Por Sergio Moreno y Santiago Rodríguez
 Sus colaboradores están relajados, contentos, cansados y casi felices. En sus alrededores se respira un aire de triunfo. Pero Aníbal Ibarra sigue tenso. Sonríe, pero sigue tenso. �Todavía no ganamos. Todavía hay que hacer fuerza para evitar el ballottage�, dice. El fotógrafo tiene órdenes de retratar su trasero, para chequear, si es que gana, si en cuatro años de gobierno lo engordó. �No lo voy a engordar �dice� porque voy a estar siempre en la calle. pero, además, no se olviden de que siempre hago deportes.�
�Usted dice en su último spot de campaña que no va a engordar su trasero. ¿Quiénes son los políticos que engordan su trasero?
�Lo bueno de estos mensajes es que cada uno pone allí lo que pretende ver. Algunos verán que es tal o cual político.
�¿Y usted a quién se imagina?
�Prefiero que la gente ponga dentro de ese trasero al que quiera.
�La semana pasada el Gobierno realizó algunos gestos que lo acercaron a los que solía hacer el menemismo; uno de ellos fue el voto contra Cuba en Naciones Unidas. ¿Está de acuerdo con el voto argentino?
�Estoy en contra de cómo actuó el Gobierno. Con mucho respeto por la decisión presidencial, y no lo digo ahora sino que lo hice inmediatamente, hubiera buscado primero un bloque consensuado con otros países y hubiera votado como Brasil y México, con la abstención.
�Otro tema que complicó al Gobierno la semana pasada fue la represión en el Congreso. ¿Qué debe hacer el poder político para que la policía no reprima de la manera en que lo hizo?
�Nunca la aplicación de una ley puede lleva a la violación de la ley. Para terminar con esto hay que hacer un trabajo permanente y sostenido, que pasa por la formación, por claras directivas políticas, por el castigo de los que actúan mal. Por eso es importante la actitud que tomaron el Gobierno y el jefe de la Policía. No hubo un visión corporativa o defensiva, como la que estábamos acostumbrados. Esto también fortalece el proceso de transferencia de la policía porque la seguridad de los ciudadanos de Buenos Aires tiene que ser responsabilidad política del gobierno de la ciudad.
�¿A la policía hay que darle órdenes de cómo reprimir o de qué no hacer?
�Si hay que dispersar determinada situación y se tiene a alguien tirado en el piso no se le pueden pegar cinco palazos en la cabeza o tajearle la campera. Esto está claro y la policía lo sabe, no es una cuestión en la que hay un margen de duda.
�Le reformulo la pregunta: ¿una orden emanada del poder político debe tener lineamientos explícitos y marcar los límites?
�Cuando se produjo el caso de los rehenes que se rescataron y después murieron los dos delincuentes, la policía tenía una clara orden: �Señores, acá no dispara nadie, salvo el grupo de elite en caso de que encuentre un contexto para actuar�. Los delincuentes pasaban a dos metros de la policía y no hubo uno solo que no cumpliera esa clara y precisa orden. Hay circunstancias en las que se actuó de acuerdo a las precisiones y órdenes dadas. Tal vez en este caso no hubo órdenes tan precisas o, a pesar de haberlas habido, hubo algunos que no las cumplieron.
�En una situación de rehenes, ¿cómo debe actuar la policía: debe dejar ir a los delincuentes o imponer autoridad?
�No hay una fórmula, pero sí una decisión y que siempre debe estar presente antes que cualquier otra cosa: preservar la vida de los rehenes. Entonces, a esa búsqueda de preservación de vida de los rehenes hay que sumarle la frustración del intento de robo, rescatar a los rehenes y hay momentos en los que uno evalúa �éste es el momento para actuar�. Ese es un momento de decisión, a veces se actúa bien o mal, pero lo que hay que tener claro es cuáles son los objetivos.
�Desde que la Alianza asumió se sucedió una serie de hechos en el área de los derechos humanos. El Gobierno mantuvo pliegos de militares cuestionados por los organismos de derechos humanos, impulsó su aprobación y los ascendió. ¿Usted acuerda con esos ascensos?
