Por Raúl Kollmann
Descartada la hipótesis del atentado, el caso Rodrigo parece derivar en una durísima puja judicial. Los abogados del cantante pretenden que se acuse al conductor de la camioneta blanca, Alfredo Pesquera, por homicidio con dolo eventual, que tiene una pena de 8 a 25 años de prisión. Sostienen que quien maneja un vehículo a 120 kilómetros por hora, se cruza y va toreando al otro con el freno, tiene que tener en mente que puede producir una muerte. Los letrados consideran que es un caso igual al de Sebastián Cabello, aquel joven que corriendo una picada mató a una madre y su hija en la Avenida Lugones. Como réplica, los abogados de Pesquera dicen que su cliente no tuvo nada que ver con el accidente, que en verdad Rodrigo perdió el control de su vehículo y prácticamente se mató solo. Por ahora, la carátula que el caso tiene en la Justicia es �averiguación por homicidio culposo�, es decir un accidente por imprudencia. Si a lo largo de la investigación se prueba que el culpable de la imprudencia fue Rodrigo, la familia del otro fallecido, Fernando Olmedo, podría iniciarle juicio por indemnización a los herederos de Rodrigo.
Los encargados de la pesquisa no trabajan ninguna hipótesis que tenga que ver con un atentado. Los elementos que nítidamente descartan que haya existido un plan para matar al cantante son los siguientes:
En un ataque mafioso hubieran usado una camioneta robada. Además, obviamente hubieran cambiado las patentes del vehículo. Se trataba de un crimen y en operaciones mafiosas de ese tipo, las precauciones que se toman para no dejar huellas son las máximas.
Un atentado se perpetra con un conductor anónimo, supuestamente vinculado a la mafia y con frondoso prontuario de killer. En el caso Rodrigo, la camioneta la manejaba un comerciante en computadoras, conocido en el ramo y sin antecedentes policiales.
En la intimidad, los investigadores sonríen con desprecio frente a los abogados que quieren hacer su negocio llenándole la cabeza a la familia de Rodrigo con la hipótesis del atentado.
Así las cosas, la batalla legal se centra en las características del accidente. Miguel Angel Pierri, el abogado de Rodrigo, pretende que la Justicia acuse a Pesquera, el conductor de la camioneta blanca, por el delito de homicidio con dolo eventual. Esto significa que no hubo sólo irresponsabilidad, una mala maniobra, sino que el conductor �debió imaginarse el resultado que iba producir con su accionar�, según le dijo Pierri a Página/12. El caso más reciente y que se asimila a lo que pide el letrado es el de Sebastián Cabello, aquel joven que corría picadas con autos preparados en la Avenida Lugones y que en su loca carrera terminó con la vida de una madre y una hija.
Como es lógico, Fernando Burlando, el defensor de Pesquera, sostiene una visión totalmente opuesta y hasta da una versión distinta de los hechos. Burlando dice que Pesquera pasó a Rodrigo poco después del peaje, que tres kilómetros más adelante el cantante lo quiso sobrepasar y le hizo luces, pero que no hubo ni maniobras ni frenadas: Rodrigo habría perdido por sí solo el control del vehículo.
En su favor, Pesquera tiene un hecho que está casi demostrado: las camionetas no se tocaron. Los raspones que la Blazer blanca tiene adelante y atrás serían de vieja y data y da la impresión que el color rojo que tienen es de la masilla que sirve de base a los paragolpes y no de la pintura de la camioneta de Rodrigo. De todas maneras, pudo haber una encerrona aunque los vehículos no se hayan tocado, y que ello le haya hecho perder el control al cantante. Además, Pesquera tiene un punto en contra: no paró para auxiliar a las víctimas del accidente, a pesar de que reconoce que vio por el espejo retrovisor como se estrellaba la camioneta. Hasta el momento, la causa está caratulada como Averiguación por homicidio culposo, es decir un accidente donde uno de los participantesactuó con imprudencia. Desde el punto de vista penal, si resulta que el imprudente fue Pesquera, el delito sería excarcelable a menos que efectivamente se le impute el homicidio doloso. Además, Pesquera debería afrontar un juicio civil por indemnización tanto de la familia de Rodrigo como de Fernando Olmedo. Si el imprudente fue Rodrigo, no hay causa penal porque está muerto, pero la familia de Olmedo podría accionar contra los herederos de Rodrigo reclamando una indemnización.
Monolito con camino propio
El intendente del partido de Berazategui, Carlos Infanzón, autorizó a levantar un camino directo al santuario de Rodrigo, a unos metros de la Autopista Buenos Aires-La Plata, en el lugar exacto donde ocurrió el accidente, luego de pedir a la gente que no cruce la autopista de noche. El funcionario detalló que la firma Coviares (concesionaria de la Autopista Buenos Aires-La Plata) se negó porque no le corresponde por contrato. �Pero cuando se le avisó que le va a salir más caro si muere alguien, accedió inmediatamente�, dijo el intendente. Con la apertura del camino, el tramo de 800 metros entre el puente de la 14 y el lugar del accidente podrá ser transitado sin temor por los 300 fans que a diario cruzan la autopista para llevarle al incipiente mausoleo del bailantero desde flores hasta latas de cerveza. En tanto, un proyecto ingresado al Concejo Deliberante de La Plata propone colocar una placa recordatoria en �Escándalo�, el local donde el cantante actuó por última vez. |
La película, en un cajón
�Ese libro quedará en un cajón como un recuerdo de algo que no pudo ser.� De esa manera, Ramón �Palito� Ortega dio por terminado su proyecto de hacer una película sobre Rodrigo, con quien estaba trabajando en el libro que derivaría en el filme.
El senador afirmó que, en realidad, el malogrado proyecto no estaba inspirado específicamente en la vida de Rodrigo aunque tenía aristas que le correspondían, como que �empezaba en un barrio de Córdoba practicando boxeo y ahí empezaba a desarrollarse una historia� relacionada �con la realidad del país�. �Teníamos que buscarle algún tema interesante, que tenga que ver con una realidad argentina como es el tema de la discapacidad, las leyes que no se cumplen y el lugar que no se respeta a todos los que tienen un problema�, comentó sobre el guión que, dijo que �ya estaba terminado�. Ortega trabajaba también junto a Jorge Guinzburg en la producción de la película.
Según contó, el papel de Rodrigo iba a ser el de un cantante con escenas musicales al que incluirían la historia de la discapacidad �a través de una persona que él buscaba, que finalmente la encontraba y tenía ese problema�. |
|