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Por Victoria Ginzberg  El
Archivo General de la Nación remitió a la Subsecretaría de Derechos
Humanos miles de carpetas con denuncias hechas ante los ministerios del
Interior y de Justicia entre 1973 y 1983. Estos documentos se suman a
legajos de inteligencia hallados esta semana en una bóveda del ex Banco
Nacional de Desarrollo (Banade). Ambos descubrimientos reconfirman la
existencia de material sobre la represión ilegal en reparticiones del
Estado.De la enorme cantidad de carpetas entregadas por la intervención del Archivo General de la Nación a cargo de María Graciela Bercoff, la Subsecretaría de Derechos Humanos pudo ordenar hasta ahora las correspondientes a los años 1973 al �75. Entre estos legajos hay varias denuncias por persecución o detenciones arbitrarias de organizaciones gremiales y estudiantiles. La interventora del archivo adelantó que entre los documentos de la época de la dictadura existen reclamos de familiares en los que se detallan los operativos de secuestro. El 23 de diciembre de 1975 Amnistía Internacional inició un expediente para pedir informes sobre ciudadanos chilenos arrestados en Cipolletti. Las carpetas revisadas hasta ahora por funcionarios de la subsecretaría revelan que casi todos los trámites eran archivados sin hacer investigaciones. �El valor de este material es que pueden completar lo que existe en la Conadep�, aseguró Dolly Scaccheri, directora del archivo. Como los ministerios de Justicia y del Interior eran de los primeros lugares donde los familiares de desaparecidos se dirigían para denunciar los secuestros, los funcionarios de la subsecretaría esperan encontrar información que luego no fue revelada ante los miembros de la Conadep. La Subsecretaría de Derechos Humanos pondrá estas carpetas y la documentación hallada en el Ministerio del Interior a estudio de una comisión de especialistas formada para garantizar el derecho a la verdad. Pero ayer por la tarde los encargados de procesar estos documentos aún no habían tenido acceso a éstos. La Cámara Federal porteña envió a la Subsecretaría de Asuntos Institucionales y Relaciones con la Comunidad del Ministerio del Interior un pedido de inventario sobre el material y recordó que existen dos resoluciones para resguardar todo papel relacionado con la represión ilegal. �Lo que se encontró es importante para cruzar datos y poder realizar la reconstrucción histórica. No sabemos si hay cosas nuevas pero de cualquier manera es importante tener la posibilidad de documentar los hechos porque esto avala los relatos de los que siempre escribimos la historia de una manera y dijimos que hubo un plan sistemático de persecución desde el Estado�, declaró la subsecretaria de Derechos Humanos, Diana Conti. Los papeles hallados en la bóveda del Banade son documentos secretos e informes de inteligencia de la dictadura y también de los gobiernos constitucionales. Según informó ayer el diario La Nación, entre el material hay una carta fechada en junio de 1979 en la que el coronel José Ruiz Palacios ordena a los gobernadores combatir la �campaña de desprestigio� que realizaban organismos de derechos humanos. En los archivos de los gobiernos de Raúl Alfonsín y Carlos Menem, hay un expediente relacionado con el tratamiento que los medios dieron al escándalo desatado cuando Menem recibió una Ferrari de regalo. Estos descubrimientos se suman a las fichas de seguimiento a los estudiantes encontradas en la Universidad de Periodismo de La Plata y al tupido archivo de la Policía de la Provincia de Buenos Aires revelado el año pasado. Y al hallazgo, este año, de material sobre la represión en Rosario y de cientos de libros de la policía de la ciudad de Santa Fe recuperados en las investigaciones judiciales para conocer lo sucedido con los desaparecidos. TUMBAS NN EN EL
CEMENTERIO DE LOMAS DE ZAMORA Por V.G.
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De
los libros del lugar surge que, por ejemplo, el 24 de diciembre de 1976
fueron enterrados nueve NN de sexo masculino que habrían sido recogidos
en Larroque y Camino Negro, a cinco cuadras del centro clandestino Pozo de
Banfield. En otra sección, se encontraron siete cadáveres que figuran
como fallecidos el 18 de febrero de 1977. Todos estos datos hacen suponer
que los restos son de personas desaparecidas.