OPINION ¿El diario de Yrigoyen? Por
Eduardo Aliverti |
Resulta
que, con esa crueldad típica del humor corrosivo de los porteños, se
está diciendo en algunos lares que a De la Rúa le hacen el diario de
Yrigoyen.
Cuenta la leyenda que allá por el �30, al borde de su caída, le
mostraban al líder radical una publicación que sólo contenía
buenas noticias, reales o inventadas. Nada de eso ocurre hoy, claro,
pero es la forma de aludir a las reuniones de gabinete y a las
declaraciones de algunos ministros. En particular, el de Economía. En
medio del aumento al doble de despidos y suspensiones, con todas las
cuentas del fisco en rojo y un índice de desocupación oficial que se
estima en alrededor del 15 por ciento, José Luis Machinea insiste en
que ya se sale de la recesión. Y ante a la advertencia
supermercadista sobre caída de ingresos responde que es por la baja
de los precios, como si ésta no tuviera nada que ver con la pérdida
de capacidad adquisitiva de los sectores populares. Así sigue de
corrido frente a cada crítica o señalamiento y, encima, el único
anuncio de medidas es un plan para aumentar exportaciones: yerba,
azúcar, ajo y arroz, básicamente. Es decir, la afirmación de un
perfil productivo por el que Argentina sigue vendiendo materias primas
agropecuarias e importando valor agregado.
No sería justo que este presunto descanso sobre las nubes fuese
achacado con exclusividad al oficialismo. Si de inopia se trata,
también es bueno verlo a Beliz haciendo campaña en la iglesia
evangelista del pastor Carnival; al conjunto del PJ sumergido en una
orgía de acusaciones internas, y a buena parte de la izquierda groggy
metida en discutir sobre sionismo internacional en una campaña para
elegir representantes municipales.
¿Están realmente en las nubes? ¿O más bien es cuestión del
espacio que los dueños de la economía le dejaron a la dirigencia
política �es decir, cero� y ésta no tiene otro camino que caer
en el ridículo? ¿De la Rúa & Cía. �leen� el diario de
Yrigoyen o están bien despiertos en tanto este programa expresa su
pensamiento conservador? ¿Los peronistas están en las nubes o no
tienen nada que hacer ni decir precisamente porque hay la continuidad
del menemismo? ¿Cierta izquierda divaga por deporte o porque carece
de vocación de crecimiento?
En esos términos, dejados por la economía a la política con la
anuencia de ésta, es oportuno preguntar a fondo por el significado de
�democracia�. Y advertir que en vez de siesta hay ojos bien
abiertos. |
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