Por Diego Schurman
 El Gobierno intimó a los gremios del transporte a cumplir con la prestación de servicios mínimos durante el paro del viernes. Para ello se valió de un decreto que Carlos Menem dictó en 1990 limitando el derecho de huelga que por entonces generó reacciones adversas en su partido y en la oposición. La advertencia, sin embargo, no hizo mella en la CGT. Además de anunciar que no respetará la norma, por �inconstitucional�, amenazó por boca del rebelde Hugo Moyano con batir el record de Saúl Ubaldini. Es decir, con hacer más de 13 paros generales si fuera necesario.
La intimación del Gobierno apuntó principalmente al transporte, un sector estratégico para garantizar el éxito de cualquier medida de fuerza. Pero también se extendió a otros servicios que el decreto considera esenciales: los sanitarios y hospitalarios, la producción y distribución de agua potable, energía eléctrica, gas y combustibles, las telecomunicaciones y la educación.
La disposición 65/2000 lleva la firma del titular de la Dirección Nacional de Negociación Colectiva del Ministerio de Trabajo, Eduardo Bermúdez. Y está respaldada en el decreto 2184/90 del anterior gobierno y en resoluciones que en el �97 firmó el ex ministro de Trabajo Armando Caro Figueroa.
El decreto de reglamentación del derecho de huelga se ideó para morigerar las protestas que, como sucede ahora, generó el ajuste en el sector público. Que la norma la haya redactado un peronista fue de por sí todo un símbolo. Pero no el único elegido por Menem: el texto se firmó un 17 de octubre, 45 años después de la fundación del PJ.
Hace diez años, la medida encontró duros retractores. �Es un cachetazo para los trabajadores�, dijo el entonces diputado radical y actual presidente de la Cámara baja, Rafael Pascual. �Menem recurre otra vez a un decretazo para mantener este plan económico devastador�, se sumó Dante Caputo, actual secretario de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva.
Desde el peronismo la réplica más fuerte se escuchó en aquel entonces de boca de Carlos �Chacho� Alvarez, actual vicepresidente de la Nación. �Es el acto de un gobierno típicamente autoritario.�
Los mismos integrantes, una vez formada la Alianza, dieron su guiño a los gremios para elevar una queja a la Organización Internacional del Trabajo. Este foro pidió a la Argentina que modifique su legislación, haciendo hincapié en el artículo que le da al Ministerio de Trabajo la potestad de determinar qué es un servicio esencial.
A pesar de la intimación oficial, los sindicatos que impulsan el paro del viernes ya anticiparon que ignorarán el decreto menemista. �No se va a acatar porque es inconstitucional�, adelantó al asesor legal de la CGT rebelde, Héctor Recalde.
El laboralista justificó la decisión en aspectos �abusivos y contradictorios� de la norma. �Abusivo es que se deba prestar el 100 por ciento de los vuelos internacionales, de cabotaje al sur, del transporte de combustible, cuando la OIT dictaminó que el transporte no es un servicio esencial. Contradictorio es que se consideren esenciales las prestaciones de sectores del Estado y simultáneamente se les disponga una rebaja salarial.�
Las dos CGT evaluaron a las intimaciones como un gesto de dureza del Gobierno ante la inminencia del paro. Y respondieron con el mismo tono. Tanto Moyano como Rodolfo Daer, que ayer encabezaron sus respectivos Comité Central Confederal, anunciaron que tras la huelga, si no hay cambios en el rumbo económico, habrá continuidad en el plan de lucha.
