo a la mañana, al ingresar a la Casa de Gobierno. Consciente del costo político que el tema tiene para el Gobierno, el Presidente buscó también ponerle un corte definitivo a la cuestión, remarcando especialmente que Fernández Meijide �por encima de la relación familiar (que la une a Tonietto) actuó con toda claridad y energía, y éste es el mérito que debe señalarse a la sociedad�. Además de la investigación de la Oficina Anticorrupción, los expedientes sobre la recategorización están siendo estudiados por la Sindicatura General de la Nación, y el propio Tonietto se autodenunció ante la Justicia Federal para que se revise toda su gestión en el PAMI. Aunque ayer Massoni se negó a ratificarlo, fuentes de la Oficina aseguraron que existen elementos para elevar la correspondiente denuncia penal.
LA IGLESIA PIDIO MAS AYUDA PARA LOS INUNDADOS Por Washington Uranga
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