Por Raúl Kollmann
�Tenía una fuerte depresión y palpitaciones. El médico le dio algo para que duerma, porque el golpe fue muy fuerte. Imagínese que viene de una vida cómoda y aquí está en una celda que tiene dos metros por tres, entra apenas una cama y una mesita, la valijita con la ropa la tiene que guardar debajo de la cama y, además, aquí tiene que higienizar él mismo su celda y el baño que comparte con los otros presos.� Este es el relato que un hombre de la Gendarmería le hizo anoche a Página/12 sobre las primeras horas de Víctor Alderete en prisión. Acostumbrado a los restaurantes de Puerto Madero o la Recova de Posadas, el ex titular del PAMI opta ahora entre la comida que le traen sus familiares o pagar $1.60 por una ración de lo que comen los gendarmes del Escuadrón Buenos Aires. La buena noticia es que Alderete no está incomunicado y hoy podrá recibir la visita de sus hijos, familiares y amigos en el Día del Padre.
El diminuto ex funcionario llegó tarde durante la noche del viernes y pasó a su celda prácticamente sin hablar. En el Escuadrón tiene compañía de lujo:
Carlos �El Indio� Castillo: matón ex carapintada, este antiguo socio del ahora justicialista Aldo Rico pasa sus horas en Gendarmería detenido por intento de homicidio.
Luis Eustaquio Agustín Sarlenga: el ex interventor de Fabricaciones Militares durante el gobierno de Carlos Menem está detenido y procesado por orden del juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky, quien lo encontró partícipe necesario del delito de contrabando agravado por las operaciones de venta de armas a Croacia y Ecuador. El juez Julio Speroni amplió ese procesamiento y la prisión preventiva.
Leandro Sánchez Reisse: alias �El Marqués�, ex agente de inteligencia del Batallón 601 del Ejército durante la dictadura y ex miembro de la banda de Aníbal Gordon. Está preso por disposición de la Corte Suprema, que le revocó la excarcelación por el secuestro de Fernando Combal.
Francisco Trovato: el ex juez cumple una condena ahora de cuatro años y medio (debido a que la Cámara de Casación le bajó la pena anterior, de seis años), por el delito de cohecho agravado.
Todos están allí porque en una cárcel común correrían riesgos y los jueces, por una u otra razón, resolvieron tomar las máximas precauciones.
Sus compañeros de prisión no son fáciles. Por de pronto, El Indio Castillo es un hombre de pocas pulgas. Una de las causas en su contra es porque baleó a unos jóvenes que estaban enfrente de su casa, en la puerta de un boliche y escuchando música a un volumen que consideró demasiado alto. Francisco Trovato tampoco es un compañero ideal: ha tenido momentos de enfrentamiento con otros detenidos y es conocido por los raptos de histeria.
Por los presos que hay ahora y siempre, el régimen en el Escuadrón es duro y los gendarmes no aceptan que nadie se salga del molde. El caso más conflictivo fue el de Francisco Trovato, según relata uno de los carceleros: �Hubo momentos en los que se quiso hacer el juez, quiso empezar a mandar y la pifió. No se enteró que es un preso. Cuando nos cansamos, pedimos el traslado y lo mandaron a Caseros. Ahí estuvo un día y pidió de rodillas volver. Se terminaron sus grititos y las histerias son mucho más espaciadas. Y con los otros presos es igual. O aceptan la disciplina o pedimos el traslado, entre otras cosas porque la Gendarmería no es un servicio penitenciario y no tenemos mayor interés en estar cuidando a esta gente�.
Las obligaciones que debe cumplir Alderete desde ayer no son muy complejas, pero obviamente no está acostumbrado a tales imposiciones. La celda -.que tiene una puerta de metal con mirilla� debe estar siempre limpia, lo mismo que el baño, la única ducha y el pequeño comedor que comparte el seleccionado de presos. En total son 40 metros cuadrados loque abarca el pabellón de todos los detenidos, muy lejos de los casi 200 metros de su departamento de Capital Federal, de su departamento de Punta del Este y ni hablar de su casa en Anillaco. Tampoco tendrá el panorama de las montañas riojanas ni el mismo tiempo de disfrute: el régimen de detención establece que los detenidos pueden pasar 45 minutos en el patio por la mañana y otros 45 por la tarde.