�No estoy de acuerdo con que haya una actitud general como diciendo �pasan todos o no pasa ninguno�. En algunos casos el cuestionamiento es válido y en otros no. La actuación de la Justicia en las causas por la averiguación de la verdad debe ser absolutamente respetada. Esta no es una investigación en contra de instituciones ni significa retroceder en todo lo que hemos avanzado en la sociedad argentina. La actuación de los jueces en la averiguación de la verdad, como en el caso de los menores desaparecidos, son investigaciones judiciales dentro del marco de nuestro derecho y más allá de las opiniones tienen que respetarse a rajatabla.
�¿No cree que las Fuerzas Armadas han cobrado en estos últimos cinco meses un protagonismo que no tuvieron en los últimos diez años?
�En el caso de la delegación del Ejército que visitó a los militares presos en Córdoba, no es bueno que desde una institución se genere esta situación de apoyo político a alguien que está sometido a proceso. Pero esto me parece secundario frente a la decisión de respetar los procedimientos judiciales. Me preocuparía que se dijera que no se van a acatar las decisiones de la Justicia.
�¿Cómo imagina el Frepaso después de las elecciones?
�Estoy dentro de la Alianza y siempre digo que la suerte del Frepaso está ligada a la de la Alianza. Soy consciente de que en esta elección la máxima responsabilidad es mía, que integro el Frepaso y soy el candidato, pero mi gobierno será un gobierno de la Alianza y dentro del Frepaso seguiremos desarrollando cuadros y dirigentes siempre con una visión aliancista, que es lo que la gente votó.
�¿Cuál imagina que será su lugar dentro del Frepaso?
�El de jefe de uno de los principales distritos del país...
�O sea con una cuota importante de poder.
�No sé si medirlo en esos términos. Va a ser un lugar importante, insisto, donde los éxitos y los fracasos abarcan a la Alianza.
�¿Trataría de modificar algo de la conducta política o del funcionamiento del Frepaso?
�Me gustaría consolidar más su funcionamiento. A veces este vértigo que produce salir de una campaña y entrar en otra nos impide sentarnos entre todas las fuerzas políticas que integramos en Frepaso y, por lo tanto, la Alianza, a analizar las situaciones políticas y las estrategias.
�¿Cómo piensa repartir los cargos de la Jefatura de Gobierno?
�El término reparto no me gusta. El gobierno va a ser de la Alianza y ...
�¿Qué significa eso en términos de cargos en el gabinete?
�Será un gabinete representativo, equilibrado, pero que responda a las estrategias que uno tenga fijadas, que son las que votó la gente, y donde yo, como jefe de Gobierno, tengo la máxima responsabilidad. Mi gabinete tendrá ese equilibrio y no va a estar sometido a una cuestión de reparto de lugares como quien reparte porciones de torta.
�¿Piensa convocar a alguien de otra fuerza política que no sea del Frepaso o la UCR?
�No quiero hablar puntualmente de un gabinete. Pienso que el gobierno de la Alianza tiene que trascender sus propios límites y convocar a sectores políticos que le den mayor respaldo y amplitud, tenemos que seguir creciendo.
�¿Convocaría a Domingo Cavallo?
�No. Cavallo después del 7 de mayo tendrá que seguir ocupándose de la ciudad porque si no quedará en evidencia que esto fue un lapsus.
�¿Y a Gustavo Beliz?
�Beliz tiene para aportar a un proceso en la Ciudad de Buenos Aires; él siempre trabajó por la ciudad. Cuidado que no estoy hablando de un cargo.Beliz ha tenido ideas interesantes sobre la ciudad y no porque provengan de un adversario político hay que descalificarlas. Desde ese lugar Beliz tiene para aportar y Cavallo no, porque nunca se fijó en la ciudad y esto es casi un paso en virtud de su proyecto electoral 2003.
�¿No lo imagina en su gabinete?
�No.
�¿Convocaría a Irma Roy?
�Respeto mucho a Irma Roy personal y políticamente y a veces se tiran los ofrecimientos como chicanas. Hoy estamos compitiendo y no quiero que se interprete en ese sentido. Irma Roy sí podría llegar a ser una persona muy valiosa en la gestión.
�¿Piensa ratificar en su cargo a alguno de los actuales secretarios del gabinete porteño?
�Algunos quedarán y otros no.
�¿Tiene pensados algunos en particular?
�Tengo pensados, sí.
�¿Piensa decirnos quiénes son?
�No (se ríe).
�¿Daniel Filmus va a ser ministro de Educación?
�Acabo de decir que no quiero hablar del gabinete.
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