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El ministro de Seguridad bonaerense, Ramón Verón, negó ayer en forma rotunda que policías de la provincia estuvieran involucrados en los robos y torturas sufridas en los últimos meses por familias bolivianas residentes en Escobar. Verón salió así a defender a su tropa, un día después de que este diario revelara que la Justicia investiga la participación policial en esos ataques. El ministro tampoco se privó de criticar al interventor del Inadi, Raúl Zaffaroni, el funcionario del gobierno nacional que se reunió con los bolivianos en Escobar, tras lo cual abonó la hipótesis de que hay uniformados vinculados con esos robos con claros ingredientes xenófobos. �Respeto la opinión de Raúl Zaffaroni (interventor del Instituto Nacional Contra la Discriminación, Inadi), pero me pareció desacertado que involucre a la institución� policial en esos hechos, se quejó Verón. El ministro se mostró molesto porque �gratuitamente se le adjudique (a la fuerza) un hecho no comprobado. Me gustaría �dijo� que si (Zaffaroni) tiene pruebas las denuncie, las aporte�. El interventor del Inadi había manifestado su impresión de que �por las características, los ataques pudieron haber sido producidos por ex miembros de fuerzas de seguridad� y anticipó que el organismo que preside patrocinará legalmente a los damnificados. Más allá de que el ministro descargara su furia contra Zaffaroni, en realidad es la propia Justicia la que sospecha que entre los grupos que roban y torturan a miembros de la comunidad boliviana �en ataques con notorios contenidos racistas� se encuentran miembros de la policía que depende de Verón. El dato fue confirmado a este diario por fuentes de la propia fuerza. Sin embargo, Verón aseguró que �hasta el momento no tenemos ningún elemento como para relacionar a la policía (con los ataques), lo que no quiere decir que el día de mañana no aparezca y la propia institución haga lo que corresponde con eso�. El ministro manifestó su malestar porque se involucra a policías, pero �no se menciona que hace un mes y medio se detuvo a una banda en la zona de Capilla del Señor que afecta a la comunidad radicada en esa zona y en ningún caso aparecían policías�: se trata de una información oportunamente publicada por este diario. Por su parte, el ministro del Interior, Federico Storani, se reunirá esta tarde junto a Zaffaroni en Casa de Gobierno, con el canciller boliviano, Javier Murillo de la Rocha. Según adelantó, Storani transmitirá al canciller �la preocupación y repudio por estos hechos� y lo pondrá al tanto de las gestiones que realiza el gobierno nacional sobre el tema. En tanto, el presidente del bloque de senadores bonaerenses del Frepaso, Eduardo Sigal, recibió ayer en la Legislatura a Basilia Gareca, esposa de Fidencio Choque, el quintero asaltado y torturado por un grupo de encapuchados y que permanece internado por las heridas sufridas. La mujer, que fue a la Cámara acompañada por sus hijos Lázaro (de 22 años), Norma Cristina (14) y Fernando (9) �los dos últimos son argentinos�, dijo que �hace 18 años que vivimos en este país, estamos documentados y queremos que nuestros hijos tengan futuro en esta tierra�. Tras el encuentro, Sigal pidió una reunión �urgente� con Verón para solicitarle que investigara �a fondo las agresiones a ciudadanos bolivianos y que se refuercen las medidas de seguridad en la zona de quintas del partido de Escobar�. �Hay una clara ineficiencia del aparato estatal. Los ataques se suceden desde hace dos meses, ya hay 70 casos y se siguen repitiendo. Nosotros creemos que aquí hay una asociación ilícita y lo que exigimos es ir a fondo en esto�, sostuvo Sigal. Luego de esta reunión, Gabriel Hourmilougue, asesor en derechos humanos de la bancada frepasista, que investigó las agresiones a bolivianos, relató que hubo también casos de extorsión. Según dijo, representantes de una inexistente organización gremial de horticultores exigían dinero a los quinteros por supuestos �problemas de indocumentación de trabajadorescontratados�. Dos de los quinteros denunciaron haber sido golpeados �días más tarde, cuando no cumplieron con el pago de la cuota�.
UN MICRO TRUCHO ARRASTRO A UNA CHICA Y LA MATO A las 7.30, el centro de Florencio Varela estaba repleto. Yamila, una adolescente de 14 años, se bajó del charter que la llevaba al colegio Sagrado Corazón. Pero nunca pudo pisar tierra firme. Una correa de su mochila quedó enganchada en la puerta del micro trucho en el que viajaba y fue arrastrada cien metros mientras gritaba. Cuando finalmente la mochila se soltó, la adolescente quedó tendida en el pavimento y una de las ruedas del micro pasó sobre ella. Yamila fue trasladada al hospital Mi Pueblo, pero murió en el trayecto. En tanto, el chofer huyó, aunque dos horas después se presentó en la seccional 1ª y quedó detenido por homicidio culposo.
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