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El acto por el aniversario de
la creación del Ejército se realizó en la plaza de armas del Regimiento
de Infantería de Patricios, en el barrio de Palermo, horas antes de que
el Gobierno diera a conocer los detalles del ajuste. Al hablar frente a
los uniformados, De la Rúa se refirió al paquete económico para
pedirles "un esfuerzo patriótico" ante las "dificultades
de la hora". Pero garantizó la continuidad de las misiones de paz
que realizan las Fuerzas Armadas en el exterior.
Brinzoni, luego de concluido el
acto, manifestó su apoyo al paquete en una breve declaración a la
prensa. "Sea cual fuere la decisión del Gobierno --sostuvo-- vamos a
contribuir con nuestros esfuerzos a la economía del país y al bienestar
de la población."
En el Regimiento de Patricios
ayer se volvieron a ver algunos militares retirados --como los generales
Mario Benjamín Menéndez, ex gobernador de las Islas Malvinas durante la
guerra, y Albano Harguindeguy, ministro del Interior de la dictadura-- que
se habían mantenido alejados de los palcos oficiales durante la gestión
de Martín Balza. En rigor, ésta fue la segunda reaparición pública de
los dos generales retirados desde que Brinzoni es jefe del Ejército. El
25 del Mayo ambos ya habían compartido un chocolate patrio en el Edificio
Libertador con la cúpula de la fuerza.
En su discurso, el titular del
Ejército los saludó genéricamente como a "quienes se encuentran en
la honrosa situación de retiro". En las cinco carillas de su texto,
Brinzoni dedicó unos pocos párrafos a aludir a la actuación de los
militares durante la dictadura. Pero lo hizo colocándola en el marco de
"enfrentamientos sangrientos entre hermanos" y de una
"violencia" que "nos desbordó a todos".
"Sólo el reconocimiento
descarnado y completo del pasado llevará (a la sociedad) a la positiva
convivencia", dijo el general, quien consideró que el Ejército ha
dado pasos importantes en el camino de la reconciliación "y los
seguirá dando, decidido". Con la mínima distancia de un punto y
seguido, Brinzoni sumó a su discurso la frase del arzobispo Bergoglio
sobre la "injusticia" de un recuerdo parcial. El domingo pasado, en un reportaje publicado por Página/12, Brinzoni explicó sin ambages su opinión sobre el ejercicio de la memoria y sus límites. Dijo entonces que "los que tendrían que haber sido condenados, los que impartieron órdenes, fueron sentenciados en su momento y luego indultados". Que existen leyes, en alusión a la Obediencia Debida y el Punto Final, que "hay que respetar". Y que quiere una "reconciliación", pero los juicios por la verdad no le parecen "un mecanismo feliz".
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justicia
federal que le valió cinco días de detención. Lo hizo como invitado
de honor en el acto que, como en todo el país, se realizó en Córdoba
por la conmemoración del 190º aniversario de la creación del Ejército.
Ubicado en el palco principal junto a las actuales autoridades del
Tercer Cuerpo y funcionarios provinciales, Menéndez se mostró
agradecido con sus camaradas que lo apoyaron hace justo un mes, cuando
se negó a testimoniar en la causa por la verdad histórica y la jueza
Cristina Garzón de Lascano ordenó su arresto. En aquella
oportunidad, había sido el segundo comandante del Tercer Cuerpo,
Oscar Ferrario, quien lo visitó en la alcaidía de los tribunales
federales de Córdoba. El titular de la fuerza, Alfredo Carullo,
presidió ayer el acto y le dijo a los periodistas que "Menéndez
es un oficial retirado más, y como tal conserva, intactos, sus
derechos", como es el de asistir a las actividades oficiales del
Ejército.