No hubo medias tintas en las frases. Desde la CGT oficial, el mercantil Armando Cavalieri pidió a la gente que el viernes �no consuma� en negocios y supermercados. Y advirtió que sin el paro �va a haber violencia en la Argentina� y que los cortes de ruta �no serán en el Norte sino en el Gran Buenos Aires�. Pero el que se mostró mas ofuscado fue Moyano. Luego dedespreciar a medio gabinete (�Alvarez es un converso�, �De la Rúa no manda�, �Lombardo no sabe nada de salud�), redobló la apuesta prometiendo, si fuera necesario, �batir el record de Saúl�, en alusión a los 13 paros que Ubaldini le realizó a Raúl Alfonsín.
| Los bancos
La actividad en los bancos oficiales se vio afectada ayer por el paro de dos horas que dispuso el gremio bancario, en el marco del plan de acción que incluye cuatro días de cese de actividades en rechazo al ajuste económico que dispuso el Gobierno en el sector público. La huelga se realizó entre las 13 y las 15, y afectó la atención al público en los Banco Nación, Central y de Intercambio y Comercio Exterior, donde la medida se cumplió con �un alto grado de acatamiento�, según señaló el gremio. En el Banco Ciudad �no incluido en el ajuste�, los empleados realizaron un paro simbólico de 15 minutos a las 10. Hoy el gremio que encabeza Juan José Zanola tiene previsto repetir el cese de actividades en las dos últimas horas de atención al público. |
LLACH SIGUE CRITICANDO A RUCKAUF POR EL NO DESCUENTO
De cómo aprovechar la oportunidad
�Eso es casi una invitación a parar�, se quejó ayer el ministro de Educación, Juan Llach, a propósito del anuncio del gobernador bonaerense Carlos Ruckauf acerca de que no descontará el día a los maestros que se plieguen a la huelga general del próximo viernes. �Mi amigo Llach no se tiene que poner nervioso porque sabe que tanto a él, como al Presidente (Fernando de la Rúa), lo estamos ayudando�, retrucó el mandatario provincial.
Desde que las dos CGT y la CTA convocaron al paro, Llach realiza al menos una exhortación por día a los maestros para que no se sumen a la huelga. Ayer volvió a hacerlo y les solicitó que �reflexionen�. Como alternativas posibles al cese de actividades propuso que �busquen otros caminos, que se haga una marcha o que se dicten clases y se explique por qué se está de acuerdo con esta medida de fuerza del viernes�.
La publicidad que Ruckauf le dio a su decisión de no descontar el día a los maestros huelguistas va a contramano del intento de Llach de convencerlos de que no paren y de ahí su disgusto con el bonaerense: �Me parece que anunciar eso tres días antes del paro es casi una invitación a parar�, protestó al ingresar a la Casa de Gobierno para participar de la habitual reunión de gabinete de los días martes.
Llach prefirió �no hacer juicios tan políticos� cuando se le preguntó si consideraba que Ruckauf se había puesto del lado de los docentes olvidando su rol de gobernante y aclaró que el bonaerense está en �su derecho� de anunciar que no descontará el día a los maestros. El mismo �derecho� que como jefe de gobierno porteño esgrimió De la Rúa frente a uno de los últimos paros de la era menemista para anunciar �como ahora hizo Ruckauf� que no le tocaría el sueldo a ningún docente que adhiriera a la protesta.
Ruckauf no le recordó aquel episodio a Llach, pero sí sacó rédito de la situación como en su momento hizo De la Rúa: aclaró que el ministro no �puede pedirme que actúe en contra de mis convicciones; en esa tarea ya fracasó el ex presidente (Carlos) Menem� y explicó que �sería injusto que a aquellos que falten por ejercer un derecho constitucional se les descuente el día�. De todos modos, sostuvo que considera que el viernes �es un día laborable� y que espera que los trabajadores docentes �cumplan con su tarea�.
Más allá del contrapunto entre Llach y Ruckauf, los docentes tienen decidido plegarse al paro. La CTERA ratificará formalmente hoy su adhesión a la huelga. �Más que nadie sabemos lo que es ajuste, porque trabajamos con los hijos de los pobres y nuevos pobres y marginados que van a padecer este ajuste, y vamos a acompañarlos como lo hicimos siempre�, señaló el secretario de prensa del gremio, Alejandro De Michelis. �Los maestros junto con el resto de los trabajadores, mostraremos una vez más que la educación es testimonio, coherencia y lucha por ideales�, afirmó el secretario general del SADOP (docentes privados), Horacio Ghilini.
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