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EL BALSERITO VOLVIO A LA HABANA
 CON SU PADRE DESPUES DE UNA SAGA DE SIETE MESES
No hay nada mas lindo que la familia unida

Ayer se cerró la saga de Elián, después de que la Corte Suprema de Estados Unidos se negara a tomar el caso ante un pedido de los familiares de Miami. Por la tarde, el balserito partió de regreso a Cuba junto a su padre.

Una imagen familiar de Elián en Estados Unidos junto a su padre, su hermano y su madrastra.


Por Javier del Pino
Desde Washington 

t.gif (862 bytes) La odisea de Elián González en Estados Unidos terminó ayer cuando la Corte Suprema anuló en Washington el último impedimento judicial que retenía al niño cubano y a su padre en este país. Al mediodía, en la última sesión antes de suspender su trabajo durante el verano, el máximo tribunal renunció a estudiar el caso. Los jueces, en un comunicado breve pero contundente, escribieron el final del interminable recorrido judicial que ha tenido el �caso Elián González�: �Se deniega la petición de aplazamiento presentada al juez Kennedy y trasladada por él a este tribunal. Se deniega la tramitación de un recurso�. Con la primera frase se anulaba la posibilidad de que Elián y su padre tuvieran que quedarse en Estados Unidos más allá de las 4 de la tarde de ayer (hora de Washington), como había determinado la Corte de Apelaciones de Atlanta; con la segunda disposición el caso quedaba definitivamente cerrado. 
La decisión de la Corte Suprema puso fin a siete meses de batalla familiar y política, y confirma, en último término, que sólo el padre puede tomar decisiones sobre su hijo; ni él ni otros familiares pueden decidir su futuro. Elián Gonzalez y su padre han vivido en Washington los últimos meses acompañados de varios amigos del niño y sus respectivos padres. Su abogado, Gregory Craig, ha pasado los últimos días recordando a los jueces de la Corte que cada día que Elián y su padre pasaban en el país �provoca en ellos un daño inmenso e irreparable�. Craig, uno de los abogados más caros de Washington y ex defensor del presidente Bill Clinton en el escándalo Lewinsky, se encargó personalmente de los preparativos del viaje de regreso a Cuba. Clinton, por su parte, reconoció que �habría deseado que el caso se desarrollara en una forma menos dramática, menos traumática para todos los involucrados. Pero no creo que tuviésemos opciones diferentes. El principio fundamental es el correcto, y estoy contento de que lo hicimos�.
En Miami, algunos de los familiares de Elián que lucharon por su custodia �amparados política y económicamente por la poderosa Fundación Nacional Cubano-Americana� acudieron a la casa que compartieron con el niño. Aunque ya no viven allí (y han mantenido un �perfil bajo� desde que la policía se llevó al niño el 22 de abril), el pequeño chalet se ha convertido en un lugar a mitad de camino entre un santuario para anticastristas y un objetivo fotográfico para turistas. Unos 50 manifestantes se agruparon frente a la casa al grito de �Elián no se va, lo dijo su mamá� y �Abajo el gobierno comunista de Clinton�, mientras otros se concentraban ante la sede del Servicio de Naturalización e Inmigración (INS). Varios representantes de las organizaciones anticastristas y algunos miembros del poder municipal pidieron calma a la comunidad cubano-americana de Miami, aunque en principio los ánimos parecían moderadamente calmados. Mientras tanto, en Washington, Elián y su padre acudieron a misa a una iglesia metodista que no fue elegida por casualidad: está situada justo frente al Capitolio, al lado de la Corte Suprema en la que se decidía su futuro inmediato. 
El regreso de Elián se produce en un momento histórico para las relaciones entre Cuba y Estados Unidos: el Congreso se dispone a aceptar formalmente a través de una votación el pacto político ente demócratas y republicanos para aliviar parcialmente el embargo a Cuba. El Senado y el presidente Clinton no pondrán trabas a una medida que permite la venta de medicinas y alimentos a la isla, aunque mantiene la prohibición de que los pagos se realicen a través de entidades financieras estadounidenses. En política doméstica, la polémica sobre Elián González ha sido otro factor de criterio único entre los seguros candidatos presidenciales, elvicepresidente Al Gore y el gobernador de Texas George W. Bush Jr. Aunque el candidato demócrata mostró hace meses ciertas dudas sobre la forma en la que el gobierno del que es parte había llevado el caso, ahora pidió �respeto para la decisión judicial�. Su par republicano, en cambio, aseguró que �me siento triste de que la tierra de la libertad envíe a un niño al comunismo de Cuba�.
Dado que también deben contentar a la poderosa y numerosa comunidad cubano-americana en el exilio, los dos líderes políticos expresaron su certeza de que todo habría sido más sencillo si hubiese quedado en manos de un tribunal familiar, que era una de las opciones defendidas por la familia de Miami. Casualmente, en las últimas semanas, Al Gore ha sido vecino de Elián. La casa en la que residía el niño con su padre y sus amigos cubanos está separada por una valla de la residencia del vicepresidente en el Observatorio Naval de Washington. Desde allí partió la comitiva hacia el aeropuerto internacional de Washington. A las cuatro de la tarde, media hora antes de lo previsto por las malas condiciones meteorológicas, Elián, su padre y sus amigos abordaron dos jets con capacidad para ocho y siete personas, ya que no pudieron conseguir un avión más grande. A su llegada, Elián descansará en una mansión a orillas del mar, en el barrio habanero de Miramar, con pileta, sala de juegos y parque, que Fidel Castro visitó el mes pasado, cuando explicó que se trata de un �lugar de transición� entre Estados Unidos y Cárdenas.

