Por Felipe Yapur
 La publicación del listado completo de los 3156 empleados del Senado de la Nación por decisión del vicepresidente Carlos �Chacho� Alvarez generó poca adhesión y mucho malhumor, reparos y rechazos. Lo llamativo fue que el malestar por la medida no era exclusivo de la oposición, sino que un gran número de legisladores de la Alianza también se mostraron contrarios con la actitud de Alvarez, quien mantiene un profundo enfrentamiento con los representantes del justicialismo y que con esta maniobra, como consideró un senador radical, �ensucia a todos�. El único senador que respondió públicamente a Chacho fue el titular del bloque del PJ, Augusto Alasino, quien aseguró que se buscó �ocultar la manifiesta deficiencia para detectar ñoquis, porque no puede o porque no quiere hacerlo�.
Una de las muestras más claras de que esta maniobra cayó mal a propios y extraños fue la presión que recibió el frepasista Pedro Del Piero por parte de sus camaradas de bloque. Varios senadores le pidieron que retirara su proyecto de publicar la lista completa de los empleados destacando la categoría, fecha de ingreso, dependencia en la que presta servicios, horario de trabajo, altas y bajas mensuales de cada empleado del Senado. Lo que nadie se animó a desmentir, tanto en la Alianza como en el PJ, fue que la maniobra de Alvarez en realidad parece apuntar a restar legitimidad al mayor poder institucional que retiene el PJ en el Senado a pesar de la derrota electoral de octubre del �99.
El malhumor de los senadores se pudo palpar en los pasillos del Parlamento. La repetida aparición de sus apellidos en el listado generó más de un comentario y sobre todo justificativos de los nombramientos a tales o cuales parientes. Todos, absolutamente todos, utilizaron el mismo pretexto para: �Son gente de absoluta confianza�. Pero otros, como el justicialista Ricardo Branda, intentando ser más original que sus pares, se dedicó a repartir personalmente un alto de fotocopias del curriculum de su primo, Luis Branda, que ocupa transitoriamente el cargo de asesor. De todas maneras, dijo que lo de Alvarez era lo más parecido a �una caza de brujas� y aseguró que la transformación del Congreso se producirá recién en el 2001, cuando se renueve por completo el Parlamento.
Pero sin duda, el más ofuscado fue Alasino, quien a pesar de reiterar que sus quejas las realizaba a título personal, varios senadores lo acompañaron durante una conferencia de prensa. �Esto es una operación dura que no sólo desprestigia a todo el cuerpo por ser incompleta y tendenciosa, sino que además desvirtúa y cambia la realidad�, aseguró al tiempo que acusó a Chacho de aplicar una �cortina de humo para tapar el tema de los ñoquis. Debería detectarlos y echarlos�. De todas formas, el presidente del bloque del PJ eludió decir dónde están para él los ñoquis del Congreso y prefirió recordar que Alvarez nombró 61 empleados nuevos, �la misma cantidad que tuvo (Carlos) Ruckauf�, dijo.
Otro senador justicialista, más calmo que Alasino, dijo que la actitud de Alvarez fue desmedida: �El dice que responde así porque nosotros queremos limitarle sus funciones administrativas. Pero en realidad ese proyecto está congelado�, dice y asegura que lo que en definitiva Chacho logra es desgastar su relación con sus socios de la UCR: �Esta maniobra perjudica más a los radicales que a nosotros. Ellos son gobierno y con esta maniobra se demuestra que tienen la misma cantidad o más empleados que nosotros. Hacia afuera esto demuestra que ellos no son diferentes�.
Los radicales, por su lado, masticaban la misma bronca que sus pares de la oposición. �Nos ensucia a todos y no genera ningún beneficio político�, aseguró un veterano senador oficialista, quien luego indicó que los empleados de muchos de los legisladores sobrepasan un poco el cupo de empleados porque �muchos son heredados�. En tanto, Mario Losada se quejó de la falta de información que tiene el listado publicado por la presidencia del Senado y expresó que �lo que se hizo no sirve de nada, porque la lista está incompleta�. El único que se mostró conforme con lo realizado por Alvarez fue ultradelarruista José Genoud.
Pero el desagrado de aparecer en las listas trascendió los límites del Parlamento. El ex bordonista Gerardo Conte Grand aclaró que nada tiene que ver con las personas que figuran en el listado con su mismo apellido.
PASCUAL INVITO A CAVALLO A
SUMARSE AL DIALOGO
Un asadito para limar asperezas
Por José Natanson
Como para que no se ofenda entre tanta invitación a justicialistas, Fernando de la Rúa decidió sumar a Domingo Cavallo a la propuesta de diálogo social. El viernes pasado, Rafael Pascual almorzó con el economista en el restaurante La Raya. Asado de por medio, el jefe de la Cámara de Diputados sondeó la posición de Cavallo respecto de los decretos del recorte y lo invitó a incorporarse a la mesa de consenso impulsada por el Gobierno.
El capital político del ex ministro de Economía quedó bastante deteriorado luego de su aplastante derrota en la Capital y de la conferencia de prensa que lo mostró furioso como pocas veces. De todos modos, Cavallo sigue controlando un bloque de doce diputados. Por lo tanto, su posición muchas veces es clave para la Alianza, cuya hegemonía numérica en la Cámara baja se encuentra mermada a raíz de la aparición del subloque de legisladores rebeldes.
Para no dejar al ex ministro afuera de la convocatoria, De la Rúa dio instrucciones a Pascual, su operador favorito en Diputados. El radical reservó una mesa en la parrilla de Palermo y el viernes pasado almorzó con Cavallo, quien llegó junto al jefe de Acción por la República, Armando Caro Figueroa, y el titular del bloque, Guillermo Francos.
Luego de pedir una entrada de bocaditos de acelga, Pascual invitó formalmente a Cavallo para que se sume al diálogo y añadió que en los próximos días recibiría una propuesta formal. Aunque aceptó la invitación, el ex ministro no pudo con su genio: �Vamos a ir, pero con propuestas�, dijo Cavallo. Y a continuación se despachó con una larguísima explicación sobre los efectos negativos de las reformas impositivas.
Cuando ya habían pasado al asado con ensalada, Pascual sondeó la posición de Cavallo respecto de los decretos del recorte, que el Senado había rechazado y que el Gobierno confía en ratificar hoy en la Cámara baja. �Vamos a analizar paso por paso�, dijo el ex ministro. Ayer, con Cavallo de viaje, el bloque de Acción por la República resolvió que apoyará los decretos de desregulación de las obras sociales y de recorte de las jubilaciones de privilegio, pero rechazará el de la poda a los salarios de los empleados públicos.
En el final del almuerzo, la charla derivó al equilibrio institucional en la Legislatura porteña, en donde el cavallismo y Gustavo Beliz constituyen la primera fuerza opositora. Entre café y café, Pascual prometió informar a De la Rúa de los resultados del encuentro, el primero de carácter formal que se realiza entre la Alianza y Acción por la República desde las elecciones porteñas. Se despidieron con promesas de futuras reuniones. Y Cavallo, que había criticado a Pascual por haberle negado a su partido la vicepresidencia tercera de Diputados, por una vez parecía contento: la convocatoria al diálogo le dará un poco de aire luego del ostracismo impuesto por la reciente derrota en la Capital.
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