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IMPUTAN AL JUEZ POR EL CRIMEN DE SU HIJA
Con la mirada fija en el padre

 

 

�Hay sospechas para poder indagarlo�,
dijo el juez de la causa. Y agregó que
�si no tuviera fueros, lo detendría�.


Por Carlos Rodríguez
Desde Rufino
t.gif (862 bytes) Como dándole impulso a su pronóstico de que el caso de Natalia Fraticelli está avanzando �muy rápidamente y está cerca de una definición�, el juez Carlos Risso tiene previsto ordenar la detención de su colega Carlos Fraticelli, el padre de la víctima, a quien acusaría por el asesinato de la adolescente, por el que ya está detenida la madre, María Graciela Dieser. �Hay sospechas para poder indagarlo. Si no tuviera fueros, lo detendría�, afirmó Risso en declaraciones a la prensa. La imputación se fortaleció luego de escuchar el testimonio de los allegados a la familia, que fueron los primeros en llegar a la escena del crimen. De esas declaraciones, recogidas de boca de personas vinculadas íntimamente a la pareja, surgiría que la causa de la tragedia tendría relación con una supuesta �relación familiar perversa�. Lo que todavía estaría en duda es quién fue el autor material y quien el encubridor. 
Las novedades causaron conmoción en esta ciudad, que después del primer impacto producido por la detención de Dieser, había reflotado, casi como una esperanza, la posibilidad de que el asesinato estuviera motivado en una venganza por varias causas espinosas que estaban en manos del juez Fraticelli. Risso sostuvo que Fraticelli está �técnicamente imputado en la causa� y sólo se espera que, en la semana que comienza, el juez penal se quede sin sus fueros. 
La decisión depende de la Corte Suprema de Santa Fe que el miércoles, en su habitual reunión semanal, podría decidir una suspensión de 90 días que dejaría a Fraticelli sin fueros por ese lapso, durante el cual podrá ser investigado por la Justicia. El presidente de la Corte, Roberto Filistocco, podría incluso decidir por sí mismo el desafuero, ad referendum de lo que disponga el miércoles el alto tribunal en su conjunto. Si después de los tres meses Fraticelli sigue acusado de algún delito, deberá ser sometido a un jury de enjuiciamiento que podría poner fin a su carrera judicial. Esa decisión la tendrá que tomar el Consejo de la Magistratura de Santa Fe. 
Después de la detención de la madre de Natalia, quien fue acusada por el crimen, la sociedad de Rufino pareció dividirse en dos, entre los que la condenaban de antemano y los que salieron a defenderla. Sin embargo, con el correr de los días, la mayoría de la población aparece otra vez alineada, cerrando filas, detrás de la familia Fraticelli, poniendo en duda la posibilidad del filicidio y desempolvando la hipótesis de la venganza. �¿Por qué razón una madre puede matar a su hija? ¿Para ocultar un adulterio? Sería como apagar un incendio con nafta�, reflexionó ante Página/12 un alto funcionario del gobierno peronista local. 
La UCR del distrito, por medio de un comunicado, manifestó su �plena solidaridad� con la familia y repudió un hecho que �agravia e intimida� a la Justicia. Aunque todo indica que el juez y su esposa son los únicos que están bajo sospecha, y se descarta la hipótesis de una tercera persona involucrada, los pobladores resisten. Anoche, a la salida de la misa (ver aparte) volvieron a escucharse voces en favor del matrimonio acusado, condenando el �apresuramiento de la prensa�. 
Lo que parece no tenerse en cuenta es que las pruebas reunidas por Risso surgen del testimonio de personas allegadas a los Fraticelli. Los testigos fueron el médico Hugo Costa, el primero que llegó al lugar de los hechos, llamado por Fraticelli. También estuvo el juez comercial Víctor Pautasso y su esposa, amigos personales de la familia, el camarista de Rufino Carlos Chasco y su mujer, que mantenían el vínculo con los Fraticelli, a pesar de un molesto episodio que había terminado con la apertura de una causa judicial por amenazas. 
Otro de los testigos citados por el juez Risso fue Cristina Herrera, secretaria y presunta amante del juez Fraticelli. El mismo fue el que declaró, como consta en el expediente, que la noche del crimen estaba con ella en un conocido hotel de Rufino. Del conjunto de testimonios fue que el juez Risso sacó la conclusión referida a la �relación familiar perversa� de la que hablaban anoche fuentes judiciales. 

 

El obispo pide silencio

Por C.R.
Las de anoche deberían ser las últimas misas de Rufino en las cuales se debe leer, por orden del párroco Carlos Gonzalo, la homilía del sábado en la cual el religioso se ponía al lado de la familia Fraticelli porque todos son inocentes �hasta que la Justicia compruebe fehacientemente su delito�. El obispo de Santa Fe, Edgardo Storni, le ordenó al cura que se abstenga de tomar postura en un caso que podría tener el final escabroso que venía perfilándose desde el inicio. Los feligreses que asistieron a las misas de ayer dijeron a la salida que estaban �totalmente de acuerdo� con Gonzalo y criticaron a la prensa de Buenos Aires por �buscar el escándalo�. 

 

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