Los presos pasan la mayor parte de su tiempo de cárcel en el comedor, donde está el único televisor del pabellón. Ahí hay una mesa, en la que algunos leen y otros fijan la mirada en la pantalla. Alderete ayer se presentó un poco formalmente a los otros detenidos, pero estuvo casi permanentemente tirado en su cama producto del profundo bajón anímico que lo tiene como presa.
El control de los detenidos es riguroso. Hay gendarmes haciendo una ronda, abriendo la mirilla y custodiando incluso cuando se utiliza el baño. Aunque no lo dicen, siempre con los que llegan está la preocupación de que intenten suicidarse por el fuerte estado depresivo en el que generalmente caen en los primeros días.
Los demás presos ya están acostumbrados a las altas y bajas: en las últimas semanas han llegado y se han ido distintos detenidos. Por ejemplo, estuvo el ex integrante de la SIDE Juan Martín Siga Correa, involucrado en el asesinato del general chileno Carlos Prats, quien se fue del Escuadrón el jueves. También pasó por allí hace pocos días el detenido Alejandro Núñez, que denunció maniobras y hasta un asesinato del Servicio Penitenciario, por lo cual tuvieron que sacarlo de Caseros.
Sin dudas, la mayor distracción de los presos son las visitas. El tiempo habitualmente permitido es de media hora y también hay un control riguroso a los visitantes: se mira con detalle lo que se le deja al detenido, las mujeres son revisadas por una mujer �todo en un trámite mucho más civilizado que en una cárcel�, hay un registro escrito de quién ingresa y desde el primer día se le hace saber al familiar o amigo que las reglas son muy estrictas, de lo contrario se le suspenden las visitas.
Según comentan en la Gendarmería, Alderete está de suerte: es posible que hoy, por ser el Día del Padre, se flexibilicen mucho los horarios y las condiciones de la visita. Todo indica que, junto a sus cuatro hijos, el ex titular del PAMI podrá pasar unas horas en familia.
sobreprecios, gastos falsos, contratos truchos
Las siete causas del proceso
Víctor Alderete está acusado de ser sel jefe de una banda que barrió con los controles internos del PAMI, facilitando que se hicieran millonarios negocios con el dinero de los jubilados. Estos son los siete casos por los cuales podría ser procesado el martes, cuando el juez federal Adolfo Bagnasco termine de indagarlo:
Miniturismo: José Garbarini es un hombre de suerte. Se convirtió en gerente de Contabilidad y Finanzas del PAMI durante la gestión de Matilde Menéndez y lo despidieron en 1996, durante la intervención del falso ingeniero Alejandro Bramer Markovic. Pero tres años más tarde, con Alderete al frente, se las arregló para que su empresa IMARA S.A. se alzara con un jugoso contrato de miniturismo. Ahora la Justicia investiga si el ex titular del PAMI le pagó por servicios que en algunos casos nunca existieron y en otros consistieron en paseos por lugares gratuitos, como la Reserva Ecológica y Puerto Madero. En los listados de los que subían a los tours aparecen nombres repetidos, números de documento aparentemente truchos y personas que nunca viajaron.
Encuestas: La consultora Solavi S.A. recibió 200 mil dólares para hacer un sondeo de opinión entre los oyentes de una radio líder, a quienes se les formuló preguntas tan obvias como si estaban de acuerdo con la libre elección de médico de cabecera, si estaban de acuerdo con una ley de derechos específicos para la tercera edad y si les parecía bien que el directorio del PAMI esté compuesto exclusivamente por jubilados. Las repuestas, como era de esperar, fueron positivas en un 99 por ciento. Al mes siguiente los hombres de Alderete la volvieron a contratar, por el doble de preguntas y el doble de dinero. Los dos convenios se hicieron sin tomar en cuenta los precios de mercado �y con la sola aprobación de las oficinas del Instituto y el Directorio�.
Auditorías: Con la empresa Macropsicología el PAMI firmó un contrato por 20 mil dólares mensuales para que hiciera auditorías, que a poco de andar fue rescindido. Y fue reemplazado por un nuevo convenio con Cer.Co.Man, una empresa del mismo dueño de Macropsicología, pero por un monto seis veces mayor y el mismo objetivo.
Misterio: Advertising Image S.A. cobró 70.543 pesos para realizar una tarea indescifrable: �Un estudio semiológico sobre acciones comunicacionales, capacidades y características receptoras del mensaje del segmento de la tercera edad�. El trabajo nunca se encontró, si alguna vez alguien consiguió hacerlo.