 


 

EL LARGO ADIOS AL MUCHACHO DE LA PROXIMA PUERTA
Relatos sobre un náufrago

The Guardian de Gran Bretaña
Por Duncan Campbell
Desde Los Angeles

La larga saga del niño cubano de seis años, recogido del Atlántico en la costa de Florida el día de Acción de Gracias del año pasado, llegó finalmente ayer a su fin. En los meses desde que Elián González fue rescatado del mar, su destino provocó enormes controversias, un cambio en las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, un debate sobre los derechos de padres e hijos, el alejamiento de un jefe de policía y otros funcionarios públicos en Miami y una conmoción digna de Hollywood. Para Elián González, uno de las últimas imágenes de los Estados Unidos será la de los helicópteros de la televisión sobrevolando la casa al noroeste de Washington donde vivía con su padre después de haber sido separado de sus otros parientes en Miami. El y cuatro compañeros de escuela de Cuba que se habían reunido con él en Estados Unidos en los dos últimos meses, saludaban a las tripulaciones. Había sido un largo adiós. 
La semana pasada, una resolución unánime de 12 jueces de la Corte Federal de Apelaciones en Atlanta inició el último capítulo. La Corte Suprema declinó en Washington escuchar más argumentos y en una breve declaración rechazó la apelación de los parientes de Miami. Sin duda, el máximo tribunal norteamericano estuvo influido por las presentaciones de los abogados del padre de Elián, quienes sostenían que la prolongación de la disputa legal provocaría un �daño irreparable�. Hubo una sensación de fatalidad una vez que fue conocida la decisión. La historia que despertaba recuerdos de la Guerra Fría llegaba a su fin. 
Elián fue uno de los tres sobrevivientes del naufragio de noviembre en el que murió su madre y otras 10 personas. Cuando un pescador, Donato Dalrymple, vislumbró al niño entre los restos del naufragio, apenas podía creer que estuviera vivo. Que Elián sobreviviera le dio un halo casi místico entre la comunidad cubana en el exilio de la Pequeña Habana en Miami. Pero el rescate del niño pronto pasó de ser un asunto de asombro a ser una amarga batalla entre los exiliados cubanos anticastristas que dominan la política de Miami y aquellos que están de acuerdo con el gobierno cubano en que el niño debía volver con su padre, Juan Miguel González. Para los exiliados, Elián representaba una oportunidad para atacar a Castro y sugerir que enviarlo de regreso a Cuba era el equivalente a enviar a un judío de vuelta a la Alemania nazi.
Al principio, los parientes parecían tener éxito en sus esfuerzos por quedarse con el niño, pero gradualmente la opinión legal y pública se les volvió en contra. Cuando Elián estaba viviendo con sus parientes de Miami, aparecía todos los días en televisión, jugando con nuevos juguetes y yendo a parques de diversión. La familia contrató abogados para facilitar la adopción del niño y rechazó un pedido de la ministra de Justicia Janet Reno para devolverlo a su padre apenas éste llegara de Cuba. 
Eso produjo la divisoria de aguas del 22 de abril, cuando los agentes federales allanaron a la madrugada la casa de Miami donde estaba viviendo Elián. Las imágenes del niño arrancado de los brazos de sus familiares a punta de rifle dieron la vuelta al mundo y hubo mucha furia en las calles. Pero Reno surgió del allanamiento con una imagen más favorable que la que esperaban los parientes, y resultó claro, a través de las encuestas de opinión, que más del 60 por ciento de público norteamericano aprobaba su accionar y se había cansado de las ruidosas denuncias de los exiliados cubanos contra ella y contra la posición del gobierno de Estados Unidos. 
Los dos candidatos presidenciales entraron en la contienda. George W. Bush dijo que él creía que todo debía haberse tratado en los tribunales de familia, y el vicepresidente Al Gore hizo una desafortunada intervención, distanciándose del gobierno, en lo que fue visto como un intento oportunista por congraciarse con los exiliados cubanos. Lo que ahora también está bajo discusión es el doble standard aplicado a los inmigrantes, por el cual los haitianos, que también arriesgan su vida porllegar a Estados Unidos, son deportados de a miles si son descubiertos en tierra, mientras que los cubanos que llegan a las costas de Estados Unidos se pueden quedar. El año pasado, 1218 menores no acompañados como Elián fueron devueltos a sus patrias sin publicidad alguna. Ayer, el ambiente en Miami era de resignación, aunque no de aceptación. Ahora, una de las preguntas que quedan es cuán exactas serán las dos películas sobre la saga de Elián. Pero no importa cuál sea la respuesta, porque para Elián González, el niño de seis años más observado del mundo, la vida nunca volverá a ser la misma. 

Traducción: Celita Doyhambéhère.

 

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