Sobreprecios y gastos: También se acusa a Alderete y los suyos de haber devuelto indebidamente casi tres millones de dólares a la Federación de Clínicas y Sanatorios Privados de Buenos Aires (FECLIBA), de haber contratado sin necesidad a la consultora internacional Bureau Veritas Argentina S.A y de desembolsar un sobreprecio cercano a los dos millones de pesos por servicios de limpieza.
Las zonas libres de control por
las que Alderete está encarcelado
Cinco auditorías dieron cuenta de las graves falencias e irregularidades que se sucedían en un geriátrico, que fueron cajoneadas. Ahora forman parte del expediente que tiene al ex funcionario en prisión. Otros casos.
El PAMI, en épocas de Víctor Alderete, no ejercitaba su rol de control sobre las prestadoras. |
|
Por Laura Vales
Se hicieron cinco auditorías que dijeron lo mismo: �En el geriátrico Plaza La Rioja encontramos materia fecal en el piso y pañales sucios dejados en el pasillo. La comida que reciben los abuelos es insuficiente. Utilizan medicamentos vencidos. Faltan enfermeras y por la noche el área queda a cargo de una asistente, que en realidad es cocinera durante el día. Los pacientes que sufren de enfermedades psiquiátricas no son atendidos por especialistas sino por un médico clínico. Los depósitos donde se guardan los alimentos están sucios, deteriorados y oxidados, y la higiene de los pacientes deja mucho que desear�. Pese a los reclamos, cada uno de estos dictámenes quedó olvidado en un cajón del PAMI. El geriátrico Plaza La Rioja siguió trabajando como si nada y cobrando uno de los precios más altos del mercado: 650 pesos mensuales por cada beneficiario a cargo. Este es apenas uno de los ejemplos de la metodología que la banda encabezada por Víctor Alderete impuso en la obra social de los jubilados, arrasando con todos los mecanismos de control para favorecer a ciertos empresarios.
El contenido de esas auditorías a las que durante la era Alderete nadie prestó atención está ahora en las primeras páginas del expediente judicial que llevó al ex titular del PAMI tras las rejas. Son parte de la denuncia de la Oficina Anticorrupción en la que se desgranan decenas de casos específicos sobre la creación de �zonas prohibidas�, es decir órdenes concretas para que nadie vigilara a determinadas empresas de salud. En ella se relata, además, dónde terminaban los reclamos que los jubilados hacían al PAMI Escucha, la línea telefónica abierta para recibir sus denuncias. Estos son algunos de esos casos:
Susana Cutello es una jubilada que se internó en el Sanatorio San Patricio. Denunció que le habían hecho estudios que no tenían nada que ver con su enfermedad, por lo que su enfermedad se agravó y debió ser trasladada a otro hospital. La investigación posterior comprobó que efectivamente el tratamiento recibido había sido �parcial e incompleto�. Los hombres de Alderete decidieron descargar contra la clínica una sanción ejemplar: formular a sus responsables un �severo llamado de atención�. Nada de multas, pedidos de explicación ni sanciones para que los encargados de la salud cumplieran con su función de curar.
Lo mismo ocurrió con la denuncia de Margarita Greco, que entró caminando al Sanatorio Modelo Burzaco y terminó internada en terapia intensiva, según se dice en el expediente �por la mala atención dispensada�. O con el Sanatorio 24 de Septiembre, donde el Area de Investigaciones del PAMI dictaminó una supuesta irregularidad en la atención médica. Históricamente, los reglamentos fijaban multas en dinero contante y sonante a los prestadores que, como en estos casos, habían incumplido con los servicios. Pero de 1997 en adelante toda sanción que tocara al bolsillo se reemplazó con los �llamados de atención� como una única medida disciplinaria.
Los auditores del interior del país no tuvieron mejor suerte. En 1997, poco después de que Alderete se convirtiera en presidente del PAMI, un equipo de técnicos viajó a la provincia de San Juan para hacer una inspección de rutina a la gerenciadora de servicios médicos ADOS-PANASIS. A los responsables de ese grupo económico les molestó la �intromisión� y se negaron a mostrar sus libros contables. Mientras los funcionarios del PAMI peleaban por hacer su trabajo, recibieron un telefonazo desde Buenos Aires. Los hombres de Alderete ordenaron el inmediato regreso del equipo y desde entonces no volvió a hacerse una sola auditoría sobre las gerenciadoras.
Lo mismo pasó con los programas sociales como el Pro Bienestar, que reparte bolsones de comida a los jubilados de menores recursos. Apenas iniciado el �97, un grupo de técnicos del PAMI intentó revisar el programa y recibió un parate telefónico desde Buenos Aires. De ahí en más nadie volvió a controlar el Plan en ningún punto del país.
OPINIONES SOBRE EL PRESO MAS SIGNIFICATIVO DEL MOMENTO
Sólo lo defienden su abogado y Kohan
Graciela Fernández Meijide, ministra de Desarrollo Social: �Con la detención de Alderete se establece el valor de la ley. (El ex presidente Carlos) Menem siempre dijo lo mismo y la verdad esto no fue tomado como una cuestión política, sino como un reestablecimiento del `deber ser�. El arresto del ex funcionario no se puede festejar porque fueron demasiados años de perjudicar a mucha gente. Esto no fue tomado como una cuestión política, sino como un reestablecimiento del deber ser, se reestableció el valor de la ley. Jamás sabremos cuánto sufrió la gente que dejó de recibir los beneficios que le correspondían, la gente que falleció por mala atención o a los que se les agudizó una enfermedad por falta de atención. Eso nunca se repara�.
Rafael Pascual, presidente de la Cámara de Diputados: �El señor Alderete ha sido un paradigma de la corrupción en la Argentina a través de los desastres que hizo en el PAMI durante muchísimo tiempo. Fue cuestionado no de ahora, sino durante prácticamente toda su gestión desde varios sectores, incluso desde el propio Partido Justicialista en aquel momento. De ninguna manera esto es una persecución política. La Justicia ha actuado, a mi criterio con alguna lentitud, pero ha llegado finalmente�.
Alberto Kohan, ex secretario general de la Presidencia durante la gestión menemista: �Si nos ponemos a pensar que había medios que iban adelantando los fallos del juez y las decisiones de la Cámara, yo diría que sí es un perseguido político. Creo en la honestidad de Alderete, mientras la Justicia no dictamine lo contrario. Estoy preocupado por la situación de un hombre al que he visto trabajar con mucha fuerza. Es una situación difícil la que está pasando. Dejemos que sea la Justicia la que determine. Hasta ahora lo que he visto es que el Gobierno ha tenido mucho tiempo dedicado a quejarse de lo que recibió, cosa que si nosotros hubiéramos hecho, hubiéramos pasado los diez años quejándonos. Algunos medios de comunicación se han dedicado a condenar por sospecha olvidándose de que en Argentina hubo una época en la que la gente se moría por sospechas. No necesariamente por ser funcionario público uno tiene que ser corrupto y no necesariamente por ser periodista tiene que ser honesto; las sospechas a veces no tienen nada que ver con la realidad�.
Leopoldo Moreau, senador nacional Alianza: �Con la detención de Alderete se comienza a terminar la impunidad. La decisión del juez Adolfo Bagnasco ha fortalecido la confianza de la sociedad argentina en la democracia y el funcionamiento de sus instituciones. La perseverancia de la Alianza en poner transparencia a los actos de gobierno debe ser destacada, hasta aquí, como uno de sus mayores logros. Lo sucedido en el PAMI bajo la gestión de Alderete fue una verdadera afrenta para la condición que viven los jubilados, los que hoy seguramente estarán festejando que la Justicia empiece a poner las cosas en su lugar�.
León Arslanian, abogado defensor de Alderete: �El ex titular del PAMI es víctima de una persecución. Esto viene de una consigna de la campaña electoral, de modo que es perfectamente posible que haya un objetivo político en este sentido. En el caso de mi cliente hay una persistencia en las operaciones de prensa y con operadores de prensa instalados dentro del Palacio de Justicia. El otro día escuché lo que dijo un ministro en el programa de Lanata, en cuanto a que en una reunión de gabinete el vicepresidente (Carlos Alvarez) dijo que, dado que no le podían dar pan al pueblo, entonces le darían un preso. Además esto era una consigna de la campaña electoral. El problema acá es el PAMI, donde convergen intereses de distinta naturaleza, hay peleas intestinas entre los contratistas que pugnan por conseguir un suculento contrato y los desplazados buscan hacer denuncias. No terminó de sentarse (Cecilia) Felgueras y está llena de denuncias�.
|